Las pantallas ganan en versatilidad

La interacción con las pantallas admite cada vez más formas. Lo hemos visto en los teléfonos móviles con los plegables y desplegables y la tendencia se amplía a los portátiles y convertibles. Lenovo está renovando ahora toda su familia de dispositivos Yoga y, al hacerlo, digamos que está teniendo muy presente esa nueva manera en que nos relacionamos con los dispositivos.

Dentro de esta nueva generación, encontramos el Yoga Book 9i, el Yoga Pro 9 de 14 y 16 pulgadas, el Yoga Pro 7 de 14”, el Yoga Slim 7 de 15”, el Yoga 6 de 14”, el Yoga9i de 14”, el Yoga7 en 14” y 16”, el Yoga 6 en 13”, el Yoga All In One 9i 32” y el Yoga All in One 7 de 27”. Entre las tablets, destacan la Tab Extreme, la Tab P12, la Tab M9 y el Lenovo Smart Paper. Todos estos dispositivos comparten la nueva generación de procesadores Intel, un renovado compromiso por el medio ambiente y haber superado en varios casos la certificación de durabilidad militar MIL-STD-810H.

De esa amplia familia, vamos a centrarnos esta vez en dos dispositivos premium que se proponen revolucionar esa manera de relacionarnos con las pantallas: el Yoga Book 9i y el Lenovo Smart Paper.

Doble pantalla

El primero de ellos es un portátil que cuando abrimos no solo dispone de la tradicional pantalla, sino que donde estamos acostumbrados a encontrar el teclado también tenemos una segunda pantalla. Si necesitamos utilizar teclado, podemos usar uno virtual en la pantalla inferior o, mucho mejor, sumarle otro aparte que irá integrado en la funda. Este último elemento ayuda y mucho a sacarle el máximo partido al YogaBook 9i.

Lo más interesante en este producto es explorar las diferentes opciones para configurar en horizontal y vertical, situando una pantalla al lado de la otra o una a continuación de la otra. “El producto destaca sobre todos los demás por ese uso diferencial”, explicaba en su presentación Javier Bueno, 4P Consumer Manager de Lenovo.

Este Yoga Book 9i, que estará disponible en el próximo mes de septiembre en España por 2.299 euros, llegará en un tamaño de 13 pulgadas, con los procesadores Intel de 13ª generación, tecnología oled, resolución 2,8K, sistema de carga rápida, funcionalidad con pen 4.0 y cuatro altavoces B&K. Su peso se quedará en los 1.300 gramos y de grosor no superará los 15 milímetros. “Estamos ante un producto de alta gama que tiene un desarrollo de software muy importante. Por esa doble pantalla, hay que reconocer que nos ha provocado unos cuantos quebraderos de cabeza porque queríamos que el usuario pudiera explorar muy distintos usos en ambas pantallas. El objetivo era que todo fuera muy fluido”, reconocía Javier Bueno.

El segundo producto que más nos ha llamado la atención de todos los presentados por esta compañía es el bautizado como Lenovo Smart Paper. Con él, la firma se suma a la tendencia de los e-readers o tabletas con tinta electrónica y pantalla por encima de las 10 pulgadas que admiten trabajar con documentos. Se trata de un tipo de dispositivo que está ganando adeptos y que está indicado sobre todo para aquellos usuarios que suelan trabajar con diferentes formatos de archivos y que prefieran hacerlo a la antigua usanza, boli electrónico en mano, subrayando... Con él pueden tomar todo tipo de notas sobre ellos con la seguridad de que luego todas esas aportaciones quedarán reflejadas en la versión final del documento en cuestión. Nuestras notas con la caligrafía que aprendimos en el colegio son traducidas sin problema a esos archivos.

Tomar notas

Esta línea de productos iniciada por Rakuten Kobo y continuada después por otros como Amazon con su Kindle Scribe gana ahora un nuevo competidor. Desde Lenovo no quieren ponérselo fácil a los anteriores. No en vano, su precio (499 euros) coincide con el más económico de los modelos ya disponibles en el mercado y, en este caso, incluye en ese importe también el imprescindible lápiz y su funda de protección. Alcanza los 64GB de memoria interna, igualando la capacidad del modelo más premium de la competencia. Esto nos permitirá practicamente no tener límite en el almacenamiento de archivos dentro del propio dispositivo para trabajar sin dependencia de la nube.

En cuanto a las especificaciones técnicas, su pantalla es de 10,3” y admite nueve tipos de escritura y 74 plantillas entre las que elegir (desde el clásico bloc de notas a un pentagrama, cuadrícula de libreta, etc.) Su pantalla de tinta electrónica sobre la que escribimos dispone de 4096 niveles de presión y también es capaz de reconocer la inclinación del lápiz. Hemos tenido oportunidad de probarla y podemos decir que los trazos resultan muy naturales. Otro de sus puntos fuertes son sus 24 niveles de brillo y de calidez en la temperatura, su autonomía de varias semanas y su compatibilidad con muy diferentes formatos (Ebook, PDF, cualquier archivo de Microsoft Office, etc.).