Mandarin Oriental Barcelona estrena temporada con ‘Felicidad’

Carme Ruscalleda, la chef española con más estrellas Michelin, dirige la propuesta gastronómica de uno de los hoteles más emblemáticos de Barcelona, el Mandarin Oriental, Barcelona. El restaurante ‘Moments’ ofrece en los platos del menú ‘Felicidad’ un recorrido por la trayectoria de la cocinera.

Tras unos largos meses de inactividad debido a las restricciones de la pandemia, hace apenas unas semanas reabría uno de los hoteles más emblemáticos de la Ciudad Condal, el Mandarin Oriental, Barcelona. Un hotel que cuenta historias a través de un edificio que forma parte de la crónica reciente de la ciudad. En 1955 se construía la sede del Banco Hispano Americano en una de las principales arterias comerciales de Barcelona, el paseo de Gracia. En 2009, el grupo hotelero hongkonés Mandarin Oriental desembarcaba en España en ese mismo lugar para abrir el que estaba llamado a ser el referente barcelonés de la exclusividad y el lujo. Eso sí, después de una intensa reforma, en la que se respetaron las estructuras originales de la sobria fachada original -así como las tres puertas de acceso, esculpidas por Frederic Marès. De la decoración interior se encargó Patricia Urquiola, siguiendo las líneas del sencillo lujo asiático. Del antiguo banco se aprovecharon las cajas fuertes que hoy forman parte del Banker´s Bar, uno de los mejores arsenales de cócteles y combinados de toda la vida en el centro de Barcelona.

Quien se encarga de que el lujo no decaiga encima de los platos es la chef Carme Ruscalleda, la “emperatriz” gastronómica del hotel. El restaurante Blanc -diseñado por la propia Ruscalleda- está situado en el corazón del establecimiento, un patio interior tan luminoso que da nombre al restaurante. La propuesta de Blanc es el producto natural ligado a las tradiciones catalanas, con los Menús de Carme entre semana y los Domingos con Carme del fin de semana, en el que no falta la copa de cava de bienvenida.

‘Felicidad’ en ‘Moments’

Si hay una estrella -o más bien dos- en el Mandarin Oriental de Barcelona es el restaurante Moments que, desde 2012, lleva ostentando el doble galardón de la guía Michelin. También ha convertido a Ruscalleda en la cocinera más estrellada del panorama nacional, pues cuenta en su haber con otras tres estrellas en su restaurante de San Pol de Mar y otra en Tokio. Las nuevas generaciones se abren paso y al frente de Moments se encuentra también Raül Balam, el hijo de Carme. Para celebrar la vuelta a la actividad no podían haber elegido mejor nombre para el menú de esta temporada: Felicidad. El mismo nombre que lleva el libro de Ruscalleda y se inspira en un “canto a la cocina y al territorio”. El menú Felicidad es, de hecho, un reflejo de la gastronomía y la historia que muestra el libro, desde sus inicios en San Pol de Mar, a Tokio y Barcelona. Los platos exponen una cocina que se reinventa a través de la tradición, la naturaleza y la creatividad. De esta forma, Moments, muestra un camino gastronómico que nace en el Maresme, llega a Tokio y culmina en Barcelona. Los aperitivos son “memoria desde una tienda” y siguen los platos donde hay paisaje, producto, cultura y libertad creativa.

Los platos más destacados de este nuevo menú según la chef son: las diversiones de la tienda, la sopa fría de fresas y tomate, la tostada de mar con gamba, el arroz de esperdenyes o el helado de agua de mar y almendras. A este menú Felicidad le seguirán otros en los que ya está trabajando Ruscalleda bajos los apetecibles nombres de Juegos Olímpicos y Las Maravillas del Mundo.

Todo ello a disfrutar en un decorado exclusivo con los tonos dorados y ámbar del restaurante, responsables de crear una atmósfera relajante y mágica para los comensales. Y con cocina a la vista a través de una ventana en la que se puede ver cómo se elaboran los platos que llegan a la mesa.