Carlos Bueno

La importancia de los ‘ppp’ para leer

El nuevo ‘e-reader’ de Kobo, el ‘Nia’, pensado para quienes se inician en la lectura digital, mantiene los 212 píxeles por pulgada, pese a su precio de 99,90 euros.

En Rakuten han observado durante los meses de confinamiento que se han producido crecimientos espectaculares en el tiempo dedicado a la lectura. En el periodo marzo-junio, aumentó en España un 121% y solo en el mes de abril se disparó un 180%. Las ciudades en las que más aumentó este hábito fue en Bilbao, Pamplona, Madrid y Barcelona. Todos estos datos son más fiables que cualquier encuesta o estudio de opinión. Aquí no miente nadie, porque los datos proceden directamente de la propia plataforma de lectura de la compañía, que puede registrar esos niveles de actividad de forma anónima. Así nos lo explica Fabian Gumucio, responsable de Rakuten Kobo en Europa: “En este tiempo, han sido muchos los usuarios que han probado en sus móviles o tabletas nuestra plataforma de lectura de libros electrónicos. Estamos en el mejor momento para lanzar un dispositivo considerado de entrada, dirigido a quienes se inician en la lectura digital. Hacía tres años que no contábamos con ninguno de esta gama, en este rango de precios inferior”. Así es como nos llega el Kobo Nia por 99,90 euros, muy lejos de los precios de otros e-readers más premium de Kobo, como el Libra (179 euros) o el Format (279 euros).

Con este producto, reconoce Gumucio que la compañía entra a competir con Amazon y su Kindle de entrada, en estos momentos a la venta por 89,90 euros. La diferencia entre ambos dispositivos la encontramos en los píxeles por pulgada (ppp) o resolución de la pantalla. Ese dato, a veces perdido entre el resto de especificaciones técnicas, tiene más importancia de la que pueda parecer en un producto de este tipo. “Por debajo de 200 ppp, hemos detectado que la experiencia de lectura es muy distinta, por lo que el reto en este caso era mantenernos por encima de ese nivel, en concreto 212 ppp, que es algo que justifica esos diez euros de diferencia con el Kindle básico -que ofrece resolución de 163 ppp-”. Explica Gumucio que el 70% del precio de un e-reader lo determina la calidad de la pantalla y ese nivel de resolución, por lo que el nuevo Nia quiere convertirse en el primer dispositivo de entrada a un público sobre todo joven, que ha estado leyendo estos meses en sus móviles o tabletas y que ahora notará la diferencia.

La otra característica a la que no han querido renunciar pese a estar hablando de un dispositivo de entrada es su luz frontal, con la posibilidad de regularla de 0 a 100 según el nivel de luminosidad de la habitación en la que nos encontremos o de si estamos leyendo en exterior.

El Nia también destaca por su carácter liviano, con apenas 172 gramos. Tenemos que decir, tras hacerlo probado, que ese peso no se eleva demasiado cuando le añadimos una de las cubiertas para protegerlo que le acompañan en su lanzamiento -en negro, amarillo limón y aguamarina-. En cuanto al tamaño, su pantalla de 6 pulgadas queda integrada en un cuerpo robusto de 112,4 milímetros de ancho por 159,3 de largo y menos de un centímetro de grosor (9,2 milímetros). Su batería de 1.000 mAh permite leer durante varias semanas sin necesidad de recargarlo.

Explica Fabian Gumucio que en estos meses de confinamiento ha crecido mucho también la lectura en formato de audiolibros. “Si bien siguen representando una pequeña parte en el catálogo global de Rakuten Kobo (200.000 audiolibros entre los 7 millones de e-books), algunos estudios hablan de que en tres o cuatro años esta tendencia podría igualar a la lectura tradicional”, concluye el responsable de Rakuten Kobo para Europa.