Lucciano’s vence la estacionalidad y rompe moldes con sus heladerías

Con tan solo dos locales en nuestro país, que abrieron en mayo en Barcelona y en junio en Málaga, la cadena argentina de heladerías premium Lucciano’s logró facturar en 2022 en torno a 5 millones de euros y generar colas a las puertas de sus establecimientos a pesar de tener un ticket medio de entre 12,5 y 14 euros. ¿Cómo lo consiguieron? Lo explica Daniel Otero, co fundador junto a su hijo Christian en 2011 en Mar del Plata de una firma de helados artesanos que se ha expandido hasta superar los 60 locales operativos entre Argentina, Uruguay, Estados Unidos, Italia y España, donde Valencia fue la ciudad elegida para abrir en mayo su tercer local.

“Nos decidimos a hacer el helado de la mejor calidad usando producto italiano como base, con una fuerte presencia en redes sociales y, sobre todo, con una apuesta clara por el diseño único de nuestros locales. Tenemos 62 y todos son distintos. Transformamos el ir a Lucciano’s en algo más que ir a comer helado, sino en una experiencia para toda la familia”. En el caso del local valenciano, se trata de un establecimiento de 260 metros cuadrados en el que la firma ha invertido 600.000 euros para crear un espacio con el aspecto de una juguetería de los años 70 decorado con soldaditos de plomo, osos de peluche, coches antiguos y aviones de madera.

“La aceptación en España ha sido enorme. Aunque nuestros proveedores decían que no era un mercado demasiado heladero, hemos descubierto que lo que faltaba aquí era oferta, la demanda estaba ahí y el consumo no ha bajado en invierno ni en Barcelona ni en Málaga. El mercado estaba dominado por locales aburridos o cadenas demasiado parecidas entre si con una imagen de fast-food del helado. Los informes internos indican que nuestras tiendas venden tres veces más que una heladería tradicional”, explica Daniel Otero.

Aparte de la colorida experiencia familiar de sus heladerías, Lucciano’s basa su oferta en una amplia gama de sabores elaborados con materia prima italiana de primer nivel y chocolate belga. “Aunque tenemos 250 sabores distintos y para eventos podemos crear específicos como parmesano, tomate o cerveza, en las tiendas tenemos, además de un par de guiños locales, entre 24 y 30 sabores que siempre mantenemos porque son propios. No usamos una base blanca que luego se saboriza. Nos permite tener una venta muy atomizada porque gustan todos los sabores, con un 6% para el más vendido y un 2% para el que menos. Además, hace años incorporamos los Icepops, los helados de palo bañados en el mismo chocolate belga que nos han permitido ser la única heladería del mundo con licencia de Universal Pictures para usar la imagen de los populares Minions”, aclara Otero.

Esta misma línea de colaboración con partners estratégicos la han aplicado los Otero para complementar su negocio de heladería con un servicio de pastelería y cafetería gracias a un acuerdo con Nespresso que les ha servido para apuntalar su lucha contra la estacionalidad del consumo heladero. “En 2024 lanzaremos a nivel mundial nuestra nueva línea de chocolates de marca propia y traeremos a España la gama de productos Lucciano’s para comercializar en distribución a través de espacios de venta gourmet”.

Mientras llega ese momento, los responsables de Lucciano’s no se ponen metas en España y ya trabajan en la valoración de ubicaciones a pie de calle en zonas de alto tránsito de Madrid, además de estudiar ofertas de grandes operadores de centros comerciales en la capital. En breve, además, abrirán una segunda unidad en Málaga con el mismo franquiciado con el que estrenaron presencia en la Costa del Sol el año pasado. A nivel internacional, el fundador de la marca, asegura que cuentan con socios interesados para abrir en más de 80 países mediante el modelo de franquicia, “llamado a representar entre el 80% o el 90% de nuestro crecimiento”.