Un nuevo derrumbe obliga a la AEAT a cerrar otro edificio

Tras los desplomes en el techo de Guillem de Castro, que mantienen cerrada la sede central desde 2016, la Agencia Tributaria sufre ahora un desprendimiento en Blasco Ibáñez

La Agencia Tributaria, cuatro años después del gran derrumbe que sufrió en sus oficinas centrales en Valencia -las de la calle Guillem de Castro- sufrió este mes de julio un nuevo desprendimiento en la Capital del Turia. En esta ocasión fue en el edificio de la Administración de Blasco Ibáñez -ubicado en la calle Músico Ginés-, donde cayó un fragmento de varios metros cuadrados de falso techo sobre uno de los puestos de trabajo del personal que atiende a los contribuyentes, junto a los mostradores. Por suerte, tal y como ocurrió en 2016, los hechos se produjeron la madrugada del 14 de julio y ningún trabajador se vio afectado.

Así lo confirmó la propia Agencia Tributaria preguntada al respecto por elEconomista, que explicó a este diario que el edificio fue clausurado. “Durante la noche se cayó una luminaria colgada de un falso techo en una zona concreta de mostrador en la planta baja de la administración de Blasco Ibáñez. El vigilante de seguridad ha dado aviso y se ha dado orden de que hoy no entra nadie a trabajar allí. El edificio está cerrado al público. No se ha producido, por tanto, ningún perjuicio para funcionarios, ni contribuyentes”, subrayaron.

Según añadieron, la atención al público se desvió “a la plataforma de Renta, al edificio de la Aduana”. El espacio habilitado, según agregaron fuentes sindicales, tenía capacidad para alrededor de 40 funcionarios, y con estos puestos se cubrieron las necesidades del personal que tiene que acudir de forma presencial a su entorno de trabajo, ya que no todos deben hacerlo por las medidas adoptadas para contener la expansión del Covid-19.

Un centro de 100 empleados

En condiciones normales, en la Administración de Blasco Ibáñez trabajan más de 100 empleados de la Agencia Tributaria. Se trata de un centro importante de la ciudad, una oficina integrada para la gestión y la recaudación a la que están asignados todos los contribuyentes que residen al norte del Jardín del Turia.

“En estos momentos se encuentra personal técnico nuestro evaluando el lugar, a efectos de analizar las reparaciones que será necesario acometer, así que es pronto para hablar de efectos y de duración de la eventual obra”, agregaron al respecto a este diario fuentes de la AEAT, que todavía no han precisado la duración de las restricciones.

Las mismas fuentes sindicales lamentaron que no se permitió acceder al inmueble a los delegados de prevención, “tal y como ya ocurrió en Guillem de Castro”. Según criticaron, la normativa en materia laboral los habilita a acceder a las instalaciones para conocer lo ocurrido. En el lugar, por contra, sí se presentaron los bomberos y la policía, que levantó el preceptivo atestado.

Dos desplomes previos

El desplome en este edificio de alquiler se suma a dos previos que se produjeron en 2016 en la sede central de Guillem de Castro, que sí es propiedad del Estado y se encuentra cerrada desde entonces. Aquel derrumbe, por el que la Agencia Tributaria mantiene con algunos sindicatos un tenso tira y afloja para esclarecer lo ocurrido, evidenció las carencias de su distribución inmobiliaria en Valencia, donde paga numerosos alquileres repartidos por toda la ciudad.

Tanto es así que Hacienda ha reactivado este mismo mes de julio el proyecto paralizado por la pasada crisis para la creación de una nueva sede en la capital valenciana, en la que prevé concentrar servicios y aglutinar a 1.500 funcionarios de las Delegaciones Especiales de la Agencia Tributaria y del Ministerio de Hacienda de la ciudad.

El edificio se construirá en el solar de 6.859 metros cuadrados situado en la calle Luis García Berlanga -en la zona de la Avenida de Francia, junto al centro comercial Aqua Multiespacio-, y acogerá los servicios de Gestión, Recaudación, Inspección y Delegación Central de Grandes Contribuyentes de la Agencia Tributaria en Valencia, así como la Gerencia del Catastro y el Tribunal Económico Administrativo Regional de Valencia.

“Pondrá fin a la dispersión actual de edificios, pasando la nueva sede a ser el centro de referencia de atención al ciudadano”, explicó al respecto el organismo. El nuevo proyecto es el resultado de la adaptación del original de 2010, que también llegó a contar con licencia de obras del Ayuntamiento.