Norauto ya obtiene un 6% de sus ingresos en España de la nueva movilidad

La filial española del grupo de autocentros que tiene su sede en Valencia y factura más de 200 millones crece con nuevas líneas, como los túneles de lavado y las baterías a domicilio

Norauto, la marca de mantenimiento de automóviles del gigante francés Movibia con presencia en 18 países y que incluye también marcas como Midas, ya se ha hecho un hueco más allá de los vehículos de motor. El negocio ligado a la nueva movilidad, como motos, bicis y patinetes eléctricos, ya representa el 6% de las ventas de la filial española, que cuenta con 90 autocentros y el año pasado superó los 200 millones de euros en el ejercicio cerrado en septiembre, por encima de las cifras prepandemia.

El director general de Norauto en España, José Domenech, considera que han hecho los deberes para la llegada del coche eléctrico tanto en inversión en herramientas y equipos como en formación para garantizar su mantenimiento. “En la pandemia aprovechamos para formar a dos electromecánicos en cada uno de nuestros centros. También creamos un centro de atención a distancia con todo el conocimiento especializado en este tipo de vehículos que puede operar en remoto”.

Muy vinculado a esa línea y como apuesta por la sostenibilidad, el grupo también tiene 20 proyectos en España para incluir puntos de recarga de coche eléctrico, además de instalar paneles fotovoltaicos en 27 de sus centros para producir el 40% de su consumo eléctrico. Otro de los mercados en los que Norauto prevé más recorrido es el de flotas para empresas ante el auge del renting o el alquiler de productos como maleteros de techo o remolques.

Norauto tiene previsto aumentar su presencia en España en los próximos años. “Nos hemos marcado el objetivo de llegar a 110 centros como punto de inflexión”, señala Domenech. La compañía ya tiene previstas nuevas aperturas de centros tradicionales en Elche y Fuenlabrada (Madrid). Sin embargo, Domenech apunta que sus planes van más allá de esos establecimientos que aúnan talleres y tiendas porque “el mercado nos está pidiendo modelos diferentes, no sólo autocentros”. Uno de los pilares de esos planes de crecimiento será el negocio de los túneles de lavado de vehículos. Una actividad que inició con su primer centro en Valencia, que abrió antes de la pandemia, y que ahora ha retomado, con una segunda instalación en Alcobendas (Madrid). “Estamos negociando nuevas aperturas y nos gustaría estar en tres años por encima de la decena de centros de lavado”.

“Hemos llevado a cabo una transformación con la que queremos aportar soluciones sostenibles de movilidad, ser mucho más que un taller”, comenta Domenech. Un proceso que se aceleró con la pandemia, con el servicio Easy Battery, para el cambio de baterías a domicilio en menos de dos horas y que ya supone el 5% de sus ventas de baterías.