El mueble valenciano que ya es historia por su diseño

Una de las industrias más arraigadas en Valencia que puede presumir de mimar desde hace décadas el diseño es sin duda la del mueble. Un sector sin cuyas empresas hoy sería posible entender que la ciudad haya sido designada como capital mundial del Diseño en 2022. Dentro de los actos para celebrar este evento, la Fundación Bancaja ha reunido en una muestra cerca de medio centenar de las piezas con las que las empresas valencianas de mueble han marcado el camino durante más de un siglo.

La exposición, titulada El diseño y la modernidad. Pioneros del diseño en la industria valenciana del mueble (1898-1986) parte del inicio del proceso de industrialización en el mueble a finales del siglo XIX, cuando algunos industriales valencianos se convirtieron en pioneros del diseño con el desarrollo de producto propio. El paso de actividad artesanal a industrial en España se basaba en la estrategia de copia o reproducción de referencias extranjeras, el espejo en que se intentaba mirar una sociedad que tomaba conciencia de su realidad tras el Desastre del 98.

Esa crisis fue también la ocasión para algunas oportunidades, con el regreso de indianos que volvieron cargados de nuevos conocimientos y experiencias que rápidamente transformaron en nuevas industrias y en nuevos modos de hacer. También de quienes se aventuraron a salir a Europa y volver con tecnología y procesos innovadores, como fue el caso del mueble curvado. Un caldo de cultivo en el que surgieron algunas de las empresas que durante décadas serían referentes y que darían cobijo a distintos creadores de referencia.

La exposición que se puede visitar hasta el 27 de noviembre recoge algunas de las piezas de empresas familiares de varias generaciones como Martínez-Medina, GASISA, Mariner o la popular Federico Giner, cuyos pupitres formaron parte del paisaje escolar de toda España.

Una industria que tras el impacto de la Guerra Civil empezaría a recobrar nuevos bríos a finales de la década de 1950, gracias a la conexión con las tendencias europeas por vías poco habituales. Así, la empresa Martínez-Medina desarrollará un intenso trabajo para la industria naval española, especialmente para Unión Naval de Levante (UNL) y la compañía Trasmediterránea. Este trabajo los pondrá en contacto, por mediación del arquitecto y diseñador italiano Gustavo Pulitzer, con la compañía Arflex y, por ende, con el diseño italiano que empezarán a producir y comercializar para España.

El interiorismo naval fue también un espacio de conexión de esa industria del mobiliario y la decoración con la vanguardia artística. Joaquín Michavila o Anzo, entre otros artistas de la vanguardia valenciana, realizaron los murales de los barcos de Unión Naval de Levante. La muestra recoge también carteles, planos y catálogos que muestran esa apuesta por el diseño no sólo en el producto.

Paulatinamente introducen así productos bajo licencia de marcas internacionales en España, de diseñadores de primerísimo nivel mundial que empiezan a circular por la España de principios de los 60 como signo de una nueva modernización, aún tímida e incipiente. Unos aires nuevos tanto en los espacios domésticos como en los espacios de trabajo o en los espacios de ocio, marcando, así, la apertura hacia la modernidad de nuestro país en la década de los 60 y el desarrollo económico de mano de una industria pujante. Un prólogo de lo que sucedería en la siguiente década, en que el diseño reflejó los cambios en una sociedad en que lo “europeo” se convirtió en un valor positivo; lo “extranjero”, en un valor deseable.

De la mano de esos cambios se ponen en marcha a finales de los 70 a través de la Cámara de Comercio y de Feria Valencia los primeros programas para potenciar el diseño como elemento de valor añadido. A la vez que surge un pequeño grupo de jóvenes diseñadores que encuentra en el mobiliario una forma de expresión: Xavier Bordils, el Grupo Nuc (Lola Castelló, Vicent Martínez, Daniel Nebot, y Luis Adelantado), el Grupo Caps i Mans (Eduardo Albors, José Juan Belda, Jorge Luna y Carlos Albert), o José Miguel Martínez-Medina, entre otros.