Valencia, alternativa a Bristol para captar una planta de Tesla

El Ministerio de Industria estudia el plan de la consultora IBC & Partners para arrebatar a UK una inversión de la firma americana y desarrollarla en la Comunitat o en Cataluña

España puede tener una segunda oportunidad para captar una inversión con la que sueñan todos los países productores de automóviles: la creación en su territorio de una factoría de Tesla, la compañía que abandera la fabricación de vehículos 100% eléctricos. Alemania hizo valer su condición de líder europeo del sector para atraer la primera fábrica en el continente de la firma de Elon Musk, pero la enseña parece dispuesta a desarrollar una segunda infraestructura, y la consultora IBC & Partners pugna por que España sea esta vez la nación elegida y propone Valencia y Barcelona como posibles ubicaciones, según ha podido contrastar elEconomista. La iniciativa la impulsa Enrique de Areba, vicepresidente ejecutivo de la firma, que postula a España tras el revuelo que generó el mes pasado una vista a Bristol por parte del fundador y dueño de Tesla. “Elon Musk considera crear en Bristol una nueva fábrica de Tesla”, llegó a publicar al respecto The Times, que explicó que el magnate sudafricano se desplazó al lugar en su jet privado junto a su director ejecutivo con el objetivo de conocer de primera mano el enclave en el que podría construirla.

Ante tal escenario, IBC & Partners propone una reacción por parte del Gobierno de España, que ponga sobre la mesa de Tesla las virtudes del país y su industria del automóvil para captar esta inversión que parece camino de Reino Unido. La consultora, en una reunión prevista para las próximas semanas, detallará al Ministerio de Industria su propuesta, en la que el departamento estatal se ha mostrado muy interesado. La firma propone dos ubicaciones españolas que, a su juicio, ofrecen ventajas a Tesla frente a la posibilidad de establecerse en Bristol. En primer lugar, plantea ofrecer a Tesla espacios próximos a la factoría de Ford en Almussafes, Valencia. Esta área cuenta como grandes ventajas la posibilidad de desarrollar una gran factoría desde cero -tal y como le gusta hacer a Elon Musk- junto al gran parque de proveedores desarrollado al calor de la marca del óvalo y a escasos kilómetros del Puerto de Valencia, del que Ford ya hace un uso intensivo para la exportación de sus vehículos.

Ubicarse donde ya se encuentra otra firma estadounidense -Ford acumula una experiencia de más de 40 años de seguridad jurídica con las administraciones estatales, autonómicas y locales- es un punto fuerte para una compañía americana como Tesla. IBC & Partners no propone unos terrenos concretos, pero el entorno de Ford cuenta con varias posibilidades. El propio Ayuntamiento de Almussafes ofrece 700.000 metros cuadrados de suelo industrial. Por contra, el actual punto débil de Valencia es su mala conexión ferroviaria para las mercancías hacia Europa, pues las obras del corredor mediterráneo avanzan con retraso al sur de Cataluña.

Y Barcelona es precisamente la alternativa a Valencia que propone la consultora para el hipotético asentamiento de Tesla, en concreto la vacante factoría de Nissan en la Zona Franca de la capital. Se trata de una ubicación que, de partida, difiere con el modelo de Tesla de construir a su gusto sus gigafactorías, pero que IBC & Partners pone sobre la mesa por su ubicación excepcional entre el puerto y el aeropuerto de la Ciudad Condal. Además, se trata de un espacio gestionado por un consorcio en el que participan al 50% el Gobierno de España y el Ayuntamiento de Barcelona, administraciones dispuestas a ofrecer todas las facilidades a un inversor para rehacerse del duro golpe de la marcha de Nissan. Por contra, Cataluña tiene como hándicap la inestabilidad del independentismo. De hecho, uno de los puntos a favor de la inversión en España por parte de compañías americanas es la presencia en el país de bases militares estadounidenses.

Frente a Reino Unido, IBC & Partners subraya que España, en cualquiera de las ubicaciones, puede facilitar a Tesla el acceso a las ayudas europeas para el desarrollo de infraestructuras para potenciar la movilidad eléctrica, algo que los británicos ya no pueden ofrecer tras su salida de la Unión Europea. Con todos estos argumentos, la intención de la consultora es aprovechar sus contactos en Tesla para presentar una propuesta a la compañía en nombre del Gobierno de España ofreciéndole las diferentes posibilidades y facilidades para su implantación.

Mientras tanto, las informaciones publicadas por la prensa británica apuntan a que Tesla se ha fijado en Bristol por el gran espacio disponible. El Gobierno le buscaba enclaves de entre 500.000 y 1,2 millones de metros cuadrados, si bien el hallado en Bristol cuenta con hasta 2,6 millones de metros.