BBVA, a por los los clientes de la tarjeta Mercadona

Le comunicamos que su tarjeta Mercadona, así como la de sus autorizados, son sustituidas por la tarjeta de BBVA Mastercard Shop Card”. Así reza la carta que está enviando el banco a los usuarios del medio de pago que ha decidido dejar de utilizar la cadena de supermercados de Juan Roig, un comunicado que va ya acompañado de la nueva tarjeta a nombre del cliente, lista para su uso.

“Si quiere disfrutar cuanto antes de la tarjeta BBVA Mastercard Shop Card llame al teléfono (...) para activarla”, subraya el banco en su ofensiva por convertir a los usuarios en sus clientes. “Si no quiere la tarjeta BBVA Mastercard Shop Card tiene dos meses desde la recepción de esta carta para comunicárnoslo (...). Si no nos dice nada antes de dicha fecha, entendemos que acepta la sustitución y a esa fecha la tarjeta de Mercadona dejará de estar operativa”, llega a advertir el escrito de la entidad financiera.

Preguntadas al respecto, fuentes de Mercadona trasladan a elEconomista Comunitat Valenciana que, como vienen informando a sus clientes, han tomado la decisión de retirar su tradicional tarjeta a lo largo del presente 2020, al entender que “ya no aportaba valor”.

El servicio consistía en una tarjeta para uso exclusivo en sus tiendas que permitía el pago aplazado de sus compras sin intereses. Pese a que la misma lucía tan solo la marca de Mercadona y a que se leía mediante un código de barras en la caja -no con la habitual banda magnética- el proveedor de la cadena para ofrecer este servicio era BBVA. De ahí que la entidad financiera sea la que ofrece ahora a los clientes un servicio alternativo ante el fin del sistema original.

El nuevo carece también de comisión por emisión y mantenimiento, y ofrece a su vez la “forma de pago total”, que consiste en pagar todo lo gastado “una vez al mes, sin intereses”.

Para cualquier comercio

La principal diferencia, por contra, es que los usuarios ahora podrán elegir entre “comprar en todos los establecimientos adheridos a Mastercard o limitar su uso a Mercadona”, según la información que remite BBVA a los clientes de la compañía valenciana. Es decir, que quienes se acojan al sistema pasan a tener una tarjeta de compra convencional.