¿El empujón final?

El Gobierno empieza a hablar del fin de la obligatoriedad del uso de mascarilla. El efecto de la vacuna se nota en las residencias, donde los índices de contagios caen y los ancianos ya hacen algunas excursiones, como las que organiza EDP en los teatros de Madrid. Las comunidades autónomas aflojan los toques de queda y Reino Unido, donde los ritmos de inoculación son más rápidos, habla de levantar todas las restricciones para el 21 de junio. Las reservas de cara a verano lo han notado, principalmente en nuestro país, aunque la demanda es baja. Los niveles de contagios todavía son altos y se sigue hablando de cepas con altas tasas de mortalidad que ponen en duda el efecto de la vacunas y es cierto que gran parte de la caída de la incidencia y las hospitalizaciones responden a las limitaciones a la movilidad y el ocio por lo que existe una alta posibilidad de que haya repuntes cuando todo se abra, ralentizando la vuelta a la normalidad.

Entre las buenas noticias y la incertidumbre se vislumbra la luz al final del túnel en el cuarto trimestre del año, que es cuando las aerolíneas, trenes y autobuses podrá reiniciar una reactivación sostenida que, si todo va bien, les llevará a poder poner a la venta el 80% de su capacidad previa a la pandemia. Por su parte, Renfe confía en la recuperación en la segunda mitad del año ya que ha relanzado su AVE de bajo coste, comprado una empresa en el Este (Leo Express) y adjudicado el macrocontrato de trenes de Cercanías. Grandes planes de crecimiento a futuro en pleno hundimiento. Así, quedan seis meses de lucha, de seguir aguantando, de dar el empujón. Seis meses en los que la actividad de las empresas de transporte de pasajeros seguirá siendo baja, sobre todo en marzo y abril. La Semana Santa se ha dado más que por perdida (Ryanair o easyJet están hibernando), IAG y Lufthansa asumen que operarán con la mitad de su capacidad de promedio en 2021, situando las mejoras tras el verano, que volverá a ser doméstico. Muchas empresas tienen problemas para sobrevivir por lo que urgen ayudas directas para aguantar a este último verano.