El horizonte para el sector turístico sigue plagado de sombras
El lento ritmo de vacunación contra el Covid-19 acrecienta los temores a que el ansiado inicio de la recuperación en el sector turístico se dilate aún más tiempo del que se preveía hace sólo unas semanas. Máxime porque las restricciones en España y entre países lejos de remitir en algunos casos incluso se han incrementado en los últimos días. Un escenario que pone en riesgo la Semana Santa, uno de los tradicionales picos de demanda de viajes, e incluso la temporada de verano.
“España no resistirá un segundo verano sin turismo. Es vital diseñar YA una hoja de ruta que incluya una estrategia de vacunación 24/7 y público-privada, protocolos y medidas coordinadas para viajar seguro con los mercados emisores de turistas”. Con este tuit Gabriel Escarrer, consejero delegado de Meliá y uno de los empresarios más autorizados para calibrar los efectos de la pandemia sobre el sector turístico, alzó recientemente la voz para urgir a las autoridades públicas a acelerar la vacunación y advertir sobre la amenaza para el turismo, y dado su enorme peso, para la economía española de todo lo que no vaya en esa línea.
La esperanza para el sector turístico, y para la economía en general, discurre por una inmunización masiva. Es la premisa para que se cumplan los pronósticos lanzados a hace unas semanas por Exceltur, organización que preside el propio Escarrer y que aglutina a la mayoría de los principales actores del sector. Sus previsiones indican que lo peor para el turismo ya se habría superado tras perder 106.000 millones de euros de actividad en 2020, hasta registrar 48.051 millones. Así, en 2021 sus estimaciones fijan un volumen de actividad de 96.369 millones, lo que supondría duplicar el nivel del pasado ejercicio, si bien aún se situaría un 37,6% por debajo del que se alcanzaba en 2019, antes de la pandemia.
Ahora bien, esa remontada se sustentaría sólo en la segunda mitad de 2021, porque en el primer semestre la caída de ventas turísticas todavía se prevén cercanas al 70%. Aún restan, por tanto, muchos meses e incluso años de dificultad y esto requiere, según Exceltur, un esquema de protección permanente del empleo turístico durante todo 2021 y la aplicación urgente de un plan de rescate al sector basado en ayudas directas, como ya llevan aplicando la mayor parte de países europeos desde que se desató la segunda ola de la pandemia. Las medidas específicas para el turismo del Gobierno español se consideran irrisorias para una industria clave para la economía de España y que sin remedio tendrá que seguir siéndolo en su recuperación. Las Comunidades Autónomas, por su parte, sí han desarrollado en algunos casos ayudas directas, como se desgrana en este número de la Revista Turismo, pero que, con caídas de la demanda como las que se están registrando, se tornan del todo insuficientes.