El vehículo por suscripción dobla sus usuarios anuales en 2021 y 2022

Bipi Car es una empresa española de coches por suscripción que nació en el año 2017. “Lo que ofrecemos a los usuarios es la opción de que tengan un coche sin tener la necesidad de comprarlo”, asegura Saul Alonso, director de marketing de Bipi. En dicha suscripción ya están incluidos todos los gastos fijos provenientes en un vehículo: el seguro, el mantenimiento, los impuestos... Todo esto se articula mediante el pago de una cuota mensual cuyo importe varía en función de las características del vehículo elegido por el cliente. “En este modelo no hay entradas, no encuentras finales y, además, damos la posibilidad de poder cambiar de vehículo en cualquier momento si cambian las circunstancias del cliente. Esto creo que es el punto fuerte de Bipi”, explica Alonso.

Desde la compañía también afirman que su crecimiento ha sido exponencial. Bipi, que comenzó en España, actualmente se encuentra operando en cinco mercados, Francia, Italia, Holanda, Reino Unido y España. Este crecimiento se debe en parte a que el año pasado Bipi Car se vendió a Mobilize Financial Group, la filial financiera del grupo Renault, por 100 millones de euros. Con ello, la compañía duplicó las suscripciones entre 2020 y 2021, pasando de 3.200 unidades a 6.300. “De cara a 2022 esperamos que casi se doble ese número”, apunta el director de marketing de Bipi Car.

Por otro lado, la compañía cuenta con una línea de negocio orientada a dar servicio a empresas por la cual las compañías que contraten estos servicios podrán obtener descuentos directamente relacionados con el número de vehículos contratados en la flota. En el marco de esta pata del negocio, la empresa también cuenta con Bipi for Employee, una solución dirigida a los empleados, dando la posibilidad de que se pueda contar con un coche de suscripción a través de la nómina con retribución flexible. “Además, si el vehículo es eléctrico o híbrido podrá beneficiarse de grandes ventajas fiscales”, recalca Alonso.

Desde Bipi también apuntan a que uno de los puntos fuertes de este modelo de negocio es la flexibilidad, no solo en el ámbito del tipo de vehículos a escoger, sino a la hora de la contratación de los paquetes de kilometraje que aseguran que no se cobrará más de lo contratado. Esto abre la puerta al futuro del renting, pudiendo ampliar los kilómetros contratados en cualquier momento. Lo mismo sucede con los seguros, que se pueden ir modificando en función de las necesidades del cliente. Otra ventaja que tiene esta solución es que se puede contratar a partir de un mes y no tiene permanencia. Con precios que oscilán entre los 249 y los 999 euros.