El BEI concede 40 millones de euros a Cabify para desplegar su flota eléctrica

Cabify pone el broche a sus planes junto al Banco Europeo de Inversiones (BEI). La plataforma de movilidad española ha anunciado la concesión de 40 millones de la entidad comunitaria y su aportación extra de otros 42 que asumirá la propia compañía con recursos propios para sumar 1.400 vehículos eléctricos y avanzar en sus objetivos de descarbonización para el próximo 2025 en España.

En una presentación ante distintos medios de comunicación, Cabify y miembros de la entidad europea han desgranado la hoja de ruta para los tres próximos años. El monto de este proyecto irá dirigido exclusivamente a la flota de vehículos con licencia VTC y la infraestructura de carga necesaria.

Para esta segunda parte del plan, la compañía lanzará a principios de este 2023 una licitación para potenciales aliados, en la que espera que se unan distintos players del sector. El objetivo principal es centrarse en la flota propia de Cabify, la de la compañía tenedora de vehículos Vector. El objetivo del grupo es tener una flota de cero emisiones en tres años y replicar ese mismo objetivo en Latinoamérica, donde su índice de emisiones de CO2 de los desplazamientos de pasajeros y envíos de paquetería está por debajo de la media nacional e internacional, en 2030. Para ello, extenderá esta práctica al resto de flotas que trabajan con la compañía e incluso a otros grupos de la industria.

Sobre cómo completará Cabify la financiación adicional a los 40 millones del BEI, Juan de Antonio, presidente ejecutivo de la compañía, ha explicado que acometerán esta misión con recursos propios y no será necesario buscar más deuda para esta misión, a la vez que ha rehusado dar detalles sobre las condiciones de devolución de este préstamo.

Ahorro de emisiones

El proyecto está financiado bajo el producto de Future Mobility, en el marco del Mecanismo Conectar Europa (CEF, por sus siglas en inglés), un instrumento financiero creado por la Comisión Europea para apoyar la inversión en las redes de infraestructuras digitales, transporte y energía.

Como resultado de la sustitución de los coches convencionales que funcionan con combustibles fósiles por vehículos eléctricos cero emisiones, la compañía espera que el proyecto genere un ahorro medio de emisiones de CO2 de 9 kilotoneladas (kt) al año durante su periodo de evaluación. En abril, Cabify ya anunció que había conseguido optimizar sus trayectos evitando 1.368 toneladas de emisiones de dióxido de carbono anuales.

Juan de Antonio ha declarado que el compromiso de Cabify es “acelerar la transición hacia una movilidad más sostenible”. La descarbonización de la flota en España, ha añadido, “juega un papel clave en este compromiso, y el apoyo del Banco Europeo de Inversiones demuestra el impacto estratégico de este progreso”.

Por su parte, Ricardo Mourinho Félix, vicepresidente del BEI, ha explicado que la institución “se complace en otorgar esta financiación a Cabify para descarbonizar el transporte urbano a través de la electrificación de las flotas de automóviles para los servicios de ride-hailing en España.

Desde la Comisión Europea se ha pronunciado Adina Vălean, la Comisaria de Transportes, que declaró que “con este préstamo, apoyamos a Cabify”, para añadir seguidamente que “todas las iniciativas con visión de futuro son importantes a medida que avanzamos hacia el objetivo de nuestra estrategia de contar con al menos 30 millones de vehículos de emisiones cero en nuestras carreteras para 2030”.

Lo cierto es que Cabify ya lleva años apostando por la sostenibilidad, como prueba el estado de la flota de Vector, donde el 86,8% de sus coches son eco, mientras que el porcentaje restante son cero o tipo C (gasolina o diésel).

Son datos que contrastan enormemente con el parque de coches de España, donde estos porcentajes son muy distintos. Otra cifra que contrasta en el mismo sentido es la edad media de sus vehículos (23 meses en el caso de Vector y 162 en el parque de coches convencional).

El anuncio de Cabify encaja en su Plan de Sostenibilidad, que nació tras haber finalizado el Plan Director de la compañía desde 2019 hasta 2021. Se trata de la nueva estrategia de la empresa para los próximos tres años y que está alineada con los Objetivos de Desarrollo sostenible (ODS) de Naciones Unidas. La compañía explica que este plan se estructurará en torno a tres pilares (personas, planeta y prosperidad) y siete ejes de acción que agruparán a más de 70 proyectos en su primer año de ejecución.

El acuerdo también pone de manifiesto que la entidad europea está invirtiendo en la industria de la automoción y en las infraestructuras de recarga necesarias para mejorar la oferta de movilidad urbana sin emisiones en las ciudades europeas. Hace ya más de cinco años, el Banco Europeo de Inversiones y la Comisión Europea pusieron en marcha el programa Cleaner Transport Facility, cuyo objetivo es promover vehículos de transporte más limpios y crear las infraestructuras fundamentales para su operación.

La entidad supranacional financió en el marco de este programa 15.000 vehículos eléctricos e híbridos en varios países europeos, entre ellos autobuses más limpios (principalmente en Francia y Países Bajos) y financió la construcción de miles de estaciones de recarga para vehículos eléctricos en otros países, como Italia, España y Eslovaquia.

Anteriormente, el BEI ha concedido ayudas similares a plataformas de movilidad como Karhoo, que presentó un proyecto para ampliar su plataforma digital de servicios de movilidad y en este caso desarrollar su tecnología y funcionalidades para aumentar el tipo de flotas gestionadas, desde VTC hasta vehículos compartidos.