El Gobierno ignora la rebaja
del IVA que sí aplican otros

Moncloa duda de la efectividad de reducir el IVA turístico del 10% a entre el 5% y el 7%, como demanda el sector para paliar los efectos de la pandemia al igual que han hecho otros países

El sector del turismo reclama desde hace varios meses una rebaja del IVA para paliar los impactos de una crisis, la generada por la pandemia, que le ha azotado -y lo sigue haciendo- como a ningún otro. El IVA turístico se sitúa en el 10% desde 2012, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy lo elevó desde el 7% para contrarrestar los efectos de la crisis financiera. Ahora, todas las organizaciones empresariales, incluida la CEOE, exigen al Ejecutivo de Pedro Sánchez una reducción del tipo impositivo que lo coloque en un nivel, según quién lo pide, de entre el 4% y el 7%. La bajada de este impuesto en determinados segmentos turísticos ha sido algo a lo que han recurrido en los últimos meses países como Reino Unido, Alemania, Grecia, República Checa, Turquía, Noruega, Irlanda, Chipre o Bulgaria (ver cuadro página siguiente).

Hasta el momento, la demanda de las empresas ha caído en saco roto, si bien desde el Gobierno no se ha cerrado la puerta completamente. En la edición del mes de noviembre de la Revista Turismo de elEconomista, el secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, aseguró que dentro del paquete de medidas específicas en el que trabaja el Ejecutivo para su próxima aprobación, la rebaja del IVA era una de las posibilidades que estaba sobre la mesa. “También se está valorando. Por parte de Hacienda se está valorando la adecuación o no de una rebaja fiscal a las Directivas europeas, ya que se establecen ciertas limitaciones. Probablemente en las próximas semanas se pueda hacer algún tipo de anticipo, pero no puedo asegurar ahora si se va a llevar a cabo o no”, afirmó. “Aquí no hay un problema de demanda. Las medidas son para atender cuáles son los problemas fundamentales como consecuencia de las restricciones que se están imponiendo para el control de la epidemia. En ese contexto sí se está mirando cómo rebajar las cargas fiscales, de financiación o laborales de estas empresas”.

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha enfriado en los últimos días la opción de bajar el IVA. En una reciente entrevista en ABC, la máxima responsable de las políticas turísticas señaló que “bajar el IVA al turismo solo mejoraría la cuenta de resultados de las empresas”. “En el tema de ayudas directas, tenemos un marco europeo que hace que no sea tan fácil instrumentarlas como consecuencia de las restricciones que nos pone Europa y no sólo para el sector turístico, sino a todo el sector industriales. En el ámbito fiscal creemos que desde el punto de vista de animar la demanda, optar por movilidad segura, los test..., es más seguro que la bajada de impuestos porque al final la bajada del IVA no estimula demanda, solo mejora la cuenta de resultados de las empresas que, por cierto, están cerradas y lo que necesitan son clientes”, asevera la ministra.

Maroto defiende que “hasta el momento ya hemos movilizado más de 5.000 millones de apoyo a todo el sector turístico, desde el transporte a la hostelería, las agencias de viajes...”. Pero para las empresas turísticas el tiempo de las ayudas en forma de créditos avalados por el ICO ya ha pasado -hace meses, de hecho-, toda vez que los impactos de la pandemia han ido pulverizando todas las previsiones y, además, el horizonte para que la movilidad se reanude y, por tanto, se pueda empezar a hablar de un punto de inflexión hacia la recuperación aún se antoja lejano. Imploran en este contexto un paso más en las medidas para que permita la supervivencia del turismo, que es uno de los mayores contribuyentes a la riqueza de España con un peso superior al 12% y al 14% del empleo, de manera directa.

Ante la amenaza de que el Gobierno acometa una subida general del IVA, el sector advierte de las nefastas consecuencias que tendría para el turismo, la economía y el empleo y pone en valor las ventas que una rebaja del impuesto implicaría para la recuperación económica a corto, medio y largo plazo. La Mesa del Turismo propone no ya sólo que no se incremente, sino que “para mantener la competitividad de todo el sector turístico se requiere reducir el IVA al tipo reducido del 7% durante el resto de 2020, y los años 2021 y 2022 completos”. Y para algunos programas, como los del turismo social, pide un IVA superreducido al 4%. Con el 10% actual, de hecho, España se coloca en la mitad para abajo del listado de países con el IVA turístico más elevado. Es el mismo que Francia o Italia, pero superior al de Reino Unido, Alemania, Portugal, Túnez o Malta. Lo superan Dinamarca, Letonia, Turquía, Hungría, Egipto, Croacia, Grecia y Suecia, según los datos recabados por Exceltur. Esta organización pide una bajada del IVA turístico hasta el 5%.