Consum rebasa los 2.000 millones en compras a proveedores
El fuerte tirón de la demanda en el hogar no solo benefició a las cadenas de distribución. El crecimiento de las ventas de la cooperativa valenciana de supermercados también repercutió en más de 4.000 proveedores españoles a los que destinó 2.142 millones de euros, un 13,7% más que el año anterior
Las cadenas de supermercados formaron parte de las actividades consideradas esenciales durante el estado de alarma por el Covid y eso, unido al fuerte aumento de la demanda en el hogar derivado de la situación, llevó sus cifras de ventas a niveles récord. Este fue el caso de Consum, la cooperativa valenciana que con sus 791 tiendas alcanzó el año pasado una facturación de 3.325 millones de euros, un 13,3% más que en 2019.
Un aumento del negocio que Consum también trasladó a sus 4.238 proveedores en su cadena de valor con un potente aumento en el volumen de compras realizado en 2020, que también batió sus máximos históricos registrados hasta ahora. De esa cifra total, 1.250 son incluidos como proveedores comerciales, es decir, las empresas cuyos productos distribuye en su tienda fundamentalmente de alimentación y vinculados al hogar. La cadena de supermercados realizó compras por valor de 2.142,7 millones de euros, lo que supone un aumento del 13,7% respecto al año anterior.
Según explica la propia cooperativa en su memoria de sostenibilidad de 2020, el 98,9% de las compras se han realizado a proveedores nacionales. Además, el 66,2% del volumen correspondió a proveedores locales de las comunidades autónomas en las que está presente a través de su red de establecimientos: Comunitat Valenciana, Murcia, Cataluña, Aragón, Castilla-La Mancha y Andalucía. “Se estima que la actividad de Consum genera más de 39.000 puestos de trabajo indirectos, principalmente dentro de su cadena de suministro y en sus contratistas de servicios”, recoge en su memoria. Una cifra que supone un incremento en más de 3.000 puestos indirectos respecto al año anterior. La propia Consum aumentó notablemente su plantilla el último año, con 1.355 empleados más, hasta 17.386 trabajadores. En su caso, el 92% de los empleados son socios cooperativistas.
La cooperativa “considera a sus proveedores como aliados clave para el desarrollo de un surtido innovador adaptado a las necesidades de sus socios y clientes”, destaca en el apartado en que analiza sus relaciones con su cadena de valor. Según sus últimos datos, alrededor del 84% de sus proveedores comerciales le suministran con marca de fabricante. En esa línea de impulsar “relaciones más justas, equilibradas y leales a lo largo de la cadena alimentaria, Consum está adherido desde 2016 al Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la Contratación Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA)”, por el que se compromete a aplicar de manera voluntaria buenas prácticas mercantiles en las relaciones comerciales con sus proveedores.
En esa misma línea, una de sus prioridades es mejorar sus plazos de pago a proveedores, algo que en el último ejercicio se ha visto frenado por la coyuntura. “Debido a la situación extraordinaria de la pandemia, se ha incrementado el porcentaje de compras de productos con mayor plazo de pago, lo que ha producido retrasos en los plazos de pago medios, que han situado en 44 días durante 2020. La Cooperativa trabajará por seguir reduciéndolos al mínimo posible durante los próximos años”, señala. En los dos años anteriores el periodo medio se había mantenido en 42 días.
La cooperativa también incluye en todos sus contratos una cláusula de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), con la que Consum promueve que los proveedores compartan los valores de la cooperativa, especialmente los relacionados con la protección de los derechos laborales, la conciliación de la vida familiar y laboral, la igualdad de oportunidades, así como la eficiencia ambiental de los recursos y el respecto a los derechos humanos.