‘Location Intelligence’: la tecnología que hará que España tenga fibra óptica en el 100% del país

El sector de las telecomunicaciones está en un momento dulce en España. Los últimos estudios del sector indican que el país será la única potencia europea que tenga el 100% de sus hogares conectados con fibra óptica en el año 2025; además, el territorio se está posicionando como uno de los principales hubs de comunicaciones del Sur de Europa gracias a las grandes inversiones en infraestructuras que se están realizando (data centers, amarre de importantes cables submarinos de conectividad, etc.) y a su privilegiada localización.

Desde el Gobierno central también están trabajando para incentivar esta digitalización y en reducir la brecha existente entre las diferentes Comunidades Autónomas. Si bien es cierto que -de acuerdo con el último Informe de cobertura de banda ancha en España 2021 del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital- el 88,3% del territorio nacional tenía cobertura de banda ancha fija de, al menos 100 Mbps a finales de junio de 2021, hay una excesiva diferencia entre Comunidades Autónomas, con la Comunidad de Madrid a la cabeza y Castilla y León en última posición. La España vaciada es quien sufre la mayor brecha digital.

Para incentivar un despliegue homogéneo y completo en todo el país, desde Moncloa se mantienen activas ayudas del Plan de Recuperación con las que garantizar el acceso a la banda ancha en el ámbito rural. A nivel mayorista, hasta finales de 2023, las compañías se podrán beneficiar de un total de 44,8 millones de euros destinados a financiar el desarrollo e implantación de las infraestructuras necesarias.

En este sentido, las organizaciones necesitan apoyarse en tecnología e innovación para encontrar una fórmula óptima que permita hacer realidad el despliegue masivo de la fibra óptica. A ello se le une el gran volumen de datos que transmiten estas redes, y que requiere examinar y gestionar la información mejor para evitar sobrecargas, alta latencia y garantizar la escalabilidad.

Todos los aspectos de la construcción y el despliegue de las redes de banda ancha tienen la localización como llave común. Los Sistemas de Información Geográfica (GIS, según siglas en inglés) son un gran recurso tecnológico para licitar, planificar, diseñar, construir y operar las redes al tiempo que se cumple con las obligaciones regulatorias (seguridad, informes de proyectos por la concesión de ayudas, etc.).

Por ejemplo, los proveedores de servicios de comunicación (CSP) necesitan tener a su disposición herramientas punteras que les ayude en todo el ciclo de vida de las iniciativas y despliegues. Gracias a esta tecnología, pueden realizar un cartografiado de la banda ancha que ya se encuentra operativa y existente, así como un análisis inicial para acelerar la planificación, el diseño y las estimaciones presupuestarias para ampliar esa cobertura.

También pueden gestionar proyectos complejos con mayor facilidad, siendo más estratégicos en todas las fases, desde la planificación hasta la ingeniería, y optimizando las operaciones y el mantenimiento de la red gracias a la información en tiempo real que proporcionan los GIS.

Un sistema tecnológico de estas características aglutina información de todas las fuentes para conseguir una visión completa del territorio y del proyecto. Tenemos que recordar que estamos hablando tanto de fuentes de datos abiertas como del catastro o de los distintos censos de las Administraciones Públicas, que se convierten en fuentes primarias con datos de las propias compañías de telecomunicaciones o datos procedentes de sensores que han sido captados a través de las infraestructuras Internet of Things.

En este sentido, la colaboración y la cooperación entre entidades resulta fundamental para contar con la mayor cantidad de información limpia disponible que permita optimizar los despliegues, pero no sirve de nada sin una tecnología capaz de digerir, procesar y volcar este volumen y formulación de los datos.

Asimismo, mediante el binomio BIM & GIS, se pueden realizar modelados de toda la red con datos espaciales fiables, desarrollando gemelos digitales de territorio que reflejen con precisión el entorno en el que se va a trabajar. De este modo, cualquier organización de telecomunicaciones que lleve a cabo el despliegue d la fibra óptica podrá visualizar, analizar y controlar todo tipo de parámetros y procesos relevantes para el proyecto, como son el estado del terreno, los puntos de conexión con la red ya desplegada o el estado de la infraestructura, entre otros muchos.

El objetivo, a nadie se le escapa a estas alturas, es lograr una España totalmente conectada. Combatir la brecha digital entre regiones y facilitar la conectividad a toda la población es una cuestión clave en la ejecución del reto demográfico. Un aspecto vital para el poner freno a la España Vaciada, convirtiéndola en una España comunicada, conectada y latente de oportunidades que impulsen su desarrollo socioeconómico.

La tecnología Location Intelligence dentro del sector, como ya están comprobando las principales Telco a nivel mundial, está abriendo un nuevo horizonte de posibilidades. No solo para los ciudadanos, que podrán disfrutar de un nuevo mapa de oportunidades en cualquier punto del territorio, sino también para las propias compañías.

Unas compañías que están viendo cómo su negocio se desarrolla con base a criterios más sostenibles, seguros y ágiles, consiguiendo reducir tiempos y costes en los despliegues de fibra óptica; optimizar resultados y apostar por un servicio con más garantías y una mayor rentabilidad en el que la tecnología geoespacial cumple un rol clave e insustituible.