Valencia, una huerta cada vez más fértil para las ‘startups’

El número de empresas emergentes instaladas en la región crece un 20% en tres meses y la inversión en firmas con sede en la capital rozó los 180 millones de euros en 2020

Casi con la misma rapidez que se ha generalizado de palabra startup en todos los ámbitos sociales y económicos estas empresas emergentes están floreciendo con fuerza, fundamentalmente en la capital valenciana, pero también en el resto de la Comunidad Valenciana. Los datos del Observatorio Startup Comunidad Valenciana que se elabora desde hace tres meses no dejan dudas de que este fenómeno ha echado raíces en el territorio valenciano. Actualmente están registradas 862 startups en la región, un 20% más que hace apenas tres meses, cuando empezó a recopilar sus datos este Observatorio puesto en marcha por la asociación Startup VLC.

La gran mayoría de este nuevo tejido empresarial innovador se concentra en la ciudad del Turia y sus alrededores, según las conclusiones del Observatorio. Así, el 87% de las firmas emergentes están ubicadas en la provincia de Valencia, frente al 9% de Alicante y el 4% de Castellón. El estudio también incluye otras entidades que explican que Valencia se haya convertido en uno de los ecosistemas abonados a los emprendedores con más atracción de toda España. En la Comunidad Valenciana se ubican 26 aceleradoras e incubadoras de empresas, con referentes tanto en volumen como en calidad como Lanzadera, el proyecto de Juan Roig que solo en su última edición alberga a un centenar de proyectos.

Otro de los eslabones básicos de la cadena para que prosperen las startups que se ha asentado en la ciudad del Turia es una comunidad inversora capaz de apoyar e impulsar este tipo de planes innovadores. El Observatorio ha identificada 26 inversores, fondos y business angels especializados en la región, además de 14 iniciativas de corporate venturing de empresas que apuestan por invertir en la innovación tanto con la creación de startups a partir de sus propios desarrollos como participando en las de emprendedores externos.

Uno de los indicadores que dan una idea de la consolidación de Valencia como polo de atracción de startups precisamente es la evolución de la inversión en firmas de este tipo con sede en la capital. Según desvela el último informe del Observatorio de Startups de la Fundación Bankinter, el año pasado la inversión en firmas valencianas alcanzó los 179,91 millones de euros. Una cifra que solo superaron Barcelona y Madrid y que supone multiplicar el importe por más de seis con respecto a 2019. En los últimos tres años las startups con sede en Valencia han captado más de 317 millones.

El informe anual destaca que la ciudad del Turia entró en el top 10 de las mayores operaciones protagonizadas por firmas españolas el año pasado, con dos inversiones. Un ranking que hasta ahora era exclusivo de firmas de Barcelona y Madrid. Se trató de Flywire, la herramienta de pagos digitales fundada por Iker Marcaide, con 113 millones de inversión, y Jeff, la firma que ha digitalizado las franquicias de lavanderías y ha saltado a otros sectores, con 17,5 millones de inversión. Incluso Valencia llega a situarse sólo por detrás de Barcelona en el ranking de startups invertidas por cada millón de habitantes, con un ratio de 96,22, lejos aún del 177,26 de Barcelona, pero ya por encima del 80,97 que registra Madrid.

En el lado inversor, también incluye a GoHub Ventures como uno de los mayores actores por operaciones el año pasado, nueve, aunque en importe Angels Capital, la firma del presidente de Mercadona, destaca con 36,4 millones. En el informe de la Fundación Bankinter destaca que el auge de Valencia y otras ciudades, como Alicante, coincide con un descenso en las otras dos grandes capitales y apunta también a otro elemento de descentralización: “Seguramente deben este crecimiento al advenimiento de las videoconferencias, que disminuye la relevancia del hub al captar inversión”.

El análisis de este ecosistema emprendedor valenciano también refleja algunas tendencias claras. Así, destacan las firmas dedicadas al desarrollo de software, que suponen el 11,6%, aunque también existe una fuerte presencia de tecnología vinculada a la salud y el bienestar, que suponen el 8,6%, ligeramente por encima del comercio electrónico.