Las tendencias de la transformación digital que marcarán 2023
En pleno curso 2022-2023 son muchas las compañías que vuelven a poner sobre la mesa la transformación digital, cuyo objetivo es lograr empresas más competitivas en entornos tan cambiantes como los actuales.
La transformación digital es, tanto para empresas como para el conjunto de la sociedad, un fenómeno imparable que trae consigo mejoras importantes como, por ejemplo, la prestación de servicios esenciales, conectividad de la población y nuevas cadenas de suministro.
Aquellas organizaciones que necesitan llevar a cabo su transformación digital muestran una serie de características en común, como son el alto riesgo de error humano, la duplicidad de trabajos, el papeleo excesivo, los silos departamentales o la complejidad en los procedimientos internos. Todos estos indicios son una clara señal de alarma que las compañías no deben ignorar.
Todo proceso de transformación busca subsanar muchos de estos errores, aportando soluciones que promueven la innovación y la competitividad, y que reportan una larga lista de beneficios.
El primero de ellos es la flexibilidad, ya que la automatización de procesos va a permitirles diseñar, desplegar y modificar los procesos de una forma rápida y sin interrupciones en la operativa diaria, algo esencial en un entorno económico sin predictibilidad.
En segundo lugar, encontramos la optimización de los procesos burocráticos. El exceso de burocracia, tanto de los servicios logísticos como de los procesos back end o los procedimientos descentralizados, afecta directamente al rendimiento. En este sentido, la tecnología Business Process Management (BPM) contribuye a mejorar la administración y desempeño organizativo, gracias a la gestión y optimización de los procesos de negocio a través de un ciclo cerrado de modelado, ejecución, monitorización e implementación.
El tercer beneficio es el ahorro significativo de tiempos. Gracias a la automatización de procesos, se reducen los errores humanos, logrando procedimientos productivos más rápidos, flexibles y eficientes.
En último lugar, la tecnología BPM ayuda a las organizaciones a reconocer y dar respuesta a las demandas de los clientes, optimizando su estrategia comercial, convirtiéndose en empresas customer-centric y mejorando la satisfacción de los clientes.
En este entorno actual, empresas y organizaciones encuentran una serie de tendencias tecnológicas a las que van a tener que hacer frente en este 2022-2023.
El teletrabajo o trabajo híbrido es una de ellas, y está aquí para quedarse. Es más, según el informe publicado por la consultora tecnológica Forrester en 2022, el 10% de las empresas a nivel mundial están apostando por trabajos a distancia, mientras que el 60% opta por el modelo híbrido. El mismo documento, además, señala la resistencia por parte de muchos líderes a la hora de afrontar estas nuevas modalidades de empleabilidad. Ante esta situación, el estudio afirma que las organizaciones que se basen en el modelo presencial sufrirán un desgaste importante, aumentando hasta un 2,5% la tasa de abandono mensual por parte de sus plantillas.
Otra de las grandes tendencias tecnológicas que marcarán el curso 2022-2023 es la Inteligencia Artificial (IA). Tal es su impacto, que la consultora BearingPoint la sitúa en su primer puesto en el “Top 5 tendencias tecnológicas para 2022”. La Inteligencia Artificial es una solución ideal para cualquier sector, gracias a sus múltiples aplicaciones, y a la toma de decisiones basadas en el uso de algoritmos y datos generados.
El 5G también estará presente en este curso. Los beneficios que esta nueva tecnología acarrea para organizaciones y empresas abarcan desde banda ancha móvil de alta velocidad, comunicaciones ultra fiables y de baja latencia, mayor seguridad de la red, capacidad de gestionar millones de dispositivos simultáneamente o banda ancha en las zonas rurales.
El “No Code” es otra de las tendencias tecnológicas que han democratizado el acceso a la tecnología de nivel empresarial. Se trata de soluciones que permiten diseñar aplicaciones de negocio personalizadas, de forma segura, en pocos minutos y sin la necesidad de poseer conocimientos técnicos, haciendo que cualquier organización pueda abordar su proceso de transformación digital.
Entre las tendencias tecnológicas destacadas también encontramos la hiperautomatización, que consiste en la mecanización de todas las tareas manuales y repetitivas desarrolladas por el equipo humano; las mallas de seguridad, encargadas de controlar de forma flexible y fiable la ciberseguridad o el Internet del Conocimiento (IoC), que analizan la información de los usuarios para ofrecerles soluciones en base a sus comportamientos.
La lista la completan la Total Experience (TX), que une la experiencia del cliente, del empleado, del usuario y la multiexperiencia; las infraestructuras Smart y la Native Cloud, que logra desarrollar aplicaciones directamente en la nube.
Ante esta radiografía, apretar el acelerador de la transformación digital para lograr organizaciones más competitivas, flexibles y optimizadas no es una opción, sino la única alternativa a la supervivencia de las mismas.