Marie Lindström, directora general de Too Good To Go: “Hemos crecido en España más de un 40% en la lucha contra el desperdicio”

Too Good To Go ha llegado para quedarse. Este proyecto surgió en 2016 en Copenhague para evitar el desperdicio alimentario. Un problema a nivel global y que provoca el 10% de la emisiones de dióxido de carbono. El proyecto es todo un éxito
y su aplicación cuenta ya con más de 10 millones de descargas.

To Good To Go tiene su origen en Copenhague en 2016. Tras observar la cantidad de comida que se tiraba en los restaurantes tras las comidas, Lucie Basch y Jamie Crummie decidieron crear una alternativa para luchar contra el desperdicio alimentario, que es un problema a nivel global y que ya supone un 10% de las emisiones de dióxido de carbono totales. Desde octubre de 2022, la directora general de la compañía en España es Marie Lindström, licenciada en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Lund.

¿En qué consiste realmente su negocio?

Nos vemos como una de las soluciones para el desperdicio alimentario, aunque somos conscientes que queda mucho trabajo por hacer si queremos acabar con este tema. Al final, nosotros medimos realmente nuestro impacto a raíz del número de pack salvados que logramos, además de con campañas de concienciación. De hecho, una de las últimas es Mira, Huele, Prueba, un sello que hemos conseguido que más de 40 marcas, como Danone, lo pongan en sus productos. Así se fomenta la concienciación de los consumidores porque existen muchas confusiones con lo que es la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferente. Y sabemos, por datos de la Unión Europea, que el 10% de los alimentos que se tiran en los hogares es por este tema. Con este tipo de sellos queremos incentivar a los consumidores a que usen sus sentidos para saber si un alimento todavía se puede consumir o no.

¿Quién se encarga de establecer el precio de estos ‘packs’?

El establecimiento es quien decide poner el precio y quien decide la cantidad de packs que va a subir a la plataforma, en base al desperdicio alimentario que ha tenido ese día. Además, los horarios de cuando se suben estos packs también dependen de los establecimientos con los que trabajamos, aunque normalmente suele ser después de las comidas. Por ejemplo, en los hoteles es habitual después del desayuno que suban varios packs. El usuario como tal que compra el pack no sabe lo que hay dentro solo conoce su precio. Nosotros al final funcionamos como cualquier marketplace y nos llevamos una comisión por venta.

La inflación de los alimentos está en alza, ¿esto ha influido en reducir este desperdicio?

Nosotros estamos creciendo mucho y rápidamente. En 2021, de hecho, aumentamos un 27% en usuarios y un 43% los packs salvados. No sabemos exactamente a que se debe el incremento del desperdicio, pero si que estamos convencidos de que la inflación ha sido una parte que ha influido bastante. Al final es algo que afecta al consumidor.

¿Y en España cuantos packs han salvado?

Este año vamos a salvar alrededor de seis millones de packs. Además, desde que estamos en España podemos decir que hemos salvado ya 12 millones. Vamos aumentando el ritmo y cada vez crecemos más rápido lo cual es muy bueno.

¿Cuánto tiempo llevan en España?

En septiembre haremos cinco años. Aunque la empresa surge en 2016 en Dinamarca a raíz de que dos amigos fueron a un restaurante y vieron como los camareros, al terminar, tiraban toda la comida que había sobrado. Esto les causó una gran impresión y se pusieron a investigar todo lo que tiene que ver con el desperdicio alimentario y trataron de dar una solución a este gran problema mundial, ya que 250 millones toneladas de comida se tiran al año en todo el mundo, en España son ocho millones de toneladas. El problema está en toda la cadena de valor, todos tenemos que poner nuestro granito para acabar con este problema.

¿Qué supone para ustedes la nueva ley de desperdicio alimentario?

Somos optimistas con esta legislación y esperamos que nos ayude a bajar el dato de toneladas que se acaban desperdiciando. El objetivo de esta legislación es también concienciar y comprometer al país. De hecho, la ley ya está en su fase final y cuando entre en vigor hará que España sea el tercer país de la Unión Europea con este tipo de legislación para luchar contra este problema. La legislación es muy buena y la vemos con buenos ojos, aunque todavía hay cosas que se podrían ampliar para mejorarla. Por ejemplo, la previsión en necesaria porque es la raíz del problema, es importante contabilizar el desperdicio de toda la cadena de valor y sobre todo prevenir.

¿En cuántos países más estáis operando?

Estamos en 17 países en total, entre Europa, Estados Unidos y Canadá. Además, hace poco hemos llegado a un total de 200 millones de packs salvados, que es como nosotros medimos el impacto que tenemos, gracias a los 75 millones de usuarios a nivel global que tenemos. En el caso de España, empezamos en Madrid y Barcelona, porque había que crear esta comunidad y crecer, aunque ya podemos decir que estamos en todo el país con más de seis millones de usuarios registrados.

¿Cuáles son los establecimientos con los que trabajan?

Trabajamos con cualquier establecimiento de alimentación, por lo que va desde restaurantes hasta supermercados. Por ejemplo, en España, ya tenemos 16.000 establecimientos de alimentación y a nivel mundial 135.000. Trabajamos con establecimientos grandes como son Alcampo, Carrefour, Eroski, Domino´s Pizza o Papa Jones; pero también tenemos establecimientos alimentarios que son tiendas individuales y más pequeñas.

¿Cómo se ponen en contacto con los establecimientos?

Debo decir que es muy fácil trabajar con nosotros, además nuestra aplicación es muy intuitiva. Los establecimientos se inscriben en nuestra aplicación y nosotros nos encargamos de ponerles en contacto con los clientes. Además, también funcionamos con franquiciados. No tiene por qué estar inscrita la cadena, eso depende. La aplicación siempre te muestra los lugares más cercanos.

Han cambiado el logo, ¿por qué?

Sí, hace más o menos dos o tres semanas hemos decidido cambiar el logo, y todo lo que ello supone. No es un cambio dramático, sino que creemos que ya tocaba dar una nueva imagen a la compañía.