Interbus paraliza su venta tras la baja valoración en las ofertas

La venta del grupo Interbus, propiedad de la familia Aguado, se ha paralizado un año después de su puesta en marcha tras no haber alcanzado un acuerdo por ninguna de las propuestas recibidas. La compañía inició la búsqueda de un nuevo inversor el pasado año y ha puesto punto y aparte tras recibir valoraciones por su compañía por debajo de lo esperado. Interbus recibió varias muestras de interés. La propuesta que más avanzó fue la del grupo español de infraestructuras Globalvia, controlado por tres fondos de pensiones internacionales y con músculo suficiente para acometer operaciones inorgánicas. La compañía se centrará ahora en su plan de crecimiento orgánico, en el que será fundamental la renovación de buena parte de sus concesiones en los próximos años. Interbus opera actualmente autorizaciones como la de Madrid-Málaga-Algeciras, una de las más importantes en toda España.