Medidas para reactivar el consumo e impulsar la recuperación

La fuerte subida de los precios, hasta niveles nunca vistos en los últimos años, está frenando el crecimiento de la economía y lastrando de forma muy preocupante el consumo. Según los datos del INE, el comercio minorista registró en marzo un retroceso de sus ventas del 5,5% en relación al mismo mes de 2021, tasa 7,2 puntos inferior a la del mes anterior y su caída más acusada desde febrero de 2021, cuando se desplomaron un 9,5%. Así, las ventas del comercio minorista regresaron en marzo a tasas negativas después de dos meses de incrementos interanuales consecutivos. El gran comercio, una de las mayores locomotoras en la creación de empleo en España, ha reducido sus ventas en esta línea un 1,3% y resulta por ello clave adoptar reformas estructurales que vayan más allá de simples parches para la actual consultura.

Resultaría, por ejemplo, de vitar importancia una rebaja de impuestos a los tramos inferiores de renta, una medida que según los expertos conecta con el actual debate sobre la propuesta de deflactar los tramos del IRPF, con el objetivo de evitar que, además de provocar una pérdida de poder adquisitivo la inflación actúe como un incremento de bases, “conforme a un impuesto adicional tremendamente injusto y silencioso”, tal y como afirma Fernando Castelló, economista y profesor de ESIC Business & Marketing School.

Tal y como apunta Marcos Mosteiro, profesor asocidado IE Business School y director financiero en The Luxonomist, en un informe de Anged, la patronal de la gran distribución, “desde un punto de vista lógico, debemos apostar por un gran Pacto de Estado Económico con medidas de ajuste y ayudas directas a las familias, para dar una mayor escalada al consumo interno. Este gran Pacto de Estado Económico debería contemplar medidas de rebajas fiscales con el fin de dar un respiro a las familias y empresas”. Pero la reforma debe ir mucho más allá y avanzar también en una completa liberalización del sector, tal y como ocurre por ejemplo en la Comunidad de Madrid. Resulta absurdo que en un entorno en el que el comercio electrónico puede vender los siete días de la semana las 24 horas del día, se siga poniendo freno a la actividad comercial en las tiendas físicas. Y no solo es una cuestión de horarios. Como tampoco tiene ningún sentido seguir poniendo trabas a la apertura de estableciendo, frenando la inversión y el empleo en un momento en el que es eso precisamente lo que se necesita para impulsar la recuperación. Consolidar el crecimiento de la economía española requiere mirar al largo plazo, tener perspectiva y actuar con medidas correctoras frente a la política de subvenciones y ayudas puntuales, que lo único que hacen es tapar pero el problema, pero en ningún caso sirven para solucionarlo.