L’Horta de Valencia frente al efecto invernadero en la COP 27

Global Omnium lleva a la Cumbre del Clima los proyectos para medir y actuar sobre la huella de carbono de las zonas agrícolas y del turismo de la capital valenciana.

La gran cita mundial para tratar de acordar soluciones a escala planetaria frente al cambio climático y el calentamiento global que se ha celebrado en Egipto ha conocido de primera mano algunos de los proyectos pioneros valencianos para hacer frente a este gran reto. Entre los ponentes que han participado en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y que este año se celebró en la ciudad de Sharm el Seij se encuentra el grupo valenciano Global Omnium, que desde hace años aplica su experiencia y su tecnología en la gestión de un recurso esencial, el agua, a otras áreas vinculadas con el medio ambiente.

Juan Luis Pozo, director de Sostenibilidad de Global Omnium, ha sido el encargado de participar en el foro con la voluntad de aportar la visión, el conocimiento, los valores y, sobre todo, los proyectos sostenibles del grupo valenciano. Uno de esos casos de estudio concreto está vinculado a uno de los grandes espacios únicos de Valencia y los municipios que la rodean, L’Horta que marca el paisaje y el ecosistema agrario que ha pervivido durante siglos en territorio valenciano.

Se trata de HortiGO2 es un proyecto piloto que se desarrolla en colaboración con el Ayuntamiento de Valencia y agricultores de la huerta del municipio. El método desarrollado por Global Omnium persigue determinar el dióxido de carbono (C02) que es capaz de absorber la huerta local y permitir así conocer hasta que punto ese espacio agrario actúa como sumidero de carbono. Un estudio que además de permitir conocer el efecto medioambiental también debe servir para valorar y cuantificar en términos de riqueza ecológica la actividad desarrollada en ese entorno.

Según explica el propio Pozo se trata de un proyecto que tiene doble interés, ya que por un lado con el también se hace frente al reto demográfico para que no se abandone el terreno y la apuesta por el producto local de proximidad en la lucha contra el cambio climático.

Ese es uno de los dos proyectos que Global Omnium apadrina ante la conferencia internacional en el marco de la estrategia de lucha contra el cambio climático para mostrar como compensar emisiones con acciones positivas en el territorio y con impacto local y que se pueda comprobar.

La segunda de esas iniciativas presentada ante la COP 27 es el caso de éxito que ha supuesto la medición de huella de carbono que genera el conjunto del turismo de la ciudad de Valencia y la estrategia para su descarbonización haciendo de la ciudad un destino turístico sostenible e inteligente. Dentro de su estrategia de sostenibilidad, el grupo hídrico decidió desarrollar una metodología y tecnología propia para medir su propia huella de carbono y a partir de ella poder actuar en cada área.

“Era una herramienta que concebimos hace cuatro años para uso interno del grupo”, explica el director de Sostenibilidad del Grupo Global Omnium. Hace tres años el Ayuntamiento de Valencia recurrió al grupo, su socio tecnológico en la empresa que suministra el agua de la capital, para buscar como cuantificar y plantear soluciones sostenibles para el turismo en la ciudad. “Fue entonces cuando nos dimos cuenta de las posibilidades que tenía GO2, nuestra herramienta para medir la huella de carbono”, apunta Pozo.

La principal ventaja que ofrece su instrumento tecnológico es su capacidad para desglosar los distintos orígenes de las emisiones contaminantes directas e indirectas, más allá de la suma total agregada. “Eso es fundamental porque permite tomar medidas que inciden directamente en las actividades y sectores donde más rápidamente se puede generar un impacto”, explica el responsable de Sostenibilidad. La compañía valenciana ya es toda una veterana en estas cumbres mundiales contra el cambio climático, ya que esta es la tercera edición en la que participa.

Global Omnium ha extendido su experiencia en esta materia para ayudar a grandes eventos que buscan reducir su huella de carbono al mínimo o alcanzar la neutralidad, como el Torneo Conde de Godó o la Gala Michelin en Valencia. En este último caso, para compensar las emisiones generadas la organización acordó financiar el cultivo en el entorno de Valencia de un cultivo agrícola con la propia marca gourmet de Michelin, que además se ofrecerá con un descuento del 15% en los restaurantes de la ciudad.

Precisamente Pozo hace hincapié en que la herramienta de Global Omnium no pretende ser un instrumento de greenwashing o marketing medioambiental que se limite a compensar esas emisiones con medidas como destinar dinero a actuaciones en la otra punta del planeta o la plantación masiva de árboles.

Otra empresa autonómica que ha intervenido en la Conferencia es la naviera alicantina Baleària. En su caso para mostrar casos de éxito como la apuesta por el gas natural, que permite descarbonizar barcos con el gas biometano, o la experiencia de su ferry eléctrico, que el próximo verano unirá Ibiza con Formentera reduciendo en un 80% las emisiones.