El seguro de autos ante la nueva movilidad

La movilidad se está transformando radicalmente. Ante esta situación, el sector asegurador debe adaptarse para responder a las nuevas demandas de los consumidores.

Uno de los muchos sectores en los que se está produciendo una gran revolución en los últimos años es el de la movilidad, que está cambiando vertiginosamente el escenario que había marcado, sin demasiados cambios más allá de la progresiva modernización de los vehículos, las últimas décadas. Muchas empresas han propiciado o aprovechado el cambio, desarrollando nuevas vías de negocio; muchas personas han decidido observar y aprovechar las nuevas posibilidades de desplazamiento; y muchos nuevos actores (o factores) han entrado en juego, diversificando las maneras de desplazarse y posibilitando además numerosos modos de combinar unos medios de transporte con otros.

A la movilidad tradicional se le suman ahora varias nuevas alternativas, las que proponen los vehículos ACE (autónomos, conectados y eléctricos y compartidos), que ganan espacio en el mercado. O eso es al menos lo que indica un informe de Capgemini, que resalta que en un par de años la adopción de estas alternativas de movilidad en entornos urbanos se duplicará, pasando del 29% actual al 58%.

Cambios en el sector

Los cambios en la movilidad repercutirán directamente -o, mejor dicho, ya lo están haciendo- en profundas modificaciones en la industria aseguradora, que (bien por iniciativa propia u obligada por la situación) trabaja a marchas forzadas para adaptarse a estas nuevas circunstancias, mientras mira de reojo a un futuro que nunca parece estabilizarse.

Uno de los grandes retos del sector es crear productos que respondan a esta movilidad tan variada, obviamente mientras siguen asegurando la movilidad de toda la vida. Muchos de los nuevos seguros de movilidad han cambiado el foco. Si en la tradicional el medio de transporte es el objeto a asegurar, en las nuevas maneras de desplazamiento el objetivo es asegurar a la persona, sea cual sea el modo de transporte del que haga uso. Por este motivo, parece claro que los modelos de negocio asegurador estarán cada vez más centrados en la personalización, un objetivo en el que se ha avanzado mucho,pero en el que queda mucho camino por recorrer. Capgemini destaca que un 42% de los asegurados prefieren tener una sola póliza que les cubra, independientemente del medio que utilicen para desplazarse: tanto si conducen un vehículo como si hacen uso de un servicio de transporte compartido.

En este aspecto podemos poner como ejemplo un producto desarrollado hace poco por Seguros Catalana Occidente. Se trata de un seguro de movilidad personal que ampara al cliente en sus desplazamientos independientemente del medio de transporte que este utilice: desde sus propios pies hasta los vehículos de alquiler y sharing, pasando por los de movilidad personal (bicicletas, patinetes, overboards, segways, monociclos...) tanto en propiedad como de sharing, así como los transportes públicos, los taxis y los vehículos de transporte colectivo, los conocidos como VTC. En cualquiera de estos desplazamientos la persona estaría asegurada, cubriéndosele los riesgos a los que puede exponerse cuando se mueve a través de garantías como accidentes, responsabilidad civil, daños materiales, asesoría jurídica o pago del servicio de transporte complementario y de otros gastos en caso de siniestro.

Sin embargo, en líneas generales todavía parece quedar mucho camino por recorrer en la adaptación del sector a los nuevos tiempos en materia de movilidad. O al menos eso refleja el citado informe de Capgemini, que indica que menos de un tercio de las aseguradoras (en concreto, un 29%) reconocen tener la capacidad necesaria para desarrollar productos adaptados, aunque el 21% de las compañías de seguros sí que afirman haber avanzado para satisfacer esas nuevas demandas del mercado y de los consumidores.

Según el instituto de investigación, para realizar con éxito ese proceso de cambio es importante no sólo que las empresas aseguradoras aprovechen su experiencia en gestión de riesgos, sino que establezcan alianzas con firmas tecnológicas como insurtechs y bigtechs que estén especializadas en movilidad con el fin de estudiar vías de negocio, desarrollar productos y generar soluciones.