España es ya el segundo país europeo en cuota de marca blanca tras Suiza

La marca del distribuidor no para de crecer en toda Europa. En nuestro país ha crecido en los últimos tres años y actualmente tiene una cuota de mercado del 46% con un crecimiento de 2,6 puntos durante 2022. El país helvético, con el 52%, lidera el ránking, aunque el año pasado su cuota bajó un 0,4%.

La marca blanca o del fabricante siguió acelerando en 2022, tanto en España como en el resto de Europa, impulsada por un contexto económico inflacionista. De este modo, según un reciente informe de la consultora NielsenIQ sobre tendencias del gran consumo, España es, tras Suiza, el país con mayor peso de la marca blanca con un 46% del total de la cuota de mercado frente al 52% del país Helvético. Así, en 2022 la marca del fabricante creció en nuestro país un 16% frente al 5% de la marca del fabricante. Este crecimiento es continuado en los últimos tres años, puesto que en 2020 la cuota de la marca blanca era del 42% (+9%) y en 2021 del 43% (+3).

La diferencia entre ambos países es que, mientras que en España la marca blanca crece 2,6 puntos, en el caso de Suiza baja un 0,4%. Donde más crece la marca blanca es en Portugal, con 2,6 puntos, seguido de España, Dinamarca y Alemania. No obstante, lo hace en mayor o menor medida en todos los países salvo Suiza, motivado, tal vez, por haber tocado techo.

Además de optar por la marca blanca, las promociones también están resultado ser un factor decisivo para los clientes. En consecuencia, el 16,2% de los productos que los consumidores españoles echaron en la cesta de la compra el año provenía de promociones, medio punto más que en 2021. Igualmente, según el estudio de NielsenIQ el 28% de los clientes de supermercados cambió de tienda buscando las mejores promociones, mientras que el 36% alegó rara vez cambió de tienda, aunque buscó promociones en su tienda habitual.

Por otra parte, pese a haber subido de precio un 10% durante el año pasado a causa de la inflación, los productos envasados mantienen su volumen, que apenas cayó un 0,1%. Por el contrario, el volumen de venta de los alimentos frescos se mantuvo en negativo durante todo el año (-2,5%) en tanto que su precio se incrementó un 10,3%. La carne, la fruta, la verdura y el pescado fueron los productos cuyo consumo bajó más, mientras que los que más subieron de precio fueron los huevos (26,6%), fruta (15,8%), verdura (9,9%), pan (9,4%), carne (9,1%) y pescado (6%).

Siguiendo con los precios, siete de cada diez compradores, según la encuesta de NielsenIQ complementaria al informe, declaran conocer los precios de la mayoría de los productos que compran. En concreto el 23% alegan que conocen los precios de los artículos que compran regularmente, mientras que el 48% precisan que conocen los precios de la mayoría de los artículos y que siempre se dan cuenta de cuando cambian. Los consumidores españoles, añade el informe, realizaron en 2022 más visitas a las tiendas, pero con cestas más pequeñas. De este modo, mientras que la frecuencia de compra se incrementó un 6%, el número de artículos por cesta decreció un 5,5%.

Cambio de comportamiento

Igualmente, para afrontar la coyuntura económica, los compradores introdujeron cambios en su estilo de vida intentando ahorrar en suministros, comiendo menos fuera de casa, minimizando el desperdicio, reduciendo gastos no imprescindibles y planificando más. También optaron por comprar productos más baratos en su cesta habitual, por dejar de comprar algunos productos o por comprar en varias enseñas y canales. Eso sí, la innovación es relevante para muchos compradores. Y pese a que la mayoría de los consumidores prueban nuevos productos de forma limitada, a más de un tercio le gusta experimentar cosas nuevas. De cara a este 2023, las principales preocupaciones son, por este orden, el precio de los alimentos, el coste de los suministros, la crisis económica, el Covid-19 y los costes del combustible y el transporte.