Los presupuestos participativos del Consell suspenden en participación

    La fórmula elegida para involucrar a los ciudadanos en el destino de los fondos públicos concluye con escasos votos y una quinta parte de los fondos sin asignar

    Una de las grandes novedades de las cuentas públicas valencianas para el próximo año son los denominados presupuestos participativos. El Gobierno valenciano incorporará 96 propuestas presentadas por ciudadanos y colectivos a las que destinará fondos públicos después de haber pasado un proceso de participación pública. Una iniciativa que, sin embargo, ha contado con un respaldo popular más bien escaso. Apenas nueve de las solicitudes que pasaron la criba han contado con más de un millar de votos de apoyo popular y ninguno de ellos ha llegado a rozar los 2.000 votos.

    Es decir, que el 90% de los proyectos ha sido seleccionado con el respaldo de menos de un millar de valencianos. En el proceso de las votaciones finales apenas participaron 11.809 personas, menos que las que avalaron las propuestas presentadas inicialmente, cerca de 23.000, y muy lejos de los 3,6 millones de electores censados en la autonomía.

    El resultado es que en algunos casos se destinarán partidas públicas millonarias con el aval de una participación muy minoritaria. Por ejemplo, recibirá 6 millones de euros una propuesta que apenas ha sido respaldada por 76 votos: la construcción de varias plantas de compostaje de residuos orgánicos en Castellón. Con menos de 40 votos hay actuaciones como rehabilitar un campanario o recuperar espacios relacionados con la Guerra Civil.

    El escaso interés no es la única pega que se le pueden poner a una de las iniciativas con la que los partidos del Gobierno del Botànic en teoría buscan ampliar la participación ciudadana y democratizar la gestión. De las 241 propuestas que se presentaron a principios de año, sólo el 39% pasaron la criba de la Conselleria de Transparencia que dirige Rosa Pérez Garijo. La mayoría de las solicitudes se declararon inviables, algunas de ellas porque se consideraban que los proyectos ya estaban recogidos en iniciativas en marcha de los distintos departamentos del Gobierno valenciano. Eso no ha sido inconveniente para que otra parte de los proyectos se hayan aprobado para destinar los fondos a partidas ya existentes o previstas. El rechazo a la mayoría de proyectos contrasta con la realidad de que casi una quinta parte de los fondos previstos han quedado sin asignar: más de 23 millones de los 125 millones anunciados no tienen destino.