El vino y los destilados se sobreponen al coronavirus

El consumo de vino supera los 10 millones de hectolitros y se prevé que las bebidas espirituosas repunten un 20% en 2021 sin alcanzar las ventas precovid.

Tanto el sector del vino como el de las bebidas espirituosas dan muestras de recuperación con cifras cercanas a las que tenían antes de la pandemia por coronavirus. Así, el consumo del vino en España volvió a superar en diciembre de 2021 los 10 millones de hectolitros, una cifra todavía inferior a la registrada antes de la pandemia, que fue de 11 millones, pero por encima del consumo total anual a febrero de 2021, cuando bajó de los 9 millones de hectolitros. Por su parte, la consultora DBK prevé que las ventas en España de bebidas espirituosas, que registraron un valor de 1.200 millones de euros en 2020, situándose un 30,6% por debajo de la cifra contabilizada en 2019, reputen un 20% en 2021, todavía un 15% por debajo de las cifras precovid.

Después de un 2020 complicado por las restricciones derivadas de la crisis sanitaria, el consumo de vino en España está mostrando en 2021 una clara tendencia alcista. Según el último informe sobre la evolución del consumo en nuestro país de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), el consumo de vino en España creció en el periodo interanual (12 meses) a octubre de 2021 un 6% hasta los 10,04 millones de hectolitros.

Únicamente durante el mes de octubre consumo de vino en nuestro país creció en un 39,5%, hasta los 0,917 millones de hectolitros. En este sentido, hay que tener en cuenta que se compara con un octubre de 2020 negativo y de consumo bajo (0,657 millones hectolitros). En cualquier caso, es importante precisar que el dato de consumo interno obtenido en octubre de este año supera incluso al registrado en octubre de 2019 (0,904 millones hectolitros). Este gran crecimiento obtenido en este mes se suma al del mes de septiembre, cuando el consumo de vino en España subió casi un 85%.

Por canales, y para el periodo interanual a agosto-septiembre de 2021, según la consultora Nielsen el consumo de vino en el canal de alimentación español va suavizando su crecimiento tras el enorme impulso registrado en los meses de confinamiento; paralelamente, las caídas en hostelería, canal que más sufrió las restricciones derivadas de la pandemia, van siendo cada vez menores. El vino con Denominación de Origen lideró las ventas en ambos canales de forma clara y evoluciona, además, mejor que la media, tanto en Alimentación como en Hostelería.

Por su parte, las ventas de los destilados se vieron muy penalizadas por el cierre temporal de los establecimientos de hostelería, su posterior reapertura con limitaciones de horario y aforo, el drástico descenso del turismo y el deterioro de la coyuntura económica. El desplome de las ventas en hostelería no pudo ser compensado por el aumento del consumo en hogares. De este modo, durante la pandemia, todas las categorías de producto registraron caídas superiores al 25%. En la primera posición del mercado en términos de valor figura la ginebra, con un peso del 27% sobre el valor del mercado total, seguida de cerca por el whisky, con el 26%. A continuación, se situó en 2020 el ron, que representó el 16% del mercado.

El comercio exterior de destilados registró un fuerte descenso en 2020, mostrando una caída del 21,4% en el valor de las ventas al exterior, las cuales se situaron en 632 millones de euros. No obstante, el mantenimiento de ciertas restricciones, sobre todo en la primera mitad del año, y la aparición de una nueva variante del virus en las últimas semanas del pasado año han limitado el crecimiento de las ventas. Asimismo, la actividad importadora retrocedió un 33,8%, hasta los 565 millones de euros. De esta forma, por primera vez el sector registró un superávit comercial que se situó en 67 millones de euros. A lo largo de 2021 las ventas en el mercado nacional han registrado una progresiva recuperación gracias a la reactivación de la actividad hostelera y el turismo. Pese a todo, se estima que el valor del mercado se situará al cierre del año en torno a un 20% por encima de 2020, con unos 1.450 millones de euros, lo que significará situarse todavía alrededor de un 15% por debajo de la cifra de 2019.

En el sector operan unas 300 compañías dedicadas a la elaboración de bebidas alcohólicas, las cuales generan un volumen de empleo de más de 3.000 trabajadores. La mayor parte son empresas de carácter familiar y de origen nacional. Predominan las empresas de pequeño tamaño, si bien en las primeras posiciones del mercado se sitúa un número reducido de grandes grupos fabricantes/importadores. Los cinco primeros competidores reunieron cerca del 60% del mercado en 2020, mientras que los diez primeros concentraron más del 70%.