Juan Ignacio Álvarez

Una sostenibilidad integral, la gran apuesta de Pascual hasta 2023

La compañía ha abierto un nuevo ciclo estratégico para los próximos tres años basado en el cuidado medioambiental, el bienestar y el desarrollo social, así como en el crecimiento económico en las comunidades donde está presente. El propósito corporativo se extiende a todas sus marcas

Pascual estrena un nuevo ciclo estratégico para el próximo trienio 2020-2023, en el que asume 14 nuevos retos y cambia su posicionamiento e identidad corporativa, integrando todas sus marcas en torno al propósito corporativo de la empresa o una filosofía única: “Dar lo mejor para el futuro de la alimentación”. De este modo, Leche Pascual, Bezoya, Bifrutas, Vivesoy y Mocay “remarán en una misma dirección posicionando a la compañía como un todo”, recalcan sus responsables. Este cambio de posicionamiento y evolución identitaria, añaden en la empresa, refuerza el compromiso con la sociedad que Pascual lleva manteniendo desde su fundación y que se materializa en su compromiso de gestión responsable y en compromisos concretos de sus marcas. Además, en línea con el plan estratégico iniciado este año, Pascual sitúa como eje del mismo la sostenibilidad integral, lo que comprende el cuidado medioambiental y el bienestar, así como el desarrollo social y el crecimiento económico en las comunidades donde está presente.

En relación a su implicación con el producto de proximidad, Pascual, además de reforzar su labor productiva para garantizar el suministro de alimentos durante el confinamiento provocado por la pandemia por coronavirus, incrementó, hasta alcanzar el 96% del total, las compras locales de materias primas. De este modo, se favoreció a los agricultores y ganaderos que despeñan su actividad en España.

Como explica Tomás Pascual, presidente de la compañía, “dar lo mejor integra el irrenunciable concepto de calidad de Pascual y lo eleva a todos los órdenes de la empresa; reflejando nuestra filosofía de compañía, una actitud de insatisfacción permanente, de superación, que nos hace preguntarnos cada día si lo que hacemos hoy es lo mejor que podemos dar a la sociedad. Dar lo mejor es una evolución, una forma de elevar nuestra calidad a un plano más holístico”.

Para la empresa esta renovación supone la adaptación de Pascual a los tiempos, anticipándose a las tendencias, que si bien ya venían adivinándose con anterioridad, se han acelerado con la llegada del Covid-19, “porque los que dan lo mejor son los que piensan cada vez menos en ellos mismos y cada vez más en los demás. En Pascual damos lo mejor desde hace cincuenta años, cuando lanzamos el primer tetra brik aséptico de España o la leche uperisada. En 2020 las necesidades del consumidor han cambiado, nos adaptamos, pero seguimos fieles a nuestra filosofía impulsando la compra local en España, el bienestar animal, o apostando por utilizar envases más respetuosos con el medioambiente. Y miramos al futuro con un nuevo plan estratégico y compromisos concretos, que iremos desvelando”, relata su presidente.

En Pascual comentan que la simplicidad, y el posicionamiento firme en torno a unos valores corporativos sólidos, marcan la nueva identidad de la compañía, que además refleja una imagen más moderna y actual. Según la empresa, con la nueva campaña, con una comunicación directa y ágil, bajo el mensaje unificado de “dar lo mejor” como protagonista indiscutible, Pascual se sitúa como “una compañía de alimentación transversal, comprometida con las personas y con el momento complejo que atraviesa la sociedad. Pascual nació en 1969 en la localidad burgalesa de Aranda de Duero. Actualmente, cuenta con seis plantas de producción y emplea a 2.200 personas. Ofrece una gama de más de 200 productos que exporta a 67 países.