La mercancía en tránsito amortigua la caída del tráfico portuario español

El sistema portuario español, ha cerrado el año 2020 con un descenso de movimiento de mercancías inferior al que inicialmente se preveía desde Puertos del Estado a la vista del desarrollo, mes a mes, que lastraba la crisis sanitaria por el Coivd-19. El volumen del tráfico gestionado por los 46 puertos de interés general, coordinados por las 28 Autoridades Portuarias responsables de los mismos, se ha situado en 515,68 millones de toneladas, lo que supone un retroceso de un 8,6%. Este panorama es inferior al que se esperaba, cuando después del verano el presidente del ente público, Francisco Toledo, que ha valorado positivamente estos resultados, recordaba que al cierre del primer semestre de 2020 “pronosticábamos un cierre en negativo que nos podría hacer perder entre el 10 y el 16% de los tráficos”.

Ante esta recuperación con una menor caída, el presidente de Puertos del Estado vaticina que “durante este ejercicio (2021) veremos una recuperación gradual de los tráficos hasta alcanzar cifras similares a 2019”. En ese año se alcanzó un volumen de 564,50 millones de toneladas.

La “culpa” de ese menor descenso la ha tenido el movimiento de las mercancías en tránsito, es decir, aquellas que utilizan los puertos españoles como punto de escala con destino a otros países, así como el tráfico en contenedores, que han aumentado su volumen con respecto al año anterior. En medio de la pandemia, la posición estratégica de los puertos españoles en el contexto del comercio mundial y de las principales rutas marítimas, han permitido que las mercancías en tránsito siguieran creciendo hasta alcanzar los 155,95 millones de toneladas, y aumentar en un 0,84% con respecto al año 2019. Lo que demuestra que un tercio de las mercancías movidas en las infraestructuras portuarias españolas tienen como destino final otros países del entorno. Se trata del único tráfico que ha cerrado en positivo en este ejercicio.

De las 28 Autoridades Portuarias, diez han cerrado en negativo, destacando la fuerte caída de Barcelona por encima del 10%; o la de Tarragona, de un 55,45%. Mientras que otras, como es el caso de Coruña, Alicante o Cartagena, presentan espectaculares crecimientos para este tipo de tráficos.

La Bahía de Algeciras es la Autoridad Portuaria por la que más mercancía de este tipo ha transitado, con 73,72 millones de toneladas (0,06%); seguida de Valencia, con 39,35 millones (7,2%); Barcelona, 20,16 millones (-10,45%), y Las Palmas, 12,07 millones (10,41%).

Por su parte, la mercancía general, la que más valor aporta a la cuenta de resultados de los puertos, y que supone cerca del 52% del total movido, ha recuperado en el último cuatrimestre gran parte de lo perdido desde el inicio de la pandemia. Productos como los abonos, aceites, frutas y hortalizas han contribuido con sus incrementos a alcanzar los 261,55 millones de toneladas, un descenso del 4,54% a 2019. Valencia y Algeciras han aumentado sus tráficos, un 0,73% y un 1,89%, respectivamente, para 75,96 millones de toneladas y 74,71 millones. Mientras que los otros dos puertos que más mercancía mueven anualmente, Barcelona y Las Palmas, presentan caídas del 9,11% (41,58 millones de toneladas) y del 2,72% (15,21 millones) respectivamente.

En cuanto a los graneles líquidos, el segundo grupo de mercancías más numeroso con 167,10 millones de toneladas, el 33% del total, descendieron un 10,7%, lastrados por la bajada de biocombustibles, petróleo crudo y fueloil, aunque también ha habido productos que se han incrementado como el gasoil.

Los graneles sólidos, con 77 millones de toneladas movidas, el 15,2% del total, han sumado un mes más de descenso, constatándose el desplome del tráfico de carbón (-24,3%), debido al acuerdo de cerrar centrales carboeléctricas para mitigar el cambio climático, y algunos productos de construcción como el cemento (-9%) y el asfalto (-6,7%).

El movimiento de contenedores, Teus, una de las principales formas del tráfico de mercancías, ha descendido un 4,3%, al registrarse 16,7 millones de unidades, aunque en el tránsito, este servicio con algo más de 9,3 millones de unidades ha calcado prácticamente la cifra registrada el año anterior, con una contracción de solo el 0,2%. De hecho, la cuota de contenedores en tránsito de los puertos españoles en 2020 sobre el total es la mayor de su historia. Se situó el año pasado en el 56% del volumen total de contenedores, muy superior a la registrada en 2019, cuando el tránsito supuso el 53,7% del total de teus registrados en los enclaves españoles.

El tráfico que más ha sufrido este año los efectos de la pandemia, ha sido el Ro-Ro, es decir el de vehículos embarcados en buques que llevan así las mercancías, bien para evitar las carreteras, o por ser conexiones de la costa a las islas o entre islas. Durante 2020 se ha registrado una caída del 13,94 %, con un volumen de carga de 56,60 millones de toneladas. Los cinco principales puertos que soportan la mayor parte de este servicio de carga, registran importantes caídas. Baleares es quien presenta el peor registro, con un descenso del 21,47% (10,71 millones de toneladas). Seguido por Barcelona, un -19,90% (9,25 millones); Las Palmas, -17,17% (3,68 millones); Valencia, -10,79% (11,23 millones); y, Santa Cruz de Tenerife, -9,230% (3,69 millones).

Respecto a los pasajeros transportados, tanto en régimen de pasaje como en cruceros, el año se cerró con una caída del 64,52%, y 13,34 millones de viajeros. En el caso particular de los cruceristas, el desceso es del 87,11%, con 1,37 viajeros. Hay que tener en cuenta que sólo hubo cruceros con normalidad en enero y febrero. El total de buques mercantes fue de 117.747, un 31,12% menos que en 2019