El precio de los pisos cae en Benimaclet, pero aumenta en Benicalap

Los efectos de la crisis empiezan a notarse en algunos barrios de Valencia, pero sobre todo en la provincia de Alicante por el impacto sobre los compradores extranjeros

Los efectos de la crisis generada por la pandemia ya se reflejan en el mercado inmobiliario y no solo en el descenso del número de compraventas. También empieza a tener una clara percepción en los precios de zonas muy concretas de las grandes ciudades valencianas. Según la estadística Tinsa IMIE Mercados Locales, al cierre del tercer trimestre el valor medio de la vivienda en la Comunidad Valenciana desciende en términos interanuales un 2,9%. Un claro efecto de la coyuntura generada por el covid.

Sin embargo, el impacto es muy diferente, no ya solo entre municipios, sino incluso entre barrios, según los datos publicados por la tasadora. El ejemplo más claro es el de Valencia, donde conviven subidas y bajadas extremas. Es el caso del barrio de Benimaclet, que ha visto como el precio medio del metro cuadrado se reduce un 17,4%, hasta 1.285 euros, según los datos de Tinsa. Aunque la tasadora no entra a analizar las razones de la estadística, tras este descenso se puede encontrar el fuerte peso que tradicionalmente tiene el alquiler en ese distrito próximo a las universidades. Precisamente es uno de los segmentos del negocio inmobiliario que se ha visto afectado más rápidamente por el confinamiento y la incertidumbre generada.

La evolución de Benimaclet contrasta con la de distritos como L'Olivereta y Benicalap, con incrementos interanuales del 19% y del 16%, respectivamente. De hecho, en el análisis por distritos la mayoría sigue al alza, con las excepciones de Poblados del Norte, Camins al Grau, Rascanya y Poblados del Oeste, junto a la de Benimaclet. En conjunto, el precio medio del metro cuadrado en Valencia se situó en 1.415 euros, con un descenso de apenas el 0,6% interanual, hasta 1.415 euros, inferior a las caídas de Madrid y Barcelona

Las capitales de Castellón y Alicante de momento no han dado un giro a los precios, que incluso crecieron: un 2,9% de media en ambos. En el caso de Alicante, la evolución de la capital contrasta con la del conjunto de la provincia, que vio como el metro cuadrado se depreciaba un 4,4%. Como es sabido, las operaciones de compradores foráneos superan el 40% del mercado y es especialmente significativa en determinadas zonas de costa. Una muestra de que las restricciones a la movilidad internacional y las cuarentenas también afectan al ladrillo.