La caída del consumo no frena el negocio de la paquetería

Desde hace unos años, la explosión del comercio electrónico ha desatado el nacimiento de nuevos modelos de negocio como el que lleva a cabo Packlink, la empresa que nació siendo un comparador de compañías con las que realizar un envío. Actualmente, se posicionan como una solución tecnológica para profesionales, a quienes les ofrecen un gran abanico de posibilidades “que son más baratas porque trabajan con más volumen. Nos encontramos en una buena situación, es algo que se hace patente en que hemos crecido un 6% con respecto al año pasado”, aseguran desde la empresa. No obstante, este es un fenómeno curioso, casi una excepción, pues todas las previsiones e incluso un estudio que la misma empresa llevó en su momento a cabo auguraba un frenazo del e-commerce. “Lo que estamos observando ahora es que la situación económica actual está afectando a los hábitos de consumo. Se compra más barato, pero esto no se ve revertido en una bajada sustancial del número de envíos”, apunta Noelia Lázaro, directora de marketing de Packlink.

En concreto, el estudio realizado por la compañía preveía que la crisis del coste de la vida, combinada con la perturbación preexistente en el sector, lastrará mucho tanto las ventas como a los consumidores al borde de esta temporada alta. Como resultado, los vendedores deben ser más inteligentes en su enfoque estratégico sin dejar de analizar los costes operativos para seguir manteniendo beneficios. En contraposición, el comportamiento de los consumidores está cambiando a pasos agigantados, impulsados principalmente por motivos relacionados con el valor y necesidades económicas. Las previsiones realizadas por el estudio de la startup tecnológica coinciden con lo analizado por UNO Logística, patronal del sector.

Pero la realidad se vuelve contradictoria cuando se enfrentan los datos reales. “Desde UNO advertimos de una difícil situación en el corto y medio plazo que lastrará el crecimiento económico en nuestro sector si no se adoptan medidas inmediatas en la dirección adecuada”, declara Francisco Aranda Manzano en una entrevista para elEconomista. Esta declaración se sustenta en una bajada de un 6% en el número de envíos con respecto al año pasado, según los datos de la patronal. No obstante, en lo que sí coinciden de pleno es en el cambio de hábitos de consumo de las personas dada la situación actual y en la importancia que tiene la inversión en tecnología para hacer avanzar el sector logístico. En este sentido, en Packlink consideran que el avance y manejo de la base de datos es el pilar fundamental sobre el que se está trabajando en el que se sustentará la logística del futuro.

Por su parte, UNO señala que la gran transformación en materia tecnológica que ha sufrido el sector ha sido solo el comienzo de un gran cambio de paradigma, en el que las nuevas herramientas digitales son clave para predecir la demanda, eficientar procesos y avanzar hacia una actividad más respetuosa con el medio ambiente. “En este sentido, desde UNO hemos lanzado un proyecto pionero de la mano de T-Systems Iberia, para ayudar a las empresas del sector a determinar qué tecnología es la que mejor se ajusta a su modelo de negocio”, explica Aranda. Sin duda, el 2023 despejará todas estas incógnitas poniendo sobre la mesa la realidad, la de los números.