Europa celebra el Año del Ferrocarril, el medio de transporte más seguro y sostenible
A finales de 2020, el Parlamento Europeo aprobó una propuesta de la Comisión para que el 2021 fuera el Año Europeo del Ferrocarril. Las razones esgrimidas para que así se considerara eran claras e indiscutibles. Se trata de un transporte ecológico, económico, cómodo, seguro y flexible. Todo ello en un momento en el que la descarbonización se ha convertido no solo en un reto, sino en una prioridad tanto para los estados europeos como para sus ciudadanos.
Y en ese sentido no hay duda: el ferrocarril es el futuro del transporte, porque es responsable de tan solo el 0.4% de las emisiones de gases de efecto invernadero en la Unión Europea. Al estar en gran medida electrificado, se trata del único medio de transporte que ha reducido considerablemente sus emisiones desde 1990, lo que justifica su papel fundamental en el turismo y el transporte de mercancías sostenible. Más aún si lo comparamos con los viajes por carretera o vía aérea, que suponen casi el 25% de las emisiones de toda Europa.
La seguridad es otro de sus grandes ventajas como se deduce del hecho de que en 2019 en nuestro país hubiera un solo fallecido por accidente de tren, excluyendo arrollamientos a coches o personas, según la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF); frente a 1.101 fallecidos por accidentes de tráfico, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Por otro lado, las redes ferroviarias conectan áreas rurales con grandes capitales; pequeños pueblos y grandes ciudades en nuestro país y en toda la Unión Europea. A pesar de ello, aún son muchos los pasajeros que optan por otros medios de transporte para sus desplazamientos. También el transporte de mercancías aún se decanta por la carretera, con un 75% del total del continente. Y Europa tiene la intención de cambiar esa tendencia. Una de las claves para conseguirlo durante este 2021 será la ejecución en toda la Unión de las normas acordadas en el marco del Cuarto paquete ferroviario, un conjunto de medidas legislativas que tienen como objetivo crear un Espacio Ferroviario Europeo totalmente integrado, que elimine los obstáculos institucionales, legales y técnicos restantes y apoye el crecimiento económico. En este sentido puede decirse que en España jugamos con ventaja gracias a la extensa y moderna infraestructura ferroviaria, a la que Thales, con más de 70 años de experiencia en nuestro país, ha contribuido con sus sistemas de control y seguridad para el transporte
Lo confirman datos como que hemos participado en 2.800 km de líneas de alta velocidad; tenemos 1.200 km equipados con sistema ETCS; y 1.980 km, con sistemas de telecomunicaciones. Nuestras innovadoras soluciones integrales para las líneas ferroviarias potencian el desplazamiento fluido de viajeros y mercancías. Y lo hacen consiguiendo que los viajes sean más rápidos, más seguros y sostenibles. El ferrocarril es el medio clave para la vertebración de España, y la descarbonización del transporte, como demuestra el hecho de ser una de las apuestas del Gobierno de España para el plan de recuperación. Y esta es una de las razones por las que Thales está en continua búsqueda de nuevos sistemas que supongan un impacto disruptivo en la movilidad eficiente y sostenible a nivel nacional. Es decir, que ahorren tiempo y favorezcan el compromiso de alcanzar las cero emisiones netas lo antes posible.
Dentro de la búsqueda de nuevos sistemas, Thales focaliza parte importante de ese esfuerzo en uno de los desafíos más relevantes para el ferrocarril en nuestro país: su transformación digital. Algo que se está llevando a cabo gracias a un profundo conocimiento de las operaciones, desde equipos de campo hasta sistemas totalmente integrados para maximizar la eficiencia de las operaciones y el mantenimiento. Nuestras tecnologías digitales están al servicio de la industria ferroviaria en todas nuestras actividades, desde el desarrollo del tren autónomo a la infraestructura conectada para mantenimiento predictivo, pasando por soluciones de seguridad basadas en inteligencia artificial. Todo ello gracias a los más de siete mil millones de euros invertidos desde 2015 en tecnología digital. Porque la modernización y el aumento de capacidad y eficiencia junto con la búsqueda de la descarbonización vienen siempre de la mano de la inversión.
Inversión que también se trasluce en campos como la ciberseguridad, uno de los puntales de la experiencia de Thales. Porque la digitalización, el aumento de la conectividad y la automatización han conseguido trenes más rápidos, más seguros, más cómodos y más puntuales... pero también más vulnerables. En ese sentido, Thales garantiza los sistemas críticos con soluciones ciberseguras por el propio diseño de los mismos. Al tiempo, desarrollan servicios de ciberseguridad en tres categorías: mantenimiento, auditoría y supervisión. El objetivo de estos sistemas es prevenir, detectar y reaccionar rápidamente a los posibles ataques.
En cuanto a la capacidad de las redes, una de las claves para conseguirlo es, sin duda, contar con una señalización que, además, garantice la máxima seguridad. Y en esto Thales también hace gala de gran experiencia, tanto en vías urbanas como convencionales. Lo mismo sucede con los sistemas de comunicación y supervisión, para los que contamos con soluciones integradas propias, aunque también somos capaces de integrar sistemas heredados y sistemas de terceros.
Finalmente, la gestión de cobros ha de ser moderna y eficiente. Sólo así viajeros y empresas de ferrocarril mantendrán una confianza mutua basada en el confort y la seguridad. Con 50 millones de transacciones de billetes diarios en 100 ciudades distintas, Thales sabe de qué se trata, cómo mejorar la experiencia para los viajeros que quieren comprar en estaciones o a bordo. Con toda esta experiencia acumulada, no solo en líneas de ferrocarril español, sino en ciberseguridad, digitalización, señalización, comunicación, venta de billetes y servicios,
Thales confía en un futuro en el que el ferrocarril se convierta en el medio de transporte prioritario para los ciudadanos europeos. Por eso nosotros sí podemos decir que 2021 es el Año del Ferrocarril. Es nuestro año.