El ‘e-commerce’ y los pequeños comercios, una asignatura pendiente

El ‘e-commerce’, que se ha posicionado como una gran oportunidad, no lo es todavía para los pequeños comercios. Supone solo un 10% de las ventas totales de estos singulares establecimientos, lo que, según la Confederación Española del Comercio, empuja a que fracasen en su mayoría.

El auge del comercio electrónico no solo ha llevado a las grandes empresas a reinventarse y aumentar sus ventas, sino que también representa una gran oportunidad para los pequeños establecimientos, quienes pueden utilizar las nuevas tecnologías para expandir sus horizontes de venta.

En este sentido, es importante destacar que en España el aumento del comercio electrónico es notable. Según un estudio de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) publicado en marzo de 2022, el comercio electrónico en España alcanzó un valor de 14.596 millones de euros en el tercer trimestre de 2021, lo que representa un aumento del 16,2% respecto al mismo periodo del año anterior.

Sin embargo y a diferencia de otros países, la presencia de los pequeños comercios en línea sigue siendo limitada. Según la Confederación Española de Comercio (CEC), en el comercio minorista sigue predominando la venta física. La venta en línea, sin embargo, únicamente representa alrededor del 10% de la facturación total.

La nota positiva: en algunos subsectores, como el equipamiento personal, el comercio de electrodomésticos y electrónica, el uso de este canal es mejor y, por tanto, el porcentaje de ingresos es mayor.

Pero hay que mirar más allá. La digitalización es un proceso mucho más amplio que abarca no solo la venta en línea, sino también la implementación de herramientas de gestión que afectan a procesos como la compra, las ventas, la gestión de stock, la publicidad e incluso el marketing.

“El comercio de proximidad debe avanzar inexorablemente hacia esta digitalización para dar respuesta a las necesidades de un nuevo perfil de consumidor omnicanal y mejorar la experiencia de compra”, declara Rafael Torres, presidente de la Confederación Española de Comercio (CEC) en una entrevista para elEconomista Movilidad y Transporte.

Uno de los grandes retos del comercio en los próximos años (y ya en la actualidad) es precisamente la integración de la tienda física y online con el fin de crear la experiencia de compra más atractiva para el consumidor. “Debemos acometer un proceso de digitalización que abarque todos los aspectos del negocio, sobre todo alrededor de la obtención de datos de calidad que permita al pequeño comerciante tomar decisiones de manera más enfocada”, puntualiza Rafael Torres.

La venta por internet se ha acelerado después de la pandemia que azotó al mundo en 2020, y se han extraído lecciones positivas de este fenómeno. Según Francisco Aranda, presidente de UNO Logística, “hemos visto que, como hace un par de años, el movimiento hacia la omnicanalidad, es decir, tener ventas tanto en tiendas físicas como en línea, está siendo adoptado por los siguientes niveles de minoristas, incluyendo empresas medianas y pequeñas tiendas especializadas en barrios urbanos”.

Todo esto ha llevado a las empresas a tener que digitalizarse, con independencia de su tamaño. Según un estudio de la consultora NTT Data, la antigua Everis, el 83% de los pequeños comercios en España han iniciado procesos de digitalización. Esto es algo que desde la Confederación Española de Comercio consideran fundamental para la integración del pequeño comercio en los nuevos modos de compra.

Algo que pone de manifiesto que estas pequeñas y medianas empresas son una parte muy importante en el comercio electrónico se puede ver en los datos ofrecidos por DHL Express. En 2020, el número de envíos B2C prácticamente se duplicó con respecto a 2018, y desde que finalizó la pandemia, los envíos de comercio electrónico se han mantenido estables. “Los últimos datos de los que disponemos, de 2022, muestran que más del 60% de las transacciones de comercio electrónico de DHL Express en España se realizaron en el entorno B2C”, exponen fuentes de DHL Express España.

Un aspecto importante para la incorporación de los pequeños comercios en el mundo del comercio electrónico son los marketplaces, es decir, la agrupación de marcas o tiendas en sitios web para que los usuarios puedan acceder a esas pequeñas tiendas sin incurrir en tanto costo.

Cada vez están surgiendo más marketplaces. Se están produciendo acuerdos de colaboración entre varios comercios que venden productos complementarios entre sí, y por lo tanto, deciden abrir un marketplace en el que puedan vender todos los productos que tienen cada uno de ellos. “De esa manera, aprovechan sinergias y son mucho más eficientes y tienen, además, un escaparate de productos mucho más amplio que si fuera solamente una empresa la que vendiera”, comenta el presidente de UNO Logística.

El optimismo respecto a estos bazares online mostrado por UNO Logística choca con lo que sostienen desde la Federación Española de Comercio. Aunque lo ven interesante, no se muestran tan positivos en este aspecto. “Es cierto que tras la pandemia han surgido iniciativas que pueden resultar interesantes para un comercio local con el fin de ganar visibilidad, pero también lo es que la mayoría de proyectos no triunfan al necesitar grandes inversiones en inteligencia artificial y logística para poder competir mínimamente con otras grandes plataformas”, aclara el presidente de la Confederación Española de Comercio.

Hacia un nuevo modelo

De lo que no hay duda es de que el comercio será cada vez más experiencial. La tendencia es tener menos tiendas, aunque, por supuesto, el comercio de proximidad seguirá existiendo. En el medio plazo, los comercios deberán terminar de digitalizarse.

Las tendencias apuntan a que continuarán desarrollándose fenómenos como la omnicanalidad, la sostenibilidad o nuevos métodos de pago. Además, se emplearán herramientas digitales para obtener datos de calidad que permitan a las pequeñas y medianas empresas del comercio tomar decisiones de manera más certera, basadas en la información obtenida.

En este punto, cobran gran relevancia las empresas logísticas como UPS. Desde la empresa de transporte de paquetería con sede en Bienne (Suiza) explican que trabajan para mejorar la tecnología que ofrecen a sus clientes y les brindan toda la información lo más detallada posible al instante. “Lo que hacemos es tener un kit de herramientas para la web que permiten tener una visión de todo el proceso. De esta forma, sabemos en todo momento qué órdenes de entrada y de salida hay. Esto nos permite manejar nuestra logística de manera más eficiente”, explican desde UPS.