Las aerolíneas esperan beneficios de más de 9.100 millones de euros

La cifra duplica la previsión inicial de la asociación IATA, situada en los 4.395 millones, pero el entorno económico y geopolítico es arriesgado.

Las aerolíneas encaran sin ninguna duda su año de recuperación total. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) estima que las compañías del sector obtendrán un beneficio neto de más de 9.100 millones de euros en 2023. La cifra, además de contrastar con las pérdidas de años anteriores tras la pandemia (-3.600 millones de pérdidas en 2022), supone duplicar la previsión inicial de la organización, que preveía un beneficio de 4.395 millones de euros.

El regreso a números negros, sin embargo, no se dará de manera homogénea en todas las regiones. Si bien se espera que la industria global de las aerolíneas vuelva a ser rentable en 2023, el desempeño financiero seguirá siendo negativo en las compañías de Asia-Pacífico, América Latina y África. Por contra, las compañías aéreas que mejor rendimiento tendrán serán las de Estados Unidos, Europa y Oriente Medio (por este orden).

Las cifras de IATA, cuyo presidente es Willie Walsh, ex consejero delegado de IAG (Iberia, British Airways, Vueling), fueron compartidas el pasado lunes 5 de junio en su cumbre anual de Estambul. En la cita se ha celebrado también el fortalecimiento de la rentabilidad del sector frente al horizonte esperado el año pasado.

Siguiendo las nuevas previsiones de IATA, los beneficios de explotación del sector alcanzarían los 22.400 millones de dólares (20.940 millones de euros), muy por encima de la anterior previsión, de 3.200 millones de dólares (2.992 millones de euros).

Si nos fijamos en los datos y previsiones que maneja las principales compañías europeas observamos que son muy positivos. En el caso de IAG en 2022 se produjo una fuerte recuperación en los mercados principales que operan al levantarse las restricciones por el Covid-19, lo que impulsó los ingresos y una vuelta al beneficio con un flujo de efectivo operativo notablemente positivo. En 2023 se espera que continúe la recuperación de los beneficios y se prevé que el beneficio de las operaciones antes de partidas excepcionales del ejercicio completo oscile entre 1.800 y 2.300 millones de euros, basado en los tipos de cambio y en los precios de los contratos a plazo de combustible de aviación actuales. Sin embargo, son conscientes de la incertidumbre en el entorno macro y en la inflación en el combustible y otros costes. “Tenemos el compromiso de generar valor a largo plazo para los accionistas y confiamos en que los beneficios de las operaciones vuelvan a los niveles anteriores a la pandemia del Covid-19 en los próximos años” aseguran desde IAG.

Por otro lado, TAP Air Portugal, la aerolínea nacional portuguesa, cerró el ejercicio 2022 con un resultado positivo, logrando un beneficio de 65,6 millones de euros. Este éxito financiero se vio impulsado por los ingresos récord registrados en el cuarto trimestre, lo que representa un hito significativo después de años de pérdidas que habían ejercido una fuerte carga sobre el erario público. Cabe destacar que estas ganancias se obtuvieron antes de lo previsto, ya que se estimaba que no serían alcanzadas hasta el año 2025.

El resultado neto de explotación o beneficio antes de intereses e impuestos (ebit) también mostró una tendencia positiva, alcanzando la cifra de 268,2 millones de euros. Esta cifra incluye elementos no recurrentes por un valor de 19,4 millones de euros.

En términos de ingresos, TAP experimentó un notable crecimiento, con un total de 3.485 millones de euros, lo que representa un aumento del 151% en comparación con el año anterior. Este incremento se debe en parte a un mayor nivel de actividad, ya que la capacidad total de asientos disponibles por kilómetro (ASK) aumentó en un 94,2%, alcanzando el 87% de los niveles previos a la crisis. Además, el número de vuelos operados aumentó en un 74,9%, situándose en el 79% de los niveles prepandemia.

En cuanto al número de pasajeros transportados, TAP registró un total de 13,8 millones en el año 2022, lo que supone un incremento del 136,1% en comparación con el año anterior. Aunque esta cifra representa un notable crecimiento, es importante destacar que aún se encuentra en el 81% de los niveles alcanzados en el año 2019, antes del estallido de la crisis sanitaria.

En el caso de Lufthansa, la compañía aérea alemana, logró en el año 2022 un resultado financiero positivo tras experimentar pérdidas en los dos años anteriores. Sus beneficios operativos antes de impuestos e intereses ascendieron a 1.500 millones de euros. En comparación, en el año anterior, la empresa había sufrido pérdidas operativas de 1.700 millones de euros, pero logró obtener un beneficio neto de 791 millones tras las pérdidas de 2.200 millones en 2021.

Lufthansa logró cumplir su propio pronóstico, el cual fue revisado al alza en tres ocasiones durante el año. La facturación de la compañía experimentó un incremento notable del 95%, alcanzando los 32.800 millones de euros. Además, en 2022, Lufthansa transportó a un total de 102 millones de pasajeros, más del doble en comparación con el año anterior.

Estos resultados positivos permitieron a Lufthansa generar un ebit ajustado de 1.500 millones de euros en el ejercicio 2022, revirtiendo así las pérdidas registradas previamente (-1.700 millones de euros). A pesar del aumento de los costes, particularmente en lo relacionado con el combustible debido a la alta inflación, el margen ebit ajustado mejoró significativamente hasta alcanzar el 4,6%, en contraste con el -9,9% del año anterior. El beneficio neto ascendió a 791 millones de euros, mostrando una mejora sustancial en comparación con el año 2021 (-2.200 millones de euros).

Datos de carga

En cuanto a la carga, se espera que la recuperación no bata las cifras previas a la pandemia. En concreto, la previsión es que los volúmenes transportados sean de 57,8 millones de toneladas, algo por debajo de los 61,5 millones de toneladas transportadas en 2019 con una fuerte desaceleración de los volúmenes de comercio internacional.

Los ingresos totales crecerían un 9,7% interanual hasta los 803.000 millones de dólares (751.005 millones de euros), mientras que los gastos presentarían un crecimiento anual del 8,1%.

“Los resultados financieros de las aerolíneas en 2023 están superando las expectativas”, ha señalado Walsh. El máximo ejecutivo de IATA ha señalado a este respecto acontecimientos positivos que han empujado hacia este resultado: el levantamiento de las restricciones en China antes de lo previsto y el alivio en los precios del combustible.

Los principales riesgos

No obstante, Walsh tampoco ha dejado de lado el listado de desafíos que se dibujan en el entorno económico y geopolítico. En este sentido ha destacado que el margen de beneficio neto es del 1,2%, por lo que la rentabilidad del sector es frágil si la inflación volviese a incrementarse o si lo hiciese el riesgo de recesión.

El otro riesgo latente sigue siendo la guerra en Ucrania y una consecuente escalada de la tensión, que podría traer consecuencias muy negativas para la aviación mundial. En segundo plano aunque sin desaparecer, sigue la posible tensión en la cadena de suministro y la respuesta de los fabricantes de aviones como Boeing y Airbus ante nuevos pedidos de los operadores.