Pamesa, el coloso castellonense que superará los mil millones este año
El mayor fabricante europeo de baldosas cerámicas y el séptimo en el mundo comercializó el año pasado más de una cuarta parta del azulejo español y este año invertirá más de 70 millones de euros para reforzar producción, logística y levantar su nueva sede a la que se mudara desde Almassora a Vila-real.
Pamesa no pisa el freno y tras destinar más de 180 millones de euros en los últimos dos ejercicios para consolidarse como el mayor fabricante de Europa de baldosas cerámicas. El grupo industrial de Fernando Roig comercializó el año pasado algo más de 130 millones de metros cuadrados de cerámica (algo más de 90 millones producidos por sus propias factorías), lo que supone casi el 27% de la producción de todo el sector español durante el pasado ejercicio.
El conglomerado industrial castellonense prevé mantener ese fuerte ritmo inversor, con más de 70 millones de euros de desembolso para este año. Buena parte de ese esfuerzo se destinará a seguir creciendo de forma orgánica y tratar de cubrir con su propia fabricación esa parte que actualmente comercializa con producción de terceros. Entre empresas propias y “colaboradoras” –entre las que incluye a Argenta en la que Fernando Roig controla el 50% y Bestile–, Pamesa pretende aumentar su capacidad de producción en un 40% con la instalación de nuevos hornos durante 2021 y 2022 que permitirán incrementar y mantener la actual capacidad de suministro a sus clientes.
En esa línea, otra de sus prioridades es garantizar el abastecimiento de arcillas y materias primas, para lo que se ha planteado la adquisición de minas fuera de España, además de poner en marcha una nueva explotación en una antigua mina de carbón de Estercuel (Teruel), con la creación de 100 empleos. El grupo ya tiene dos explotaciones de arcillas en la provincia vecina.
En estas inversiones también se incluye la adquisición de planta de PLP (Pulidos La Plana) en Onda, de más de 7.000 metros cuadrados de superficie y con maquinaria de última generación de pulido, corte y rectificado cerámico. Con su incorporación, el conglomerado azulejero verá ampliada su capacidad de pulido en 360.000 metros cuadrados mensuales, lo que supone un aumento del 27% en el segmento de pulidos, una actividad complementaria a la producción cerámica.
Otras iniciativas que desarrollará este año será la construcción de su noveno centro logístico, con un total de 140.000 metros cuadrados, además de un nuevo almacén de 52.000 metros cuadrados para arcillas junto a la planta de TAU en Castellón.
Pese a la apuesta por esa integración vertical de toda la cadena, Fernando Roig descartó dar el salto al canal de ventas directas al consumidor final. “Somos buenos fabricando y queremos centrarnos en seguir siendo los mejores en eso”.
Aunque probablemente no tendrán tanto impacto en sus planes de crecimiento, la iniciativa con una carga más simbólica será la creación de una nueva sede corporativa en Vila-real. Allí se trasladarán desde la vecina factoría de Almassora las nuevas oficinas centrales del buque insignia del grupo, Pamesa Cerámica, con un total de 6.387 metros cuadrados y que prevé estar listo para finales de 2021.
El gigante azulejero disparó su beneficio neto pese al Covid hasta los 49,35 millones de euros, con un alza del 56%. Tras incrementar un 11% su negocio total, el grupo del también presidente y dueño del Villarreal Club de Fútbol, Fernando Roig prevé dar un nuevo salto vertiginoso este año y elevar su negocio global un 40%: de los 782 millones hasta 1.100 millones de euros. Un volumen de negocio en el que también incluye su actividad en el sector energético y de materias primas cerámicas. Las ventas de producto cerámico del primer fabricante español han continuado con fuertes crecimientos tanto en 2020, con un alza del 20%, como en los primeros cinco meses de este año, del 63%. Un alza que el año pasado más que compensó la caída del 31% en sus ventas de electricidad y gas por la caída de precios, así como en el negocio de las materias primas.
El grupo castellonense se muestre confiado en mantener disparados sus crecimientos en ventas de azulejos con un repunte del 46% este año que permita situar sus ventas globales en 1.100 millones de euros y el beneficio antes de impuestos por encima de los 100 millones este año.