Más de 12 millones de metros cuadrados para las empresas

La Generalitat Valenciana extiende el modelo de Parc Sagunt para generar suelo y tratar de asegurar las inversiones empresariales en juego con los fondos Next Generation

La lluvia de inversiones prevista con los fondos europeos Next Generation para la recuperación y la transformación ha abierto una carrera por atraer los grandes proyectos empresariales de todos los ámbitos. Uno de los primeros filtros para optar a ellos es contar con espacio adecuado suficiente y que, además, sea competitivo en precio, pero también en otros costes, como los logísticos.

Una partida de ajedrez en que la Generalitat Valenciana ha movido ficha con el objeto de dotar a su territorio de suelo industrial que sea capaz de captar en los próximos meses esas grandes inversiones cruciales para generar un nuevo tejido productivo para las próximas décadas. La Administración valenciana apuesta por utilizar la herramienta con la que ha logrado desarrollar el que se ha convertido en su auténtico referente, el macroparque empresarial Parc Sagunt. Un polígono cuya primera fase de más de 3 millones de metros cuadrados está prácticamente ocupada con inquilinos como Mercadona, Tempe -filial de calzado de Inditex- o la multinacional de envases Crown.

La sociedad promotora, participada al 50% por el Gobierno valenciano y Sepides, filial de empresa estatal Sepi, se ha transformado de Parc Sagunt a Espais Econòmics Empresarials. El objetivo es aprovechar la estructura y la experiencia que han tenido tanto éxito en la primera fase del parque, además de los recursos económicos de la propia promotora, tras los ingresos cosechados con la venta de las parcelas de esa primera fase, según explica María José Mira, secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación y presidenta de la sociedad.

De hecho, la empresa ya lleva meses trabajando en el proceso de expropiación de la nueva joya de la corona de suelo industrial valenciano: Parc Sagunt II. Con 5,9 millones de metros cuadrados ubicados junto a la primera fase, ya ha recibido manifestaciones de interés que triplican la oferta prevista. Entre los candidatos que barajan esa ubicación se encuentra el disputado proyecto de gigafactoría de baterías eléctricas para el automóvil que lidera Volkswagen. “No hay parcelas de gran tamaño como las que puede ofrecer y la otra gran ventaja son los accesos y la futura estación intermodal”, destaca Mira, que ya piensa en Parc Sagunt III.

Espais ya ha adquirido 1,35 millones de metros cuadrados de cerca de 200 parcelas mediante acuerdos de compra directa por más de 24 millones de euros. Otros 4,2 millones de metros se encuentran en el proceso de expropiación, cuyo expediente se prevé aprobar el próximo 23 de febrero y que supondrá un desembolso de otros 56 millones de euros. El objetivo es poder tener a disposición los terrenos el 30 de abril y que a finales de año las primeras empresas puedan tener acceso al suelo, explica Teresa Ventura, directora de la sociedad pública.

El propio presidente Ximo Puig estimó en casi 280 millones la inversión total para desarrollar el suelo de Parc Sagunt II, que solo en las obras de urbanización estima un presupuesto de 107 millones de euros. Precisamente para agilizar los plazos se apuesta por un cambio de filosofía que según Vicente García Nebot, consejero delegado de Espais Empresarials, define como un “urbanismo productivo”. “Hemos pasado de realizar primero la urbanización de los parques para después intentar vender el suelo a primero venderlo y hacer la urbanización a la vez que las empresas se pueden instalar en sus parcelas”, explica. De esta forma también se pueden adaptar las parcelas y la urbanización a las necesidades reales de las empresas que se instalen.

Además de esa iniciativa estrella, Espais ya tiene encomendados o ha iniciado los contactos para trabajar en el desarrollo de otros proyectos en las tres provincias con las que dobla la superficie de suelo a desarrollar. El propio Ximo Puig anunció que Espais asumirá la creación del polo industrial y logístico previsto junto al puerto de Castellón, siguiendo el modelo de Parc Sagunt. Se trata de retomar un proyecto del que se lleva hablando con distintos nombres desde hace dos décadas para asegurar un pulmón logístico a los muelles castellonenses. Junto a ese suelo se levantará una estación ferroviaria intermodal, cuyo diseño acaba de sacar a licitación la Autoridad Portuaria de Castellón y que supondrá una inversión de 20 millones de euros.

Ese espacio de algo más de un millón de metros cuadrados además de tener una clara vocación logística resulta básico para consolidar el polo energético y químico en torno a la actual refinería de bp, el complejo de la japonesa UBE y las centrales eléctricas de Iberdrola. Un polo que además es uno de los principales eslabones en el plan valenciano del hidrógeno verde, ya que la refinería de bp prevé convertirse en 2024 en uno de los grandes productores de esa energía, con un proyecto de 160 millones de euros que incluye también instalar plantas renovables para abastecer su electrolizador.

Más al sur, también le ha sido encomendado a Espais el desarrollo del suelo que poseía la Institución Ferial de Alicante (IFA) en Elche, tras el rescate de la entidad que ha supuesto que sus terrenos pasen a manos de la Generalitat. En este caso se trata de 480.000 metros cuadrados junto al recinto ferial muy cerca del aeropuerto de Alicante y del polígono Elche Parque Industrial.

Otra de las líneas que se asumirá Espais es la de colaborar para sacar adelante otros polígonos de entidades públicas que quedaron estancados por crisis o por su larga tramitación. Este es el caso de Valpark, un polígono de más de 1,5 millones de metros cuadrados en el municipio de Vallada en el interior de Valencia cuya ejecución dejó a su Ayuntamiento en una delicada situación financiera. “En estos casos nuestra actuación no va en la línea de comprar el suelo y asumir el parque, lo que intentamos es reorientar el polígono o buscar alternativas urbanísticas y colaborar en la comercialización aprovechando las solicitudes que nos llegan. Se trata de aprovechar sinergias y ganar todos”, explica María José Mira.

En esa línea, la empresa pública ha iniciado contactos con el Ayuntamiento de Vinaroz, en el límite norte de Castellón. En ese caso se trata de una actuación de casi un millón de metros cuadrados, que en su día se paralizó por problemas legales durante la tramitación urbanística. En estos casos, “la prioridad son proyectos industriales, porque son los que generan un mayor ratio de empleo por espacio, pero también el sector logístico, que demanda grandes superficies y es otro de los principales interesados en estos desarrollos”, apunta Vicente García Nebot. En total, el Gobierno valenciano a través de Espais tiene en cartera proyectos que suman cerca de 10 millones de metros cuadrados. La Administración autonómica lidera otro macroproyecto, la creación de una zona industrial y logística junto al aeropuerto de Castellón, a través de la empresa pública que gestiona el aeródromo. La denominada Zona de Actividades Complementarias (ZAC) prevé generar más de 2 millones de metros cuadrados para empresas vinculadas a la industria aeronáutica y el transporte aéreo. Se prevé arrancar este año la urbanización, con una inversión de 105 millones.

Junto a los proyectos autonómicos, varios municipios quieren captar nuevas empresas. Desde 2019 el Ayuntamiento de Onda en Castellón ha puesto en marcha la iniciativa Onda Logistic con bonificaciones en licencias y tasas para atraer empresas. Una estrategia con la que se ha impuesto en la puja por la mayor plataforma logística de Amazon en Comunitat Valenciana, además de concentrar inversiones de azulejeras como Pamesa, Argenta o Halcón. Por su parte Villena, en el interior de Alicante, quiere desarrollar un puerto seco y una zona logística junto a las empresas Eiffage infraestructuras y Echo XXI sobre más de un millón de metros cuadrados.