Ana Pastor, agricultora y presidenta de Asaja Soria: “Soria es también una provincia olvidada en materia de regadíos”

Soria es también una provincia “un poco olvidada” si miramos a sus campos. No lo dice alto -porque su estilo es sosegado-, pero sí claro, Ana Pastor Soria, quien es, desde hace dos meses, nueva presidenta de Asaja Soria. Y lo explica: “La media de los cultivos de regadío en Castilla y León ronda el 12,5% de la superficie; en Soria no llegamos al 2%”, lamenta antes de subrayar que “si tuviéramos más, podríamos tener otros cultivos y otros rendimientos”.

Luchar por la mejora de la agricultura soriana es lo que ha llevado a esta joven de sólo 32 años, formada en Mantenimiento Industrial, ex trabajadora en esas tareas en un centro hospitalario y heredera desde hace diez años de la explotación familiar agrícola que comandara su padre en la pequeña localidad de Santa María del Prado, a convertirse en la primera mujer en dirigir una Organización Profesional Agraria (OPA) en Castilla y León, una circunstancia que, para ella, refleja la presencia, cada vez más normalizada, de la mujer en el campo y su creciente arrojo a la hora de “estar ahí, en los cargos directivos” de un sector “históricamente masculinizado”, pero en el que, particularmente, nunca se ha sentido “inferior o perjudicada”, ni por ser mujer, ni por ser joven. De hecho, resulta todo lo contrario pues, en su caso, en su pueblo de apenas “14 censados”, así como en el entorno de localidades vecinas, siempre encuentra manos para ayudarla ante imprevistos como la rotura de un motor de riego ocurrida durante esta entrevista.

El campo es así, está lleno de contratiempos. Lo sabe bien Ana, quien por normal general se levanta a las siete para atender sus “cultivos de secano, fundamentalmente cereales y girasol”, y algo de regadío, “este año, remolacha”. Lo hace sola y entrega toda su producción a la cooperativa Copiso, que para esta agricultora representa toda una garantía a la hora de “defender mejor lo que producimos”. No obstante, desde hace dos meses, duerme menos y viaja más, pues la presidencia la obliga a incluir muchas reuniones en la agenda.

En esa agenda ha subrayado el problema del relevo generacional como el más importante, dado que “más del 55% de los agricultores y ganaderos de Soria alcanzan casi la edad de jubilación”. Lo hará con medidas aún por definir, pero con la certeza de que la solución pasa por “estar muy pendiente de las necesidades de los jóvenes” y de “unir sus fuerzas”, siguiendo el ejemplo “de unidad” que, dice, representan los más mayores de la organización. “Si lo conseguimos, significará que hemos logrado un sector económicamente bien, que se puede vivir de él, que ofrece un trabajo digno, etc.”. Pero para ello, “necesitamos mucho de las administraciones”, reivindica Pastor no sin recordar que la digitalización y la adaptación al cambio climático también están en su punto de mira junto a problemas crónicos como la burocracia, los costes o los desequilibrios de la cadena.