Intur busca más ubicaciones ‘prime’ tras su nuevo hotel en San Sebastián

La división hotelera de Grupo Gimeno considera que la crisis por la pandemia en el sector turístico supone una oportunidad para crecer tanto en el segmento vacacional como en el urbano. En ambos casos su estrategia se basa en emplazamientos que le aporten un valor añadido y diferencial

Hoteles Intur, la cadena hotelera perteneciente al castellonense Grupo Gimeno, ha apretado el acelerador para poder operar al 100% todos sus establecimientos este verano e incluso sumar su última incorporación, el nuevo hotel el Villa Katalina en San Sebastián. Su segundo establecimiento en la capital vasca, con el que alcanza los diez establecimientos en toda España y que se suma a sus aperturas en el último año dirigidas al mercado del turismo urbano en ciudades como la propia ciudad guipuzcoana, Sevilla o Madrid. Un plan de crecimiento que la cadena tiene intención de mantener pese a la pandemia, incluso aprovechando las nuevas oportunidades que ha supuesto su impacto en el sector, según explica el director general de Hoteles Intur, Iker Llano.

“Seguimos trabajando para incorporar nuevos establecimientos tanto en urbano como vacacional”, explica Llano, que aunque reconoce que las últimas aperturas se han centrado en grandes ciudades enfocadas al turismo urbano, señala que también tienen en el punto de mira crecer en destinos vacacionales. “Lo que buscamos tanto en uno como en otro mercado son ubicaciones prime, que es lo que nos diferencia como Intur”. De hecho, el nuevo hotel boutique en San Sebastián es un claro ejemplo de esa estrategia, al situarse prácticamente pegado a la Catedral del Buen Pastor en un edificio centenario a cuya rehabilitación y decoración se ha destinado una inversión de 4 millones de euros.

Según comenta el directivo de Intur, “sabemos que el sector ha quedado muy tocado. En nuestro caso fuimos prudentes en el crecimiento y eso nos ha servido para salir reforzados de esta crisis. Eso nos coloca como un operador bien situado para apoyar a hoteles independientes o para la gestión de activos”. En esa línea de crecimiento, el grupo castellonense, con varios establecimientos históricos en Castellón y Benicassim, está estudiando nuevos proyectos y oportunidades “en España y Portugal”, aunque no se marca plazos para sus futuras aperturas.

Además de los hoteles, una de las palancas de crecimiento que se plantea la empresa de Grupo Gimeno son los apartamentos urbanos, para lo que creó la marca Core Suites que gestiona un edificio de apartamentos urbanos en Sevilla. “El alquiler de apartamentos es un modelo que llevamos mucho tiempo haciendo en la costa de Castellón con Orange y la experiencia en el modelo urbano en Sevilla nos ha ido muy bien con Core Suites. Seguiremos apostando por ello. Allí donde tenemos hoteles nos gustaría también tener apartamentos con esa marca”, señala Llano.

Recuperación

La cadena que tiene en marcha sus establecimientos desde mayo está percibiendo la recuperación en el mercado turístico durante esta campaña, aunque a dos velocidades. “En los hoteles en que tenemos mercado nacional tenemos cifras cercanas o incluso superiores a 2019, como en Alcázar de San Juan, Benicassim o Castellón. Donde dependemos más del mercado internacional como Madrid, Sevilla o San Sebastián tenemos buenas cifras, pero los precios medios no son los mismos que están dispuestos a pagar”.

Por ello, las previsiones de la cadena para este año son mucho mejores que las del ejercicio pasado en que los hoteles apenas pudieron trabajar poco más de dos meses. Sus expectativas son llegar a cerca del 80% de los niveles de facturación de 2019.

“La pandemia no ha supuesto un cambio en la estrategia, en lo que sí ha influido es en que hayamos acelerado aplicaciones tecnológicas y otras operativas, como mejorar los sistemas sin contacto, como el pre-checking o el control de aforos por zonas en los hoteles. Han sido nuevos procesos que hemos generado tanto con el departamento de tecnología como con el de marketing, porque se trata sobre todo de ofrecer soluciones que hagan la vida más fácil al cliente”.

El director de Hoteles Intur reconoce que el año pasado fue muy duro por la caída de ingresos y la gestión de la caja, pero también por la gestión de personas. “Nuestra división de turismo y ocio, que incluye el parque acuático Aquarama en Benicassim y los servicios de restauración colectiva de colegios y hospitales suma casi 1.000 personas en total. Afortunadamente ya hemos reincorporado a todos”.