Gustavo mallol, director de ITC-AICE: “Hemos puesto en marcha descuentos en trabajos ligados a energía y arcillas por el alza del gas”

El Instituto de Tecnología Cerámica (ITC-AICE) que forma parte de Redit centra su actividad en la que es la mayor industria de Castellón con 121 personas en plantilla. Más del 70% son titulados superiores, principalmente en ingeniería química, pero también en ciencias ambientales o informática, según su director Gustavo Mallol.

¿Cuáles han sido las principales aportaciones del ITC-AICE a la industria y el sector cerámico de Castellón en su historia?

Fundamentalmente se han basado en el conocimiento del comportamiento cerámico de las materias primas y las composiciones, la optimización de los procesos, la mejora de los productos y la minimización del impacto medioambiental de la industria. Trabajamos en la industria 4.0 antes de que se acuñara el término, digitalizando y monitorizando las etapas de los procesos de fabricación, desarrollando e implementando sistemas de control, aplicando la modelización, la simulación y, más recientemente, empleando gemelos digitales e implantando tecnologías de IA, IoT, robótica, o Big Data. La sostenibilidad de las empresas es otro de los puntos clave. Realizamos investigación aplicada para optimizar la energía y disminuir el consumo de recursos naturales, recirculando el calor de los hornos a secaderos. Una de las principales aportaciones al sector ha sido la formación de técnicos. Desde 1984 se ha contribuido a la formación de más de 1.000 técnicos de grado superior, especialistas en tecnología cerámica, lo que, sin duda, ha contribuido a traccionar este sector industrial.

¿Con cuántas empresas trabajan y de qué subsectores?

Trabajamos con más de 200 empresas asociadas, en su mayoría fabricantes de baldosas cerámicas, de fritas, esmaltes y colores cerámicos, de maquinaria, atomizadoras, de equipamiento sanitario, y de porcelana y loza y materiales refractarios, en menor medida. También con las entidades y asociaciones empresariales que agrupan a estas empresas.

La industria cerámica ha sido una de la más afectadas por los precios del gas, ¿qué ha hecho el ITC para ayudar a las empresas?

Difundimos a través de la Guía de Ahorro Energético las acciones que pueden implementar para reducir el consumo de sus productos. Pusimos en marcha, además, descuentos en trabajos realizados para los asociados en temas energéticos y también con arcillas. Hay muchos proyectos que estamos llevando a cabo de forma privada y también con financiación pública, especialmente a través del Ivace, para mejorar y ofrecer consejos muy prácticos que se pueden llevar a cabo en la fabricación, buscando las mejores tecnologías disponibles. Hemos realizado proyectos para reducir el espesor de las piezas o incorporar fundentes (principalmente vidrio) para reducir temperaturas máximas de cocción.

¿En qué proyectos de futuro trabajan para hacer frente al reto energético y la descarbonización del sector?

Desde 2017 disponemos de una sede en Almassora que en 2022 ampliamos con el apoyo del Ivace, con la construcción de una Planta Hipocarbónica que ya está funcionando centrada precisamente en estos aspectos. El objetivo es disponer de una infraestructura piloto donde experimentar tecnologías novedosas para reducir las emisiones de dióxido de carbono. En ella se ubican demostradores que desarrollamos para facilitar la transición del sector cerámico a una industria hipocarbónica. Entre ellos, el módulo de un horno eléctrico de fabricación de baldosas; el prototipo de un horno de fabricación de fritas cerámicas por inducción electromagnética, un secadero que funciona mediante infrarrojos, y una cámara de combustión de un horno cerámico que permite mezclas de hidrógeno y gas natural. También estamos abordando líneas futuras de investigación como la captura de CO2, el empleo de gases renovables como el biogás o la recuperación de baterías.

¿En qué ámbitos y proyectos trabajan más allá del sector cerámico?

Parte del conocimiento que se ha generado en los más de 50 años del centro es transversal y puede ser aplicado en otros sectores. Hemos desarrollado proyectos y ensayos de caracterización de materiales para el sector petroquímico, estamos realizando estudios para el reciclado y la “resurrección” de baterías de móvil, PC y coches, trabajamos con el sector de energías renovables para la aplicación de la geotermia somera o el desarrollo de absorbedores solares cerámicos. También colaboramos con la industria aeronáutica y aeroespacial en la fabricación de motores cerámicos y con el sector de pinturas y tintas de imprimir como laboratorio de referencia.