La cerveza, el 40% de las ventas en la pequeña hostelería

La bebida representa el 25% de la facturación de los bares en su conjunto y siete de cada diez consumiciones de cerveza se realizan fuera del hogar junto a otro alimento

La cerveza es la bebida fría preferida por los españoles y la de mayor alcance poblacional, llegando al 80% de las personas adultas, independientemente de la clase social. Además, es la opción más consumida en los bares, que frecuentamos con una periodicidad de al menos una vez a la semana, y que son considerados el punto de encuentro ideal para socializar. Como señala Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España, organización empresarial que representa a los restaurantes, bares, cafetería y pubs de nuestro país, “el vínculo entre cerveza y hostelería es muy estrecho, pues económicamente la cerveza puede suponer hasta el 25% de la facturación de los bares, y hasta el 40% si estos cuentan con menos de diez empleados”

Según los estudios La transversalidad de la cerveza y La Relación de los españoles con los bares, realizados, respectivamente, por la consultora Kantar y la empresa de estudios de mercado Madison Market Reseach para Cerveceros de España, que agrupa a los principales fabricantes del sector, en 2018 se consumieron en España cerca de 40 millones de hectolitros de cerveza, siete de cada diez ocasiones fuera del hogar y junto con otro alimento. De hecho, el binomio cerveza-tapa es una gran dinamizador de la actividad de los locales de hostelería. “La cerveza es parte de la cultura de los españoles, eminentemente social; una de las bebidas con mayor alcance en la población adulta. Se trata de un producto popular, muy nuestro, que se consume de forma moderada y responsable, homogénea y transversal, subraya su presidente, Jacobo Olalla.

Según los datos presentados, la cerveza sigue siendo la bebida fría más consumida en hostelería, la que aporta más valor -el 86% del gasto se produce fuera del hogar- y a la que se dedica una mayor inversión, puesto que el 30% del presupuesto para bebidas frías se destina al consumo de cerveza. Otro dato relevante, es que “incrementar los impuestos que gravan el consumo de cerveza generaría un gran rechazo social porque la mayoría de los españoles asocian la cerveza a momentos de convivencia”.