La matriz de Ribera Salud mira a Europa ante las reversiones

El grupo asegurador norteamericano Centene, el dueño de la firma Ribera Salud que introdujo el sistema de gestión privada en los hospitales públicos de la Comunidad Valenciana, ha decidido remodelar su cúpula directiva para reforzar la búsqueda de nuevas oportunidades para invertir en su crecimiento en Europa. Para ello Centene ha nombrado a Alberto de Rosa, el que era el CEO de Ribera Salud y máximo responsable de la compañía valenciana desde hace 20 años, en nuevo director ejecutivo para Europa.

Según explicó la compañía, en su nuevo cargo, De Rosa dirigirá la sede regional europea de Centene, situada en Madrid, donde asumirá responsabilidades relativas al crecimiento y desarrollo de nuevas oportunidades en Europa, así como de proyectos ya existentes. Con esta decisión Centene pretende potenciar la experiencia de Ribera Salud y su modelo de gestión de salud poblacional para continuar desarrollando proyectos innovadores en Europa.

Por su parte, Elisa Tarazona, hasta ahora directora de Operaciones y con una larga trayectoria en la empresa, ha sido designada como nueva CEO de Ribera Salud para reemplazar a De Rosa al timón del grupo valenciano.

Un movimiento que se produce justo después de que la Generalitat Valenciana presidida por Ximo Puig anunciase que no prolongará la concesión del área sanitaria de Torrevieja en Alicante, que mantiene Ribera Salud y que vence en octubre del próximo año. Una medida que se suma a la reversión del área de salud y del hospital de Alzira en Valencia, el primero que se implantó con el modelo de la concesión de la gestión y que también explotaba Ribera Salud hasta 2018. Ante la decisión del Gobierno regional de seguir adelante con esta política que supondrá reducir la actividad de la empresa, Centene ha decidido mirar hacia nuevas oportunidades e inversiones en otros mercados europeos.

En el caso del Hospital de Torrevieja, la medida choca con los buenos resultados que había logrado hasta ahora la gestión de Ribera Salud y además se produce en medio de la incertidumbre por la emergencia sanitaria. De hecho, actualmente el tiempo de espera medio para una intervención en el Hospital Universitario de Torrevieja es de 35 días, una cifra, cuatro veces inferior a la media de los otros hospitales públicos de la Comunidad Valenciana, situada en 151 días, según los datos oficiales que la Conselleria de Sanidad ha publicado hace unos días. El otro centro público con menor lista de espera quirúrgica es el Hospital Universitario del Vinalopó, también gestionado por Ribera Salud, con una media de 44 días.

La gestión de Ribera Salud al frente del Hospital de Torrevieja también ha contado con un importante respaldo de ayuntamientos de la zona. Además, en 2018 la Sindicatura de Comptes emitió un informe en que concluía que el Departamento de Salud de Torrevieja es uno de los “más eficientes” a la hora de evaluar “conjuntamente el principio de economía y el principio de eficacia”. Entre los aspectos que analizó, la Sindicatura subrayó que la asistencia integral de la población atendida por el Departamento de Torrevieja es un 30% más barata que el gasto que supone la gestión pública de los hospitales valencianos. En dicho estudio se reflejaba que al cierre de 2016 la empresa había invertido 104,4 millones de euros en el hospital y sus centros de salud, muy por encima de los estipulado en la concesión.

La compañía valenciana mantiene la gestión del departamento sanitario de Elche-Vinalopó y participa en la concesionaria de Denia junto a DKV en la Comunidad Valenciana. Además, también gestiona bajo esa fórmula el hospital de Torrejón en Madrid, donde participa en el Laboratorio Clínico Central de la Comunidad de Madrid. También asumió el hospital municipal de Villanueva de la Serena en Badajoz. Además, la propia filial valenciana ya ha acometido un giro en su actividad para entrar en el sector de los hospitales privados con la compra del hospital Povisa en Vigo y también del centro Polusa en Lugo.