La ‘operación Mestalla’, al albur de que ADU convenza a un fondo

La única puja por el terreno del Valencia CF no logra reunir los fondos en el plazo previsto, pero la firma confía en retomarla junto a un socio americano tras la crisis del coronavirus

Al albur de que ADU Mediterráneo convenza a uno de los fondos americanos con los que mantiene conversaciones. Así se encuentra la operación Mestalla tras la decisión del Valencia CF de retirar a la cooperativa la exclusividad para venderle los terrenos del estadio de la Avenida Aragón. La firma no logró a tiempo el capital para materializar la operación el 31 de marzo, la fecha prevista, y tal circunstancia sitúa al club en un escenario de gran incertidumbre pese a la urgencia que tiene para cumplir los plazos legales para concluir el nuevo campo y mudarse al mismo.

Pero ADU lo quiere volver a intentar. Preguntadas al respecto, fuentes de la entidad aseguran a este medio que su proyecto sigue en pie, y revelan que su intención es presentar al club una nueva oferta de la mano de un fondo americano que avale toda la operación y que estaría interesado en quedarse una de las cinco torres de viviendas, toda la superficie terciaria y también el parking del futuro complejo inmobiliario.

La firma subraya que ya se encontraba en negociaciones con estos dos fondos con el objetivo de incorporar a uno de ellos a la operación y cumplir los plazos acordados. El objetivo era acudir al 31 de marzo con avales por los alrededor de 140 millones de euros que se comprometió a pagar al Valencia, y en ello estaba cuando estalló la crisis del coronavirus, según asegura. En este escenario, ambos inversores habrían trasladado a ADU que suspendían la toma de decisiones sobre nuevos proyectos, motivo por el cual la compañía no pudo contar con ninguno para rubricar la operación. No obstante, la cooperativa destaca que siguen interesados, y que presentará una oferta formal al club de la mano de uno de los dos cuando pase el escenario de bloqueo.

Tal apuesta supone un cambio significativo respecto a su iniciativa inicial. Tal y como reconoció el pasado 6 de marzo, la cooperativa no logró acudir a la firma con adhesiones a la misma por valor del 70% del proyecto inmobiliario, previo pago de 30.000 euros no reembolsables por cada vivienda. Fue entonces cuando ADU, con el visto bueno del Valencia CF, viró hacia otra fórmula: la de incorporar a un fondo que avalara la operación y librara de esa carga inicial a los cooperativistas.

Además, según ADU, el fondo elegido participaría de forma relevante en la operación. En ambos casos su objetivo es quedarse en propiedad la superficie terciaria -alrededor de un 40% de los 100.000 metros edificables-, el parking de 2.000 plazas previsto en el complejo y, además, una de las cinco torres de viviendas con el objetivo de destinarlas al alquiler -según desglosa la firma-. En consecuencia, el proyecto cooperativo se vería reducido a alrededor de 320 viviendas, puesto que 80 quedarían en manos del nuevo inversor.

Los dos fondos, según expone ADU, ya se habrían puesto en contacto directo tanto con el Valencia CF como con Deloitte, la consultora escogida por el club para tratar de vender su estadio. La cooperativa prefiere no revelar sus nombres por el momento. Tan solo precisa que ambos cuentan con sede en Londres. Además, ADU agrega que el consejo rector de la cooperativa, ya constituida, ha dado su visto bueno a que se incorporen a la operación.

En caso de prosperar la incorporación a la puja de uno de estos fondos, caería de la misma Edificios Mestalla SL, que aspiraba a quedarse solo con el terciario. Sabedora de esta circunstancia, la sociedad estaría también buscando la entrada de su propio fondo para tratar de avalar la totalidad de la puja de ADU, si bien la cooperativa parece inclinarse, al menos por el momento, por la propuesta de los inversores americanos.

Y aquí no acaban los cambios en la posible nueva puja de ADU. La cantidad también podría variar. De igual modo que ADU ha perdido la exclusividad para comprar la parcela del Valencia CF, expirado el plazo también lo hace su oferta vinculante. La nueva puja posiblemente sea más líquida, pero de una cantidad inferior a los alrededor de 140 millones previstos.