Un estadio de quita y pon que eleva hasta un 10% la facturación hostelera

La ‘startup’ española KOP Stadium crea una aplicación para reservar y ver eventos deportivos en gradas retráctiles en bares y restaurantes con la que aspiran a crear el estadio descentralizado más grande del mundo y llegar a acuerdos con clubes para convertirse en una especie de ticket B de sus campos.

Entre el 23 y el 24 de enero de 1900, en torno a 3.000 Fusileros de Lancashire procedentes de Liverpool perecieron en una sangrienta derrota frente a los bóers en Spion Kop (colina de Spion en afrikáner). El escenario de esta derrota británica en la Segunda Guerra Bóer, por su fuerte pendiente, inspiró 6 años después a un periodista local para bautizar a la grada más famosa del estadio de Anfield, sede del Liverpool FC, como The Kop.

Más de un siglo después de su construcción, esta grada sirvió a una startup española para explicar el espíritu de una aplicación que, según su fundador, Federico de Vicente, “nació para cambiar radicalmente la forma en la que se ven las retransmisiones deportivas en los bares a través del estadio descentralizado más grande del mundo”. La aplicación de KOP Stadium surgió a finales de 2021 en un contexto marcado por las restricciones a los aforos a raíz de la pandemia y la necesidad de aumentar la digitalización de bares y restaurantes. “La idea surge de lo aburrido que es ver el fútbol en la tele y del alto precio que a veces hay que pagar por acceder a un estadio o la falta de asientos, en muchos casos”, explica De Vicente, “por lo que pensamos en cómo conseguir que quien acude a un bar a ver un evento deportivo disfrute de una experiencia verdaderamente inmersiva”. Para crear el ambiente de estadio, la app permite reservar un asiento en una grada retráctil que se instala en un establecimiento hostelero por una entrada de 5 euros con consumición. “La grada se abre en dos minutos convirtiendo una sala vacía en un estadio con hasta 26 asientos en los que vivir una experiencia similar a la de un recinto deportivo, pero sin tabaco, con una cervecita y comiendo... lo más cercano a un estadio británico”.

En este modelo de negocio, KOP Stadium se queda el precio de las entradas y los bares con la facturación del consumo adicional. Su fundador explica con un ejemplo: “Trabajamos con una peña del Granada con 100 miembros en Madrid que no tienen posibilidad de ver los partidos de su equipo un lunes por la noche. Con nosotros ese problema desaparece y, además, llenamos el local al hostelero en un día y una franja horaria en los que habitualmente no tiene ingresos. En 2024 creemos que podemos empezar a plantear a los clubes acuerdos para convertirnos en un ticket B cuando se agoten las entradas en sus estadios”. La inversión en equipo corre a cargo de la startup, que instala esa grada que el hostelero aprovecha cuando está cerrada como mobiliario, además del proyector y la pantalla 4K donde se retransmiten los eventos, así como el sistema de sonido envolvente que recrea el ambiente. Además de ahorrarse la cuota de la plataforma de televisión, los usuarios tienen un sistema de geolocalización que muestra los KOPS disponibles para cada evento. La app también se conecta con el sistema de gestión del local, de manera que los pedidos adicionales se hacen directamente desde el asiento, además de permitir a los usuarios participar en juegos, promociones o chatear, “porque imaginamos un futuro en el que dos fans de uno y otro lado del Atlántico se puedan conectar para vivir juntos un clásico Madrid-Barça, por ejemplo”.

Con apenas un año de trayectoria, “cerramos 2022 con 3.500 usuarios registrados, 12 gradas instaladas en España y más de 1.200 eventos retransmitidos que generaron un aumento medio de ingresos del 10%. Tenemos la idea de terminar este año con 30 instalaciones y llegar al centenar en 2024, para después dar el salto internacional en 2026 con el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá en mente”, explica De Vicente. Como en cualquier proyecto digital, las mediciones de KOP Stadium sirven para certificar que su iniciativa gusta, ya que generaron un promedio de nuevos clientes en los locales del 41%, con un índice de repetición del 29% en caso de retransmisión y del 33% sin emisión de eventos. Uno de estos puntos está en el bar Los Torreznos de López de Hoyos (Madrid), cuyo propietario, José Luis Blázquez López, corrobora el aumento de la afluencia, la llegada de nuevo público y más ingresos: “muchos de los clientes repiten cuando juega su equipo y eso es señal de que están a gusto con el concepto y la experiencia. Por otra parte, como es plegable, cuando no montamos la grada, dedicamos el espacio a dar apoyo a nuestro bar-restaurante e incluso a eventos privados”. Este público además no se limita a los aficionados al fútbol, como recalca el consejero delegado de la tecnológica, ya que, “además de la reciente fiebre de la Fórmula 1 con el resurgir de Fernando Alonso, hemos descubierto un nicho muy importante entre los más jóvenes y su afición a compartir el visionado de torneos de eSports y los eGames”.