Un proyecto estratégico para ser un polo de atracción de inversiones en movilidad
El Mobility Innovation Valencia (MiV) es una oportunidad estratégica para la Comunitat Valencia para convertirse en un foco de innovación que atraiga inversiones a nuestro territorio. Más allá de la propia industria de automoción, el MiV es la palanca que puede convertir nuestra región en un enclave determinante en la movilidad que se abre ante nosotros y en la que intervienen diversos agentes, tanto productivos como innovadores y empresariales.
Esto es así porque el MiV no solo pone su atención en la fabricación de componentes, actividad en la que ya somos especialmente competitivos, sino que también incluye a todo un ecosistema innovador que permite aunar el conocimiento y la innovación que se desarrolla en diversos escenarios. Toda esta innovación puesta al servicio de la sociedad para ofrecer respuesta al nuevo paradigma de la movilidad.
El MiV tiene en cuenta a las empresas del sector del automóvil y sus necesidades, pero, sobre todo, tiene en cuenta las necesidades y los cambios que se han producido en los consumidores y que han convertido el vehículo en un servicio que se paga por uso, y que no se adquiere. También el MiV tiene en cuenta las necesidades que se abren en materia de conectividad, seguridad, productividad, mejora de la competitividad, electrificación, descarbonización, etc. El MiV aterriza las megatendencias en movilidad y las acerca a todos los protagonistas que intervienen en este nuevo escenario.
Con este marco, recientemente hemos presentado esta palanca de transformación para dar a conocer los objetivos y sobre todo, para implicar al conjunto de la sociedad. Porque en este cambio de paradigma estamos implicados todos, desde los fabricantes, hasta los usuarios, pasando muy especialmente por las administraciones. En este caso desde la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo hemos recibido el apoyo necesario para el inicio del proyecto. Pero ahora necesitamos la implicación de más agentes que perciban la necesidad de apuntalar a la Comunitat Valenciana como un polo de innovación en movilidad.
En este momento que se están analizando los presupuestos generales del Estado y en los que se cuenta con una importante partida presupuestaria para proyectos reales, tangibles, y productivos, desde el MiV reclamamos ese apoyo. Todo el dinero que se invierta en innovación y en industria es una inversión rentable. Afianzamos la industria, generamos proyectos de alto valor añadido, retenemos el talento y, finalmente, generamos riqueza y empleo de calidad.
El MiV busca precisamente atraer innovación, inversiones, estar en el mapa y en el radar de fabricantes de vehículos, de fabricantes de componentes y de soluciones en movilidad y en la mente de diferentes autoridades que diseñan la movilidad y las ciudades del futuro.
Cuando apelamos a las administraciones no lo hacemos solo para solicitarles apoyo financiero, sino también para que confíen en las capacidades que el MiV pone a su disposición. Desde la estructura de esta entidad podemos diseñar y crear desde prototipos industriales, hasta software de gestión o integradores de smart cities. Podemos dar soluciones reales, escalables y sostenibles, siempre desde la perspectiva industrial y desde el territorio valenciano.
Y también apelamos a las administraciones para que sean nuestros embajadores internacionales y vendan nuestras capacidades productivas e innovadoras en los foros europeos donde se debaten las estrategias y megatendencias en materia de movilidad.
Porque no estamos hablando de un ente abstracto cargado de buenas intenciones. El MiV ya se ha puesto en marcha. Comenzó su andadura antes de verano con la incorporación de un agente de innovación, un profesional cuyo perfil encaja con las necesidades de esta estructura: aunar los esfuerzos del ecosistema innovador, con las necesidades de empresas, sociedad, usuarios, consumidores... ciudadanos.
Y para más concreción el MiV apuesta por el desarrollo de proyectos piloto que se puedan comprobar y testar. Es el caso del que ya hemos presentado de la mano de Grupo Segura y de FiveComm y que busca integrar los vehículos guiados autónomos con el 5G para una mejor operatividad en el seno de los centros productivos. Se trata de una tecnología que, en el momento en el que esté comprobada, podrá implementarse en otras empresas, en otros sectores, y en otros ámbitos del conocimiento. De esta manera, la Comunitat Valenciana se convierte en una zona de pruebas de las soluciones que se han planteado.
Una de las ventajas del MiV es precisamente su entorno abierto y colaborativo. El MiV identifica soluciones reales, gracias a todo el ecosistema innovador que hemos integrado e invierte en las soluciones que se eligen. Una vez se pone en marcha un proyecto piloto se comparte y se transfiere el conocimiento para que todo el ecosistema se beneficie y pueda enriquecerse. Se trata, finalmente, de un conocimiento que se retroalimenta y que se engrandece en cada proyecto.
El MiV es un proyecto que resulta estratégico para el conjunto de la Comunitat Valenciana y de su posición en el mapa de la innovación y de la movilidad. Es un tren que nuestra región no puede perder, ya que supone la pervivencia del sector, su continuidad para los próximos 30 años, y sobre todo, la generación de empleo y riqueza. Actualmente, cerca de 25,000 familias viven de manera directa del sector. El objetivo es que ese número crezca con un empleo altamente cualificado y de calidad. Y eso lo proporciona la innovación y las inversiones en nuestro territorio. El MiV no ha comenzado más que su andadura, pero confiamos en que en el año 2021, sin el peso de la pandemia, pueda ser la palanca para la transformación de nuestra industria y para que se aúnen los esfuerzos de investigadores, empresas, administraciones, etc., todo con la única finalidad de satisfacer las necesidades en materia de movilidad de los ciudadanos.