Fernando Valdés, Secretario de Estado de Turismo “El Turismo va a recibir 3.400 millones directos del Fondo de Reconstrucción”

En el año más complicado de su historia, la dotación para el Turismo en el Presupuesto del Estado también es histórica: un 331% más que en 2019. Hablamos con Fernando Valdés, el secretario de Estado de Turismo, de las cuentas con las que el sector afronta esta difícil situación, de las ayudas a corto y del futuro que vislumbra

¿Puede hacer una fotografía de la situación del sector turístico en la actualidad?

Es la foto de meses de inactividad. Los datos desde el principio de la pandemia arrojan una situación que no es positiva para el conjunto del sector, con pérdidas superiores al 75% tanto en gasto como en entrada de visitantes internacionales, pernoctaciones y capacidad aérea. Ya venía confirmada esa situación como consecuencia del primer confinamiento y las restricciones a la movilidad internacional que se implantaron entonces. A partir del 20 de junio, cuando se empezaron a levantar las restricciones, al menos en España, podríamos anticipar una reactivación del sector que rápidamente se truncó como consecuencia de las restricciones y cuarentenas a cargo de Reino Unido. A eso le siguieron otra serie de restricciones y un mercado en términos de movilidad muy caótico incluso en el ámbito de la Unión Europea, que estamos intentando recuperar ya con una primera decisión que si bien no es tan ambiciosa como queríamos, sí que por lo menos ordena esa movilidad. Ahora le ha seguido una segunda ola. La situación para el sector no es buena, 2020 ha sido la serie histórica y el año más complicado para nuestro turismo, sus empresas y sus trabajadores.

¿Cómo afecta a las perspectivas del sector el anuncio de la vacuna de Pfizer?

Somos cautos. Pero al mismo tiempo somos optimistas. La imagen de España es muy resiliente. Somos el mercado que más y mejor se recupera frente a otros competidores. Hay una cuestión que es fundamental: teniendo los resortes competitivos, en el momento que empecemos a recuperar cierta normalidad -como la movilidad internacional-, lo que todos los expertos dicen, así como las empresas, es que no ha decaído el ansia por viajar. Desde luego, si se empieza a conseguir cierta inmunización, será un indicativo de que en 2021 se podría recuperar nuestro sector turístico.

Según sus propias palabras, nunca antes se había destinado tanto presupuesto para el Turismo, ¿cómo y en qué se van a repartir los 1.349 millones de euros? ¿Qué parte de esta asignación sale de los fondos europeos?

De esa cantidad, algo menos de 1.000 millones son aportaciones directas del Mecanismo de Resiliencia y de Recuperación de la Unión Europea. En cuanto a cómo se va a repartir, para nosotros es fundamental que el presupuesto de 2021 se estructure en un elemento fundamental, que es la competitividad. Se va a intentar mantener -España, hasta que se actualice, ocupa el primer lugar en el indicador del World Economic Forum- por lo que es muy importante hacer una apuesta muy ambiciosa en términos de inversión, de sostenibilidad y de adaptación de nuestros destinos turísticos. España tiene grandes fábricas turísticas, destinos pioneros, que van a necesitar una inversión importante para mejorar su calidad y recuperar valor en el mercado internacional. Van a ser apuestas transformadoras que van a permitir mejorar la oferta, los servicios públicos o hacer un mejor reparto de las cargas. Esos mismos planes de sostenibilidad no solo tienen que contribuir a mejorar el destino pionero, sino también a poner en valor nuestro destino interior. Vamos a crear realmente un relato de turismo de interior, poniendo en valor mucha de esa infraestructura turística, de patrimonio histórico y cultural y también el destino urbano. España ya tiene experiencias muy notables de lo que significa, sobre todo en mercados lejanos, el posicionamiento de nuestro destino urbano: el ejemplo claro son Barcelona y Madrid. Tenemos que insistir en que España realmente consolide su oferta de destino urbano, bien sea a través del turismo de negocios, del de compras o a través de una oferta cultural muy conectada y rica.

Por otro lado, también vamos a hacer una apuesta decidida por el desarrollo del producto, sin desatender la promoción. España necesita que se desarrolle una cartera cada vez más rica de distintos productos. Convertir experiencias en productos: enoturismo, turismo activo, cultural-gastronómico, de negocios, etc., para desestacionalizar y rodear la experiencia de valor añadido.

Ha mencionado que en 2021 podría iniciarse la recuperación. ¿Cuándo estima que volveremos a los niveles de 2019?

Es demasiado pronto para saberlo. Hay que ser cautos sobre los efectos que la vacuna y la realización de test before travel puedan tener en la movilidad. La gente va a seguir haciendo turismo y España seguirá estando entre las prioridades de los turistas internacionales. La intensidad de la recuperación de los flujos turísticos en 2021 dependerá de la consistencia de la inmunización en nuestros principales mercados emisores y en el control de la transmisión en España.

Respecto a los fondos de reconstrucción de la Unión Europea, el sector turístico reclama unos 30.000 millones de euros, que es cerca de una tercera parte, ¿qué volumen se prevé que reciba el sector turístico?

Se han presentado una batería de proyectos y se ha anticipado la partida que durante tres años va a ir directamente al turismo como la que va a tener impacto en él. Es decir, directamente al turismo se está hablando de una partida agregada de 3.400 millones de euros. Pero cuando las empresas hablan de esos 30.000 millones, si somos líderes mundiales en materia competitiva turística es porque tenemos unas infraestructuras importantes y solo en eso se van a destinar 11.000 millones de euros. Lo somos también por las condiciones de seguridad, y en esta materia se van a invertir 7.000 millones o porque tenemos un sistema sanitario importante y se ha hecho una apuesta definitiva por mejorar nuestras capacidades sanitarias. Lo que entendemos todos es que la capacidad de los estados es muy limitada para responder a las pérdidas del sector económico, no solo el turístico. La apuesta por la competitividad del sector turístico sí queda reflejada en ese mecanismo de recuperación tanto en las medidas concretas como por todo lo que va a rodear a la experiencia turística. Por ejemplo, hay una apuesta muy importante por la sostenibilidad energética y medioambiental. También por la agenda urbana que nos va a dotar de una capacidad de movilidad sostenible muy bien percibida por el turista. Son elementos que nos van a seguir haciendo ser muy queridos por los mercados emisores.

¿Y en cuanto a las medidas de ayudas al sector a corto plazo?

Se está trabajando dentro del Gobierno, y en colaboración con las Comunidades Autónomas y las entidades locales a través de la FEMP, en una relación de medidas para aquellos sectores más afectados por la situación actual. Entre esas medidas, algunas ya están muy avanzadas, como las de la ampliación de carencias y plazos de amortización de los créditos ICO. Se está valorando también la ampliación de medidas que ya se tomaron en el confinamiento, en lo relativo a moratorias de arrendamiento o asociadas a aplazamientos en el pago de la cuota de la Seguridad Social.

Una de las reivindicaciones del sector es la reducción del IVA al 5%, ¿van a plantear alguna medida en este sentido?

También se está valorando. Por parte de Hacienda se está valorando la adecuación o no de una rebaja fiscal a las directivas europeas, ya que se establecen ciertas limitaciones. Probablemente en las próximas semanas se pueda hacer algún tipo de anticipo, pero no puedo asegurar ahora si se va a llevar a cabo o no.

Aquí no hay un problema de demanda. Las medidas son para atender cuáles son los problemas fundamentales como consecuencia de las restricciones que se están imponiendo para el control de la epidemia. En ese contexto sí que se está mirando cómo rebajar las cargas fiscales, la de financiación o laborales de estas empresas.

¿Hay una fecha concreta para ese paquete de medidas de ayuda a corto plazo?

En las próximas semanas se va a llevar al Consejo de Ministros algún paquete de medidas, pero no me atrevería a decir si va a ser en el próximo, o dentro de dos, o tres. Pero sí que hay voluntad de que sea cuanto antes.

El sector ha sufrido un varapalo en cuanto al empleo, ¿se contempla alargar los ERTE más allá del 31 de enero? ¿Habrá que esperar hasta el día 30 para saberlo?

Ya lo anticipó la ministra de Trabajo y me consta que se está trabajando para ver si se puede anticipar o no una decisión atendiendo a cuál es el calendario del estado de alarma. Pero de ser necesario, los ERTE van a seguir. Ya sabemos que el Estado de Alarma va a prolongarse hasta el mes de mayo y hay un consenso bastante generalizado en que se amplíen si es necesario.

¿Cuál es el número de empresas turísticas que se ha destruido ya y cuál prevé que pueda llegar a alcanzarse?

No es posible hacer una estimación a este respecto, no hay variables que nos permitan pronosticar un dato sobre cierre de negocios. Según el Registro de Empresas de la Seguridad Social, el número de empresas en las secciones de actividad de Transporte y almacenamiento, Hostelería y Actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento -secciones en los que la actividad turística tiene un gran peso- se había reducido en un 5,92% comparado con el existente a final de septiembre de 2019.

Las agencias de viaje se han enfrentado a la falta de liquidez por el problema de los reembolsos, que se vuelve a repetir con esta segunda ola ¿va a haber algún tipo de ayuda directa para este sector?

Sí, es una de las medidas que estamos valorando. Lo hemos hecho desde el principio con las dos principales asociaciones, CEAV y FETAVE. Somos conscientes de la realidad actual. Es verdad que nos ha costado cifrarla, precisamente por la propia composición del sector de las agencias de viaje. Han tenido que atender reembolsos cuando ellos no los han recuperado por parte de los proveedores de transporte o de viaje y, en ese contexto, vamos a ver si somos capaces de articular alguna suerte de solución para atender esa situación.

¿Cómo cree que va a afectar al sector turístico la última medida anunciada por el Ministerio de Sanidad para exigir test PCR negativo para entrar en España?

Esta es una medida de control sanitario que contribuirá a generar confianza en que la movilidad se pueda realizar en condiciones de seguridad. Se ha optado por pedir pruebas PCR por ser ésta a día de hoy la que está homologada a nivel europeo y reconocen de forma recíproca los Estados miembros, pero España está siendo muy activa a nivel europeo para que se reconozcan otros test rápidos que resulten menos costosos. En el momento en que otro tipo de prueba diagnóstica de infección activa se homologue a nivel europeo, se incorporaría a este procedimiento. En cualquier caso, entendemos que en estos momentos ésta es una medida que da confianza a la movilidad, que es lo que queremos. Dota de contenido la decisión del pasado 13 de octubre del Consejo de la UE que homogeneizó los criterios para clasificar las regiones europeas en función de su nivel de riesgo -el conocido como semáforo europeo- y aconsejaba medidas coordinadas y proporcionadas para el control de la movilidad desde zonas de riesgo, como la de exigir la realización de un test.

¿Qué previsión tiene de turistas internacionales, gasto turístico y pernoctaciones para 2020 y 2021?

La previsión para finales de 2020 respecto a la llegada de turistas internacionales y gasto es probable que se sitúe en un 80% menos que el año anterior. En cuanto a las pernoctaciones, la pérdida probablemente se sitúe en torno al 70% respecto de 2019.

¿En qué punto está lo que se ha llamado “corredores seguros” con las islas?

Para nosotros, el testing for travel es el elemento fundamental como alternativa a las cuarentenas o a los travel advise que tanto han afectado a las reservas y a los viajes en temporada alta. Así lo hemos defendido en la Unión Europea, pero tuvimos que aceptar un acuerdo de consenso que ya recogía una suerte de homogeneidad en cuanto al reconocimiento de las zonas de riesgo. Antes era absolutamente discrecional, cada estado establecía su propia tipificación. Ahora nos hemos dotado del sistema de semáforos. En la negociación de los corredores, el problema ya no es Canarias, con unos buenos datos de incidencia acumulada, frente a mercados emisores que están ya como otras partes de España por encima de los 500 contagios y con restricciones duras en países como Reino Unido, Países Bajos o Alemania, con una total restricción de movimientos a sus ciudadanos, algunos hasta el 20 de noviembre, otros hasta el 2 de diciembre... Se sigue negociando. Es verdad que, para nosotros, en colaboración con Alemania -que ostenta la presidencia del Consejo- la prioridad es seguir avanzando en las negociaciones en la Unión. Dado que ya nos hemos dotado de esa cromatografía -verde, naranja, rojo, gris- lo importante es dotar de contenido esos colores. Que eso no signifique una restricción para los viajes o una cuarentena, sino que se pueda alternativamente desarrollar mecanismos reconocidos y reconocibles entre los Estados miembros a través del uso de pruebas de diagnóstico.

¿Cómo espera que afecte el ‘Brexit’ a la llegada de turistas desde Reino Unido?

Estamos intentando que la afectación del Brexit a las futuras llegadas de turistas británicos sea lo menor posible. Se está trabajando en medidas de contingencia para evitar efectos perjudiciales en la conectividad, el control de fronteras o la asistencia sanitaria. El turista británico es un turista fiel al destino español y vamos a hacer lo posible para que eso siga siendo así con independencia de la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

¿Se plantean iniciativas parecidas a los bonos turísticos que han llevado a cabo algunas regiones para incentivar la demanda a nivel nacional?

Por el momento no está sobre la mesa debido a las restricciones que hay. Cuando se recuperen ciertos estándares de movilidad es una de las cuestiones que se plantearán y si es o no determinante para la reactivación de la demanda y el consumo del sector.

¿Están trabajando para la entrada de la SEPI en el capital de empresas turísticas a través del Fondo de Apoyo a la Solvencia? ¿Nos puede dar algún detalle?

Ya se aprobó en el Consejo de Ministros la operación de Air Europa. Me van a permitir, que conociendo de otras que están interesadas, no avanzarles esa información. Sí que estamos trabajando adicionalmente para mejorar las condiciones del Fondo para poderlo instrumentar y que incluso empresas de no tanta capitalización puedan acudir a ese fondo, porque sean empresas estratégicas sobre todo a nivel regional o territorial. Hay claramente una voluntad para que el fondo de solvencia y los 10.000 millones de euros de los que está dotado sean realmente estratégicos a la hora de no perder tejido productivo de nuestro sector turístico.