Thales lidera un proyecto europeo para mejorar la seguridad del tren

Thales España se encuentra en pruebas del ‘X2Rail-4 SWOC’ , una nueva tecnología que permitiría el descableado de los elementos fijos de las vías, aumentando la seguridad y permitiendo un mayor conocimiento de datos mediante tecnología 5G.

Thales España, encabezado por Ana Millán, directora de proyectos de innovación en la empresa, está trabajando en una nueva tecnología que pretende aumentar la conectividad del sistema ferroviario dotando a las infraestructuras como son los desvíos, las señales y los pasos a nivel y todos los elementos que hacen que los convoyes se muevan, de tecnología que permita la eliminación del cableado característico del entramado de las vías. Para lograr este objetivo Thales se sirve de tecnologías ya existentes como el 3G, 4G o 5G, siendo esta última la más eficaz para que se puedan gestionar los componentes de los trenes de manera remota.

Con estas medidas lo que se consigue es un ahorro económico, ya que gran parte de la infraestructura física, que conlleva altos costes de mantenimiento, deja de ser necesaria. Con el proyecto X2Rail-4 SWOC también se eliminan de un plumazo los robos del cableado que afectaban gravemente a los pasajeros de trenes. Por otro lado, esta iniciativa pretende ser un sistema de prevención más preciso y eficaz que los actuales, ya que aprovecha esta conectividad para mandar información de todo tipo sobre el estado de los convoyes, logrando así anticiparse a futuros problemas, y alargando por tanto su vida útil y efectividad en servicio, reduciendo un 10% los costes de mantenimiento. Ana Millán asegura que “esto tiene dos beneficios: por un lado, te permite programar ese mantenimiento y hacerlo de manera más eficiente, y, por otro lado, evitas que ese elemento deje de operar. Por lo tanto, nunca tendrás que tener los trenes parados”.

Impulso para líneas regionales

Aunque lo planteado es compatible con cualquier entramado ferroviario, el X2Rail-4 SWOC puede llegar a suponer un impulso para líneas regionales y líneas de baja densidad. Ana Millán asegura que “el hecho de no tener que llevar cableado en los sistemas que controlan los trenes permite ser mucho más flexible. Puedes poner estos elementos más fácilmente en cualquier sitio. Aunque esté alejado de un centro urbano, aunque esté alejado de una fuente de energía, porque podemos usar renovables, o aunque esté alejado de una fuente de comunicación, porque tenemos comunicación inalámbrica”. Con esto se abriría un nuevo horizonte donde la tecnología puede llegar a convertirse en un arma de vital importancia para la lucha contra la despoblación en zonas rurales con infraestructuras ferroviarias.

Todo lo dicho anteriormente nace para culminar en la implantación de trenes que en un futuro se puedan manejar de manera remota y sean capaces de funcionar sin cables. Desde Thales estiman que esto será una realidad dentro de tres años aproximadamente. En la actualidad el proyecto se encuentra en fase de pruebas. Habiendo realizado ya las pruebas en laboratorio, ahora se encuentran realizando las pruebas en campo dentro de una instalación controlada.

Pero para llevar a cabo el proyecto Thales España no trabaja sola, sino qué se encuentra liderando el Shift2Rail. Esta es la primera iniciativa que se plantea a nivel europeo desde el año 2016, agrupando a los actores más importantes del sector: gestores en infraestructuras y entidades de investigación, para impulsar la creación de innovación e introducir las nuevas tecnologías en el sector del ferrocarril con el objetivo de hacerlo más atractivo para el público, hacerlo más sostenible e impulsar la industria ferroviaria europea a nivel mundial.

Este proyecto tiene un presupuesto de 920 millones de euros, de los cuales el 44,5% los pone la Comisión Europea a través de los fondos europeos del Horizonte 2020, que es el programa europeo para subvencionar proyectos de investigación e innovación, y del resto se encarga el sector privado, es decir, las empresas que forman el Shift2Rail.

En cuanto a la organización de las empresas para llevar a cabo el proyecto se hacen dos grandes diferenciaciones. Por un lado, los gestores de infraestructuras: Trafikverket - TRV y Deutsche Bahn AG, de Suecia y de Alemania respectivamente. Estos aportan su experiencia y sus necesidades porque como gestores de infraestructura son los encargados finales de que el entramado ferroviario esté en buenas condiciones.

Por otra parte, están los fabricantes de soluciones, que en este caso son: Thales Deutschland GMBH, ACAP, Indra Sistemas SA, Alstom, Hitachi Rail STS SPA, y Bombardier Transportation Sweden AB. Por último, el proyecto cuenta con un equipo de investigación bautizado como Railenium, que se dedica exclusivamente a la investigación en nuevas tecnologías.