Tener información en tiempo real del volumen de pasajeros

Las aglomeraciones son una de las principales causas de insatisfacción para los usuarios de los transportes públicos, de ahí que es importante buscar sistemas que las eviten

La solución DIVA (análisis de video inteligente por distribución) es una de las soluciones que aporta la empresa Thales para ser aplicada por los operadores de transporte público sobre el volumen de pasajeros en tiempo real. Con ella se puede controlar el distanciamiento físico y dirigir al pasajero en caso de aglomeración. Esta solución disminuye las aglomeraciones al reducir los tiempos de espera y, como consecuencia, mejora la seguridad general del pasajero, la comodidad y su experiencia de viaje. Algo que se ha ido aprendiendo en el último año con el desarrollo de la pandemia causada por Covid-19.

DIVA busca la mejora en el sector ferroviario de la gestión de manera efectiva de las aglomeraciones en estaciones y a bordo de los trenes, ofreciendo a los operadores la posibilidad de tener un mejor control de la situación.

El mayor uso de los transportes ferroviarios origina que los operadores ferroviarios se enfrenten a nuevos retos en cuanto a la seguridad de los pasajeros, quienes necesitan poder desplazarse libremente en estaciones y plataformas para embarcar y desembarcar de los trenes de manera rápida y segura. Estos requisitos son fundamentales para disfrutar de un funcionamiento fluido en la red ferroviaria, y las aglomeraciones lo dificultan

Efectivamente, resulta difícil gestionar las aglomeraciones. Primero, porque los ferrocarriles son complejos y hay cientos de localizaciones que supervisar, incluidos los trenes. Segundo, porque si los operadores de transporte detectan aglomeraciones, también necesitarán una vía para dirigir a los pasajeros hacia zonas menos ocupadas en los trenes y en las plataformas.

El sistema DIVA de Thales utiliza las cámaras CCTV ya existentes en los trenes y en los andenes para medir la cantidad de personas, sin necesidad de sensores adicionales. El volumen de personas se calcula en tiempo real gracias al análisis de vídeo y se dirige a los pasajeros a través de las pantallas dispuestas en la plataforma, que muestran los vagones del próximo tren que están más o menos concurridos con tres niveles de ocupación -los códigos por colores en rojo, verde y amarillo se emplean para indicar la densidad-.

En paralelo, los mapas de calor de las estaciones y los trenes se utilizan en los centros de control de operaciones (CCO) para supervisar el movimiento en todo el sistema. El análisis de vídeo también se puede aplicar en muchos otros casos de uso de transporte como, por ejemplo, para detectar el equipaje desatendido, la entrada ilegal a las plataformas y ver si todavía quedan pasajeros a bordo.