Multimodalidad: una realidad a medio gas

Aunque las compañías se están uniendo para fomentar la multimodalidad, empresas como Iberia apuntan a que queda un largo camino para que sea real.

E n la búsqueda continua de soluciones eficientes y sostenibles para el transporte de pasajeros, las compañías de autobús, tren y aviación como Alsa, Renfe, Iberia y Air Europa han unido fuerzas hacia la multimodalidad. Este enfoque implica la colaboración entre distintos medios de transporte, con el objetivo de ofrecer a los usuarios una experiencia fluida y completa desde el inicio hasta el destino final de su viaje.

En el último año, el número de pasajeros que han optado por la intermodalidad entre Renfe e Iberia ha experimentado un notable incremento. Este aumento se debe, en parte, a la inclusión de destinos como Valencia en la red de Renfe, lo que ha brindado a los viajeros una mayor variedad de opciones para sus desplazamientos.

Dentro de la red de Renfe, las ciudades más demandadas en este servicio intermodal son Sevilla, Málaga y Valencia. Además, se observa una alta demanda hacia destinos internacionales como Buenos Aires, México y Bogotá en América Latina, así como Ginebra, Lisboa y París en Europa. Estas conexiones han despertado el interés de los viajeros, quienes ven en la intermodalidad una forma eficiente y conveniente de llegar a sus destinos.

Iberia, consciente de esta tendencia, ha realizado una inversión significativa en el desarrollo tecnológico de este producto. La compañía lo comercializa tanto a través de su sitio web, iberia.com, como mediante agencias de viajes. Sin embargo, es importante destacar que esta oferta aún no sustituye una verdadera interconexión entre la red de alta velocidad y el aeropuerto de Madrid.

Para que podamos hablar de una intermodalidad genuina entre la alta velocidad y el avión, se deben cumplir una serie de requisitos fundamentales. En primer lugar, sería necesario contar con entre ocho y diez líneas de alta velocidad a la hora, como ocurre en otros países europeos, como Alemania y Francia. Estas naciones, a pesar de tener menos kilómetros de alta velocidad que España, logran conectar sus aeropuertos principales con frecuencias de 10 a 12 trenes por hora.

Asimismo, se requeriría una conexión segregada vía AVE desde las estaciones de Atocha o Chamartín hasta el aeropuerto de Barajas. Esta conexión debería contar con una estación dedicada de alta velocidad en la infraestructura aeroportuaria, con una capacidad suficiente, posiblemente con cuatro a seis andenes. Además, sería fundamental que la estación de Barajas se encuentre conectada con las líneas noreste de alta velocidad, como la que conecta con Barcelona, y con la línea del Norte. Esto evitaría que Barajas sea una estación de fondo de saco y garantizaría un flujo continuo de trenes directos, en lugar de requerir transbordos hacia Atocha o Chamartín.

En un escenario ideal, la estación de alta velocidad en Madrid debería ofrecer acceso directo al área de embarque, permitiendo un transbordo sin problemas entre el tren y el avión. Esto implicaría un proceso de transbordo seamless, es decir, sin necesidad de sacar el equipaje y con controles de seguridad separados. La fórmula es similar a la de los pasajeros en conexión aérea.

Finalmente, sería necesario que los operadores de alta velocidad planifiquen sus servicios con un enfoque especial en el aeropuerto de Madrid, asegurando la presencia de trenes que cubran todo el territorio español en las horas clave de conexión. A pesar de la existencia de tres operadores de alta velocidad en la actualidad y del gran número de destinos que se espera tener para el año 2030, no está claro ni garantizado que esta operación se lleve a cabo de manera inmediata y automática, incluso cuando la infraestructura esté disponible

Por otro lado, Iryo, rival de Renfe en la alta velocidad desde el pasado año, y Air Europa se unieron el pasado 22 de junio para firmar un acuerdo para ofrecer viajes combinados de tren y avión en un solo billete, proporcionando una experiencia de transporte más completa.

La implementación de esta alianza está prevista antes de que finalice el año 2023 y los billetes podrán adquirirse tanto en la página web de Air Europa como en agencias de viajes autorizadas. Esta colaboración permitirá a los usuarios adquirir en un único billete las conexiones ofrecidas por Iryo, que incluyen once ciudades españolas: Barcelona, Tarragona, Zaragoza, Cuenca, Valencia, Albacete, Alicante, Málaga, Antequera, Córdoba y Sevilla. Estas ciudades conectarán con los destinos operados por Air Europa en Europa y América.

Una característica destacada de este acuerdo es que los pasajeros que adquieran estos billetes combinados tendrán la consideración de pasajeros en conexión, lo que les garantizará las mismas ventajas y garantías que ambas compañías ofrecen a sus clientes en la prestación del servicio. Esta sinergia entre Iryo y Air Europa se traducirá en una experiencia de viaje más fluida y cómoda para los pasajeros, eliminando la necesidad de realizar múltiples reservas y trámites.

Simone Gorini, consejero delegado y general manager de Iryo, expresó su entusiasmo por esta alianza estratégica, destacando el papel crucial que desempeñará en la conectividad de España con Europa y América. Gorini enfatizó el compromiso de ambas compañías de ofrecer soluciones integrales que fomenten una movilidad más integrada y sostenible, colocando la experiencia del cliente, la innovación y la protección del medio ambiente en el centro de sus operaciones.

El CEO del operador ferroviario también resaltó la importancia de esta alianza en la estrategia multimodal de la compañía, reconociendo el valor del tren como complemento sostenible para los vuelos de media y larga distancia. Esta combinación de modos de transporte contribuirá a reducir el impacto del cambio climático en los desplazamientos, brindando a los pasajeros una opción más ecológica y consciente. Esta colaboración entre Iryo y Air Europa representa la primera fase de un plan más amplio que se irá desarrollando en los próximos años. Se espera que en 2025, cuando la alta velocidad llegue directamente al Aeropuerto de Madrid Barajas, se alcance una nueva etapa en el transporte multimodal, permitiendo a los viajeros disfrutar de una conectividad aún más eficiente y sostenible.

También en un esfuerzo por ofrecer a los viajeros una experiencia intermodal completa y conveniente, las compañías de transporte Alsa e Iberia lanzaron, en el año 2020 Bus&Fly. Esta iniciativa ha sido implementada en varias ciudades de España, incluyendo Albacete, Alicante, Benidorm, Bilbao, Burgos, Gijón, Granada, León, Logroño, Lorca, Murcia ,Oviedo, Ponferrada, Salamanca, Santander, San Sebastián, Soria, Toledo, Valladolid, Vitoria y Zaragoza.

Bus&Fly se destaca por su enfoque en la organización eficiente de los horarios, permitiendo a los pasajeros combinar diferentes trayectos sin problemas. Además, ofrece la comodidad de emitir un único billete que cubre todo el itinerario, eliminando así la necesidad de adquirir múltiples boletos para cada tramo del viaje. Uno de los principales beneficios de este servicio intermodal es la garantía de alternativas de viaje en caso de que alguna de las conexiones se pierda, brindando a los pasajeros la tranquilidad de saber que siempre habrá una opción disponible.

Víctor López, director general de Transporte de Alsa, se mostró entusiasmado con la propuesta, afirmando que Bus&Fly es el producto intermodal entre autobús y avión más avanzado de Europa. Además, destaca cómo esta iniciativa encaja perfectamente con la visión de Alsa como operador de movilidad sostenible, multimodal y conectada.

Por su parte, Guillermo González Vallina, director de Ventas de España de Iberia, resalta los beneficios que Bus&Fly brinda a las ciudades, al proporcionarles una mayor presencia internacional y acceso a nuevos mercados. Al comercializarse como destinos aéreos con un código IATA correspondiente, las estaciones de autobús en las ciudades de origen y destino se identifican claramente. Además, la implementación de este servicio intermodal representa un paso más hacia la interconectividad en el Aeropuerto de Barajas, lo que se traduce en una mayor utilización de sus infraestructuras.

Con el objetivo de garantizar una experiencia fluida y sin complicaciones para los pasajeros, Alsa e Iberia han establecido horarios coordinados entre los servicios de autobús y avión. Esto permite que los viajeros dispongan del tiempo necesario para realizar el check-in o recoger su equipaje en el aeropuerto, pasar los controles de seguridad y tomar su conexión sin prisas ni inconvenientes.

Alsa lleva también desde 2012 trabajando junto con Renfe para conectar los lugares más turísticos de España que no disponen de conexión directa ferroviaria. Dicho acuerdo se renovó el pasado mes de enero. El acuerdo garantiza el acceso a seis destinos clave: Benidorm desde Alicante, Denia y Jávea desde Valencia, Andorra y Vielha desde Lleida.