Soluciones para afrontar los retos que impone una mayor longevidad
El 34% de los españoles confiesa no estar preparado para afrontar los desafíos financieros que supone una vida más larga. Por eso, el sector asegurador puede posicionarse como un actor relevante en la gestión de los desafíos que supone vivir más. El profesor José Antonio Herce suele afirmar que, si el aumento de la esperanza de vida produjera ruido, no podríamos dormir. Pero vivir más años tiene consecuencias, riesgos e implica nuevas preocupaciones para los españoles. Y aquí es donde el seguro puede jugar un papel relevante en ofrecer seguridad y protección a partir de los 55 años.
En los últimos años compañías como Mapfre, Generali o Nationale-Nederlanden han desarrollado productos y servicios aseguradores dirigidos a mejorar la calidad de vida y la previsión del colectivo sénior. La economía silver, o de las canas, se posiciona como un factor fundamental en el futuro. Envejecer ya no es lo que era, cumplir años ahora se traduce en una mayor actividad, más inquietud por aprender, por viajar, por disfrutar de los años ganados a la esperanza de vida tras la jubilación. Pero contar con una tranquilidad financiera y buena salud son fundamentales.
Ahora el seguro ha mejorado las condiciones de contratación de pólizas que antes los mayores de 60 años tenían prácticamente vetadas. O exigían una sobreprima para poder acceder a ellas. Ahora, los mayores de 55 años pueden acceder a seguros de protección personal a un precio más razonable y con mejores condiciones. Es una de las reivindicaciones de la sociedad, que el seguro les acompañe en cada fase de su vida, adaptándose a las necesidades específicas de cada periodo vital. Profundizamos en este aspecto en nuestro reportaje de portada, en el que analizamos las oportunidades que se abren para el sector asegurador acompañando al colectivo sénior.
Aunque no es el único colectivo en el que el sector asegurador está centrando su atención. Los más jóvenes también suponen un desafío para las aseguradoras, especialmente en lo que al seguro de vida se refiere. Atraer a los más jóvenes -en todos los sentidos- es uno de los retos de una industria que aparenta ser más antigua e inmovilista de lo que en realidad es. La Generación Z es el presente y el futuro del talento profesional, y uno de los más complicados de atraer y retener. También analizamos cómo es el comportamiento de los más jóvenes ante la protección del seguro de vida.
En el número de febrero de elEconomista Seguros también repasamos algunos de los temas más relevantes para el sector y el consumidor final, como los problemas que están teniendo algunas industrias para asegurar su actividad. Es el caso de las industrias del reciclaje y la gestión de residuos, y es un asunto que preocupa, y mucho, a los mediadores de seguros profesionales.