El autobús, un sector de futuro y viable

En pocas semanas se cumplirá un año desde el comienzo en España de la pandemia provocada por el Covid-19, que cambió nuestras vidas de forma súbita y profunda. La situación, pese a que el horizonte de las vacunas parece más próximo, se está alargando demasiado y las medidas de control y reducción de la movilidad siguen siendo una de las claves de la lucha contra la trasmisión de la enfermedad. Muchos sectores profesionales nos estamos viendo seriamente afectados por estas limitaciones, pero en el caso del transporte en autobús la amenaza de desaparición de empresas se cierne sobre al menos un tercio del sector, lo que significaría la pérdida de 30.000 empleos, la condena a muchos territorios a la incomunicación y la desaparición de un servicio público esencial.

Nuestro sector era viable y volverá a serlo cuando todo esto termine, pero para garantizar su supervivencia son varios los frentes en los que hay que actuar con rapidez y eficiencia, ya que las pérdidas del conjunto de empresas de transporte de viajeros por carretera alcanzaron los 4.000 millones de euros en 2020 y se estima que solo en el primer semestre de 2021 serán de unos 2.400 millones. Por eso y hasta que la actividad no comience a recuperarse, es decir cuando el 70% de la población esté vacunada, es necesario que las administraciones estén coordinadas para que se pueda seguir garantizando un servicio esencial como es el de la movilidad colectiva en todo el país, que asegura el acceso a los servicios básicos del estado del bienestar, como la sanidad, la educación o el trabajo.

Las medidas adoptadas inicialmente por el Gobierno han sido positivas, pero debido a la duración de la crisis sanitaria éstas se han quedado escasas, siendo necesario un nuevo paquete de medidas urgentes para garantizar la prestación de los servicios de transporte, la supervivencia de las empresas y la preservación del empleo.

En la Confederación Española de Transporte en Autobús (CONFEBUS) estamos pidiendo al Gobierno Central que apruebe un nuevo Fondo de Compensación en 2021 para que las Administraciones puedan asumir el déficit generado por los servicios de transporte en autobús en cada uno de sus territorios. Sin este fondo, las administraciones no podrán hacer frente a los costes adicionales que las medidas restrictivas adoptadas durante estos meses han generado en estos servicios, con lo que esto supondría para muchas de las empresas que los prestan. En este sentido también es de suma importancia que se agilicen los trámites para que el dinero de las ayudas llegue a la mayor brevedad posible.

Contribuir al sostenimiento de nuestro sector es, en mi opinión, contribuir a la configuración de un país más justo, moderno y ecológico, por lo que es necesario que se configuren una serie de medidas como la ampliación de la moratoria en el pago de los contratos de crédito, renting y leasing de vehículos, la prolongación de los ERTES y exenciones fiscales hasta que pueda retomarse la actividad. Además, nuestra actividad está muy vinculada al turismo, por ello también son necesarias ayudas directas para las empresas, que en la mayoría de los casos han visto reducidos a cero sus ingresos en estos meses.

Todos estamos deseando volver a viajar y es necesario garantizar, en las mejores condiciones, la supervivencia de las empresas que lo harán posible, porque no debemos olvidar que el transporte en autobús es la modalidad de transporte colectivo que con diferencia más viajeros mueve en España, ya que gracias a su capilaridad permite llegar donde otros modos no lo hacen, y es pieza clave de la cadena y oferta turística -excursiones, congresos, ferias, circuitos, eventos, etc.-, garantizando la movilidad de los turistas en nuestro país.

Me gustaría dirigirme también a las Comunidades Autónomas para pedirles su apoyo y que hagan posible que los contratos públicos de transporte escolar, suspendidos por motivo del estado de alarma y de la pandemia, terminen de compensarse y pueda extenderse su duración para dar estabilidad a las empresas que prestan este servicio.

Es necesario que las Administraciones corrijan la morosidad con el sector y que, además, dada su estrecha vinculación con el turismo, como ya hemos señalado, se tenga en cuenta al transporte de viajeros por carretera en los planes de relanzamiento y apoyo turístico.

También quiero, desde esta tribuna, instar a las Administraciones a que pongan los medios necesarios que permitan a las empresas del sector aprovechar los Fondos de Recuperación de la Unión Europea, para relanzar a una industria como la del transporte de viajeros por carretera, que cumple los objetivos políticos que persigue Europa y que es columna vertebral de la movilidad sostenible. Estos fondos son una extraordinaria oportunidad para profundizar en el proceso de descarbonización y de digitalización que el sector ya había comenzado, pero que recibirá con estos fondos un gran impulso.

Las administraciones deben tener en cuenta nuestras peticiones y propuestas, porque nos estamos jugando la continuidad de miles de empleos y la viabilidad, no ya de un sector, sino de todo un modelo productivo fundamental para la economía de nuestro país.

Por último, voy a terminar refiriéndome a la que considero la medida más necesaria y en la que creo que tenemos que exigir al Gobierno Central y a las Comunidades Autónomas coordinación, sentido de la responsabilidad y eficiencia. Se trata del Plan de Vacunación que es urgente que se acelere con el objetivo de llegar al verano con el 70% de la población vacunada. Será en este momento cuando se inicie la senda de la recuperación de la movilidad y de la economía en su conjunto, y comiencen a sanar las profundas heridas que esta crisis está ocasionando.