IATA pide que se agilice el proyecto de Cielo Único Europeo

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha solicitado a la Comisión Europea y a los Estados miembros de la UE que se agilice el proyecto de Cielo Único Europeo, dado que la gestión del tráfico aéreo en el continente se enfrenta a un colapso y la iniciativa se encuentra estancada

El proyecto de la creación del Cielo Único Europeo (SES) con el que se quiere reformar el sistema de gestión del tráfico aéreo en el continente europeo se encuentra estancado, y tanto desde las instalaciones aeroportuarias, como desde las compañías aéreas se apunta que para los próximos 20 años el incremento de vuelos puede llevar a una congestión que perjudique todo tipo de operación aérea en los cielos de Europa.

A principios del año 2004 desde la Comisión Europea se trazó una hoja de ruta para poner en marcha un mecanismo que mejorase la gestión del tráfico aéreo, pero esta iniciativa ha chocado, una y otra vez, con la falta de interés de los Estados miembros, hasta el punto de que 17 años después la iniciativa se encuentra estancada, pese a las recomendaciones que se hacen desde la CE, como por ejemplo los intentos por parte de la Comisaria Europea de Transportes, Adina Valean, quien destaca que un sistema eficiente de gestión del tráfico aéreo “supone rutas más directas y menos gasto de energía y se traduce en una reducción de las emisiones y un ahorro de costes para nuestras compañía aéreas”.

La Comisión Europea lleva proponiendo en estos casi 17 años de inicio de la búsqueda de soluciones al tráfico aéreo en el continente, una actualización del espacio aéreo, que se modernice su gestión y se establezcan trayectorias de vuelo más sostenibles y eficientes, con lo que se pueden llegar a reducir hasta en un 10% las emisiones de CO2.

La propuesta de Cielo Único Europeo no es sino alcanzar una nueva coordinación entre los diferentes centros de control nacionales que actualmente forman una red de 27 centros de control, uno por país de la Unión Europea, para dejarlos en nueve zonas de control que agrupen a varios países por proximidad.

Con ello, desde Bruselas se piensa alcanzar soluciones para evitar la tan temida congestión y superar las trayectorias de vuelos deficientes; promover un mercado europeo de servicios de datos necesarios para la mejorar la gestión del tráfico aéreo; y, racionalizar la regulación económica de los servicios de tránsito aéreo prestados en nombre de los Estados miembros para estimular un mayor grado de sostenibilidad y resiliencia.

Pero la inacción de los gobiernos ha paralizado este objetivo, y parece ser que mientras no se produzca una propuesta legislativa en el marco de la UE, que obligue a los Estados miembros no se va a encontrar una solución.

Desde la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), su nuevo presidente, Willie Walsh, pide que se agilice la puesta en marcha del proyecto, dado que “el SES es vital para una industria europea del trasporte aéreo segura, sostenible y eficiente”.

Pero Walsh va más allá y acusa a los Estados de la UE de ser intransigentes, y añade que su “egoísmo y sus proveedores de servicios de navegación aérea amenazan con colapsar el último esfuerzo de la Comisión”.

La asociación internacional reclama a los ministros de transporte que adopten en el próximo Consejo de Transportes que se va a celebrar el 3 de junio un enfoque general que sea más “ambicioso” y que esté en consonancia con la propuesta de la Comisión.

Desde IATA se recuerda que en este momento de crisis cuando las compañías aéreas europeas han perdido 27.000 millones de euros, es fundamental poner en marcha un sistema común de gestión del tráfico aéreo en Europa, que impulse soluciones ante una situación tan crítica como la actual.